Mi estimado mate, mi padre

Parte 14

Cuando llegaron los rastreadores a bosque uno se acercó a mí y dijo
- que paso?-
- Alberto le clavó un anillo de plata en el pecho- dije llorando
- y Alberto?- preguntó
- cayó por el barranco-  el reviso hacia abajo
-esta vivo!- dijo uno de los rastreadores
Lo pusieron en su lomo y fuimos camino a la manada, de donde nunca tuve que salir.
Cuando llegamos, llevaron a James a su habitación y mientras a mí me curaban las heridas en el rostro que me había dejado Alberto, sentí que me tocaban la espalda, me di vuelta y vi a Leila detrás mío con los ojos llorosos.
- Leila- dije sentada en la camilla op
- Luna, pensé que no volverías- dijo y me abrazo
- yo también pensé eso- dije y la abrace más fuerte. Extrañe mucho a Leila, ella era como mi hermana y la eche mucho de menos.
- el alpha está muy herido- dijo
- lo sé, pero no Lo e visto-
- no creo que sobreviva Luna... Eric tendrá que cuidar la manada ya que James no dejo herederos-
- sobrevivirá, lo sé-
- Luna?- dijo una voz familiar, me di vuelta y pude ver a Sebastián mirándome con el brazo enyesado
- Seba- dije y lo abracé muy fuerte
- te extrañe mucho Luna, pensé que te encontrarían nunca-
- estás bien?, como está tu brazo- dije tocando su yeso
- estoy bien tranquila, ya estoy mejor-
Después llegaron Jose y Francis, me saludaron y hablamos un rato.
- pero Alberto es tu padre, y tuvieron...- dijo Jose
- eh si... Pero me obligó-
- estás embarazada- dijo Leila tocando mi vientre
- si eso creo- dije
- pero de quién es?- preguntó Jose
- no lo sé... Ojalá sea tuyo- dije mirando a Sebastián, que me regalo una sonrisa
- déjame ver- dijo e iba poner su mano en mi vientre, pero un tipo vino hacia nosotros y dijo
- señorita Luna, el alpha ya está estable- dijo
- puedo verlo?- pregunté levantándome de la camilla
- claro que si, está en su habitación-
- chicos me tengo que ir, después hablamos- le dije a mis amigos y me fui
- adiós Luna- dijeron todos
Cuando entre a la habitación, James estaba acostado en la cama y sin camisa (👌) .
- James?... Estás bien?- dije acostándome a su lado
- Luna... Si estoy bien- dijo y me acerco a él. Comenzó a olfatearme el cuello - extrañaba tu aroma-
- y yo a ti- dije y lo abrace. Puso su mano en mi cadera y después en mi estomago
- estás embarazada- dijo apartándome
- si... Estas enojado?-
- no, tranquila, no importa... Lo cuidaremos los dos-
- sabes de quién es?- dije incomoda
- es de Alberto- dijo tocando mi vientre y haciendo un poco de presión. - si, es de él- dijo asegurándose
- que asco... Es que él era mi padre, porque no me lo dijiste?-
- porque le prometí a Antonia nunca decirlo, pero ahora ya lo sabes- dijo regalándome una sonrisa.
Me apoye en su hombro y me acarició la mejilla.
- que bueno que estas aquí, eres la luna de la manada, debes estar conmigo-
- me encanta estar contigo- dije y en eso entro el enfermero
- señorita, debe salir para que el alpha pueda descansar-
- está bien... Adiós, te vendré a ver más tarde- le dije y lo bese muy cerca de la boca, a lo que él sonrió, haciendo que surgieran margaritas de su rostro.
- adiós- dijo James
Salí de la habitación y fui al campo, donde estaba Leila y Marco estaba encima de ella.
- Luna! Ven- dijo Leila, y Marco hizo cara de fastidio, quitándose de encima de ella.
- hola Marco- dije saludando con la mano
- hola- dijo con fastidio - Leila, te veo después- dijo y se fue
- ven siéntate- dijo Leila y me sentó a su lado - ahora no te dejaré tranquila, pasé muchos días sin ti-
- yo también te extrañé mucho- dije y  llame a Seba por el olfato y después de un rato vino.
- hola lindas- dijo y se sentó a mi lado
- Seba- dije animada y lo abracé
- y de quién es el bebe?- preguntó
- de Alberto- dije un poco avergonzada
- ah... Bueno para otra vez-
- oigan chicos, tengo que irme, Marco me está llamando- dijo Leila y se despidió para irse después
- ven Luna, vamos a la cascada- dijo y lo seguí.
Cuando llegamos, comencé a caminar por el borde de la cascada, como haciendo equilibrio
- ten cuidado, te puedes caer- dijo el, caminando a mi lado, desde el pasto
- tranquilo, se lo que hag...- no termine de decir la oración, porque casi me caigo, pero Seba me sostuvo.
- sabes lo que haces jaaj- dijo burlándose de mí
- que tierno Seba- dije y me baje de sus brazos, él me tomo de la cintura y trató de besarme en los labios, pero me corrí.
- que sucede?- preguntó confundido
- es que... Perdón Seba, pero no quiero... Es que yo...- me interrumpió
- tranquila, no me des explicaciones linda, respetaré tus decisiones-
Le sonreí y en eso, apareció un enfermero y me llamo.
- debo irme, después hablamos- le dije a Sebastián
- okey, adiós después hablamos- dijo y me besó en la mejilla
Fui hacia dónde estaba el enfermero
- Luna, James está muy lastimado de su pierna, tiene muchos rasguños, así que deberá estar unos días en silla de rueda...- lo interrumpí
- yo lo cuido- dije animosamente
- Segura? Iba a llamar a una enfermera-
- no, no, yo lo hago... Donde está?-
- está en su casa, vaya a verlo, no puede dejarlo solo- dijo y fui a casa.
Entre y lo vi en el living en su silla temporal.
- hola, quieres salir- le dije
- donde, no puedo hacer nada así- dijo señalándose
- si puedes, vamos- dije y tome las manillas de la silla.
Lo lleve al campo, se estaba oscureciendo. Lo puse enfrente mío y me senté.
Llegaron unos cachorros y se me tiraron encima.
- hola- les dije acariciándolos
- hola- dijeron y comenzaron a olfatearme
- porque ellos son lobos tan pequeños, y yo fui loba hace pocos días?- le pregunte a James que me miraba sonriendo
- porque ellos son machos, y su ADN es distinto, en cambio las hembras son lobas a tarde edad y cuando deben buscar a su mate, el macho ya está convertido y somos nosotros los que debemos esperarlas-
- ow pobrecitos- dije haciendo burla
- claro que si, tuve que esperar hasta que nacieras, y después esperar a que te transformarás para poder estar contigo- dijo sonriendo
Lo mire sonriendo y el también a mi, pero un cachorro se tiró encima mío y me lamió la cara.
- jajsjs no, tranquilo- dije quitándolo, después miro a James y fue a sus pies, con las orejas abajo y muy sumiso
- que lindo, te tiene respeto- dije
- por supuesto, soy el alpha jajaj- dijo a acaricio al cachorro que después se fue.
- tengo frío- dijo James
- ah perdón, vamos- dije y lo lleve adentro.
Lo lleve a su pieza y lo deje a la punta de su cama. Se levanto con cuidado y se acostó, lo ayude a poner su cabeza en la almohada y se me tomo de la cadera, haciendo que me ardiera el pecho.
- listo- dije y me acosté a su lado
- gracias... Aún te comes las uñas- dijo tomando mis manos
- es que con todo lo que paso, era imposible no ponerse nerviosa- dije y quite mi mano de la suya.
- descansa Luna- dijo y lo bese en la mejilla
- descansa-
Cerré los ojos y me dormí.

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