Rene.

2. Llegando a palacio.

Mientras Rene iba camino de palacio, la niña no sabía que ocurriría después. Al cabo de un rato se pararon en otra aldea y cogieron a otro niño, este era un varón mayor que Rene podría tener casi siete años era blanco como la leche y tenía pecas su pelo era largo ya que no podían cortárselo habitualmente.

Le sentaron al lado de Rene y se los llevaron a palacio durante el camino el niño llamado William fue ganándose la confianza de la pequeña Rene y esta fue escuchando las historias de su nuevo amigo.

William le contó que sus padres habían sido capturados y que la única salida que les quedaba es que todos sus hijos fuesen entregados a otras personas aunque era de locos los chicos aceptaron por lo que William y sus dos hermanos se fueron a casa diferentes - a mí me ha tocado tener que ir con la reina del norte espero que ellos tengan más suerte que yo- le dijo William a Rene.

Camino al palacio Rene se durmió mientras que William solo pensaba en reencontrarse algún día con sus hermanos y poder encontrar a sus padres, aunque lo que deseaba en ese momento es que sus padres estuviesen bien. Todavía recordaba lo que su hermano le dijo- no hagas ninguna tontería cuando pueda iré al reino del norte y te sacaré de allí, hazme el favor de no hacer nada que te perjudique y sobre todo no le des el placer a la reina de verte triste. Mantente fuerte y sigue tu corazón te quiero canijo- en el momento que William recordó aquello por su cara caía una lagrima y después recordó el abrazo que le dio su hermana se lo dio tan fuerte que casi le parte por la mitad, pero algo había en ese abrazo que no era normal y durante el viaje pensó en ello. Pensó en porque ese abrazo le parecía tan raro.