Capítulo 1

115 8 3
                                    

Me duele la cabeza, acabo de despertarme y estoy abrumada.
¿Qué pasó anoche?
Lentamente, los recuerdos se hicieron más nítidos.
Bar.
Alcohol.
Extraño con capucha.
Explicación.
Asociación y... ¿tiempo?
Entonces, aparecieron enteramente mis memorias.
Había ido a un bar, harta de todo, buscando algo para ahogar mis penas y cansancio.
Entonces, ya un poco borracha, me encontré con una misteriosa figura. Luego de escudriñarla con la mirada, me di cuenta de que era una muchacha.
Empecé a hablarle animadamente, con mi alegría, fruto del alcohol consumido. Pero ella seguía seria, como si se arrepintiese de algo. Sólo tomaba, escuchaba, y, cada tanto, me entregaba una falsa y triste sonrisa.
Luego de un rato, ya un poco exhausta de tanto hablar, le pregunté qué le pasaba.
- Mira... es probable que no me creas, pero necesito desquitarme. -dijo, mirando al suelo.
- ¡Contaaaamee que no pasa nadaa! -le respondí
- Ok. Bueno, puede que te resulte un poco raro, pero... ¿vos creés que ya no hay esclavos en el mundo?
Esa pregunta, para una persona cuyas neuronas estaban en un estado de "no-quiero-funcionar-porque-se-me-canta" le resultó un poco difícil entender.
- ¡Y, al menos en este país, no! -pensaba que iba a soltarme una sarta de problemas personales o alguna información aburrida.

Pero no fue así.
- Lamento comunicarte que estás equivocada- mientras lo decía, toqueteaba los hielos restantes de la copa- de hecho, todos lo somos... del tiempo, y yo trabajo en una asociación en contra de est-
Demasiada información para mí.
- No entiendo nada. ¿A qué te referís?- mi mirada lo dijo todo, estaba completamente perdida.
- Voy al grano. Trabajo en una asociación donde se lucha contra el tiempo, y me echaron porque... incumplí reglas... y... ahora...
No pudo seguir, estalló en llantos. Eran dolorosos de escuchar, un llanto que nunca antes había llegado a mis oídos.

Entonces, los recuerdos se escaparon de mi cabeza como gacelas. Tenía hambre, y pocas ganas de pensar. Así, que fui a prepararme el desayuno.
Pero, cuando me dirigí a la cocina, junto a las llaves, vi un pequeño librito amarillento, algo sucio y mojado... mucha curiosidad y demasiadas preguntas arrasaron con mi mente recién despierta.
¿Cómo había llegado ese libro a mi mesa?
¿Qué contendría?
¿Sería algo relacionado con esa extraña chica?

¡Hola! Soy Mai, y espero que les esté gustando la historia. Con respecto a las actualizaciones, dudo que pueda hacer una por día, pero lo voy a intentar.
¡Nos vemos en el próximo capítulo! ^-^/

Esclavos del TiempoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora