The Maze Fangirl→ Newt / The Maze Runner.

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02: CAPÍTULO DOS: Mi boca bonita.

- ¿Que? - pregunté nuevamente. Todos me miraban asombrados. Yo lo único que en ese momento podía hacer era esperar por una respuesta. Todos estaban más cerca de lo que creía, entonces apoyé las manos a ambos lados de mi cuerpo y me arrastré hacia a tras un poco.

- Deberían dejarla descansar, Larchos. Tal vez está confundida y aterrada. Luego haremos una asamblea y discutiremos el por que hay una chica. - Habló Newt pasando una mano por su cabello.

Y ahí me di cuenta, yo era la única chica. Abrí la boca para protestar, pero mi cuerpo seguía inconscientemente a Newt a donde sea que yo iba a dormir.

(...)

No había logrado dormir en toda la noche preguntándome por qué estaba ahí. ¿Acaso esto era alguna clase de cárcel? ¿Qué hicimos algo tan malo como para que nos manden aquí?

Sentí una mano posarse sobre mi hombro y me dí vuelta bruscamente. ¿Qué no puedo fingir que duermo tranquila? Miré molesta al chico que invadió mi espacio al tocarme el hombro. Su cabello era de un hermoso color rubio que caía sobre sus hombros y sus ojos eran de color marrón oscuro.

- ¿Se te ofrece algo? - Pregunté con un tono de irritación en mi voz. De seguro Andrés está cerca. Puso los ojos en blanco. - ¿Qué? Estaba fingiendo dormir.

- Emm...- Comenzó Newt pero se detuvo al ver que yo no le prestaba atención. A un lado de Newt, estaba Thomas, el chico que llegó conmigo a este terrorífico lugar. Yo lo examinaba con la mirada una y otra vez, ya que algo en el se me hacía relativamente familiar. - Vamos, Novatos - susurró. Extendió el brazo y me ayudó a incorporarme. Al parecer su apariencia me engañó, ya que era tan fuerte que parecía que podía arrancarme el brazo. - Debo mostrarles algo antes del despertar.

- Bueno - respondió Thomas simplemente. ¿Y qué si Newt nos quería alejar de la civilización para matarnos? Yo al menos sabía que debía estar atenta. No puedo confiar en nadie por ahora.

- ¿Dónde se supone que vamos? - Pregunté dándome por vencida ante la curiosidad.

- Sólo sígueme y no te alejes. -

Me coloqué los zapatos más rápido de lo que Usain Bolt puede correr.

Pasamos sigilosamente entre los cuerpos dormidos que yacían desparramados por en suelo, aunque, quién sabe, podrían estar muertos. Oh no, espera, están respirando. No dije nada shhh. Thomas tropezó varias veces y al, accidentalmente, pisar a alguien recibió un golpe el la pantorrilla. Já, por torpe. Se disculpó y Newt lo miraba molesto.

Cuando finalmente dejamos de pisar césped y comenzamos a pisar la piedra gris de una clase de patio, Newt comenzó a correr hacia el muro occidental. Espera, ¿hay un muro?, ¿desde cuando uso la palabra occidental? Como sea, ni bien Newt comenzó a correr, yo lo seguí hasta correr a la misma velocidad a su lado. En cambio Thomas, dudó un poco, pero enseguida se recuperó y corrimos los tres a la misma velocidad. Newt se detuvo en seco justo al lado de un enorme muro que se levantaba encima de nosotros.

En distintas partes de la pared, se podían distinguir unas lucecitas rojas que brillaban. Se movían, frenaban, se encendían y apagaban. - ¿Qué es eso? - preguntó Thomas, aunque sino, ¿quién más? Este chico es muy curioso.

- ¿Sabes? La curiosidad mató al gato, Thomas.- Susurré sarcástica e irónicamente. - Deberías aprender a mantener tu maldita boca cerra...-

- Cuando tengas que saber algo, lo sabrás - me interrumpió el rubio con su acento británico. Lo miré molesta. - Tú también deberías mantener tu bonita boca cerrada, Anna.

Lo miré confundida. - Lo siento...- me disculpé y el me lanzó una mirada victoriosa. Oh no, como que me llamo Anna Cipriano Herondale Lightwood Potter Jackson, etc... - Creo que no entendí muy bien. ¿Acaso dijiste que mi boca es bonita? - Pregunté y una sonrisa burlona se formó en mi cara.