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Nos vamos

Desperté con dolor de espalda, mire a mi derecha había sangre de la pierna de Logan y un botellín de agua. Mire a la izquierda, Hunter roncaba.

Decidí dejarlo dormir, salí de la tienda de campaña y fui a la enfermería.

Dylan seguía dormido y Logan e Hiems estaban "tonteando"

-Buenos días dormilón-Dije mientras le movía una pierna. Él abrió los ojos.

-¿Que tal estas?-Le pregunté.

-Bien, ¿Mi herida esta curada?

-Sí, ya no sangras.

-¿Y Logan?

-Estoy aquí hermanito.-Dijo Logan quien iba cojeando de la mano de Hiems.

-¿Que te han hecho?-Pregunto Dylan.

-Nada, una herida, un poco grande.

Paso un rato, Hiems y yo fuimos a por comida para todos en la enfermería. Después salí a dar un paseo con Percy.

Me llevaba con los ojos vendados, cosa que me daba miedo, igual no le caigo también y decide tirarme por un precipicio. Vale, Skylar Castle tranquilizate.

-Ya esta-Dijo mientras me quitaba la venda de los ojos.

-!POR EL AMOR A ZEUS!-Percy me había llevado a la playa, en la que había hecho un desayuno muy rico, creo que se me estaba cayendo la baba.

-¿A que esperas?-Pregunto Percy, quien había notado como se me caía la baba.

-¡Vamos!-Dije y le cogí de la mano.

Desayunamos muy rico, y después nos bañamos.

-¿Sabes hacer surf?-Me preguntó.

-Mas o menos, se lo que hay que hacer, pero cuando hay que subirse a la tabla me caigo, aunque hubo una vez que lo conseguí y luego choque contra una roca.

-Pues te enseño.

-¿¡Que!?

-Vamos

Percy hizo aparecer una tabla de surf de la nada.

-Venga vamos-Dijo mientras le daba golpecitos a la tabla.

-Valeee...

Estuvimos un buen rato intentando que no me cayera y lo conseguimos, no me caí.

-¡Bien hecho!-Grito Percy.

-¡Wujuuuuu!

Salimos de la playa, y fuimos hacia el campamento.

-Gracias por enseñarme a hacer surf, eres un gran amigo.

-Ah, de nada-Dijo Percy confundido.

Me adelanté, para llegar antes al campamento y poder enterarme de todo lo que descubrieron los de Hermes y Atenea.

Llegue cansada, pero llegue. Fui a donde los de Hermes, quienes estaban con los de Atenea.

-Hola, chicos. ¿Habéis descubierto algo importante?-Pregunté.

-Sí, sabemos a donde tenemos que ir y también que tenemos que hacer.-Dijo Evan.

-Bien, ¿A donde vamos?

-A Seúl.

-¡¿COMO?! Eso es imposible, no sere hija de Atenea, pero...a bah...tengo su bendición. Seúl esta en Corea.

-Ya...ese no es el problema...-Dijo el.

-Tenemos que llegar allí mañana, y no solo nosotros, también los demás que estamos aquí.-Dijo Gwendolyn, hija de Atenea.

-¿Y como llegamos?-Preguntó alguien a mis espaldas. Yo me giré, una niña bajita, pelirroja y con una expresión seria se había metido en la tienda de campaña.

-¿Tu quién eres?-Pregunté. Nadie podía entrar sin el consentimiento mío, o el de los hijos de Hermes.

-Soy Nat...-Hunter había entrado en la tienda sin dejarle acabar de hablar a la niña.

-¡Nathasa Telikos! Nadie te ha permitido moverte de tu tienda, estoy muy enfadado contigo, después hablaremos de este comportamiento tan raro en ti.-Dijo Hunter, más serio de lo normal.

-¿Es tu hermana?-Pregunté.

-Sí, aparte, biológica también-Dijo Nathasa seria.

Estuvimos hablando sobre como íbamos a hacer para irnos todos. Al final decidimos qué gente se iría en tren, otros en barcos y otros en avión. Salí de la tienda junto a Hunter y Nathasa.

-¿Cómo no me habías dicho que tenías mas hermanos?-Pregunté.

-Bueno, ya conocías a Park, y eso...-Dijo él.

-Ya, pero no me has dicho nada de una hermana biológica.

-Mejor que no te diga nada, no me fió de ti-Dijo Nathasa.

Nos quedamos en silencio un rato, y luego fuimos a la cocina a picar algo.

El mediodía paso rápido y no había nada que hacer, aparte de esperar y esperar...y seguir esperando a que los dioses nos dijeran algo.

Después de un rato leyendo "Los jóvenes de la elite" en mi tienda, salí a dar un paseo con las hijas de Apollo.

Esta vez no ocurrió nada malo, sólo algo inesperado.

Estábamos caminando cerca del campamento cuando Elena tropezó gracias a la raíz de un árbol enorme y después se le pusieron los ojos en blanco, la piel muy blanca y los pelos, literalmente, en punta. Y dijo algo así "tenéis dos minutos para volver al campamento, un rayo esperanzador bajara para daros ayuda y acompañaros en los juegos de Olimpiaresys, seréis llevados por teletransporte a Seúl, como bien sabéis, y ahí Skylar más el nuevo compañero y los hijos del dios que está en peligro deberéis pasar la prueba que se os ha impuesto"

Luego calló al suelo mareada y la llevamos al campamento.

-Chicas nos tenemos que separar, ir en tienda en tienda diciendo que cojan lo más importante y rápido. Y que luego se reúnan todos juntos alrededor de la fogata.-Dije con aires de líder, cosa que no se me solía dar bien.

Todas asintieron. Yo fui a mi tienda donde estaban mis hermanos más Hiems.

-Chicos recoger la tienda rápido. Hiems tu haz lo mismo pero vete a ayudar a los de Ares.-Dije- Tenéis dos minutos como mucho.

Después de que pasara un minuto la gente ya estaba alrededor de la fogata, me senté entre mis dos hermanos y esperamos a que algo pasase.

Paso media hora ya eran las siete y media más o menos y no había pasado nada, hasta que de repente uno de los rayos de sol que conseguía pasar entre las ramas de los árboles, justo haciendo que diese con los palos secos y encendiendo la fogata de nuevo.

El rayo de sol cada vez era mas fuerte y grande. Cuando nos queríamos dar cuenta todo era oscuro, por que teníamos que cerrar los ojos ya que no se podía tenerlos abiertos o te quedabas ciego. Cuando la luz se apagó una figura masculina la cual aún resplandecia se nos había presentado.

Me encanta dejar los capítulos con la intriga de quien será el/la nuev@ siento no haber escrito nada pero estuve de campamentos y luego no tenía ganas....tube problemas familiares...muchas cosas pero no os preocupéis he vuelto e intentaré sacara un cap a la semana.

Internado Para SemidiosesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora