Kuroshitsuji [Yandere]

(GentleUndertaker x Lectora)

inspirada en la canción de multimedia

-Con que ¿un asesino?

-Si conde, ha habido algunos asesinatos últimamente y Scotland Yard no tuvo la oportunidad de encontrar al causante ¿Cierto Ran-Mao?-La chica sentada en el regazo del hombre, asiente.

Ciel nuevamente relee la carta que la reina Victoria dirigió hacia él pidiéndole ayuda para poder resolver este nuevo caso. ¿Quién se creerá este asesino? Lo único que hace es asesinar a hombres de clases alta sin dejar ninguna pista. Otro idiota más que trata de alcanzar la fama que tuvo Jack el Destripador, pensó.

-Sebastián quiero que investigues a todas las personas asesinadas, familiares, negocios. Todo lo que necesites para buscar sospechosos. Es una orden.

Yes my lord

(***)

Mis lágrimas caían en el ataúd del joven. Sin tan solo no le hubiera dicho que se tenía que irse, por la era momento de la puesta de sol, Elías no estaría aquí.

Él era una persona tranquila y tierna a su manera, desde que nos conocimos siempre trataba de hacerme algo lindo. Incluso pensé en que me podría enamorarme de Elías pero ahora yaces aquí y lo único que me acompaña es la soledad.

Me he quedado sola en el cementerio todos tus familiares y amigos ya se fueron y me han dado sus condolencia. "Mis condolencias señorita ___". "Tranquila pequeña esta en un lugar mejor" "Pobrecita ___ que desafortunado accidente". No sabes lo cansador de escuchar a todas las personas que me ven diciendo lo mismo. Es agotador.

Si tan solo pudiera volver en el tiempo y tener la posibilidad de cambiar el rumbo de nuestro destino, lo haría.

Mientras que tapo mi cara llorosa con mis manos. Unas pisas se escuchan de cerca, cada vez más hasta terminar de notar que estas se detienen al lado mío.

-Condesa ____ por favor no llore.

Una reconocida voz se alza entre mis sollozos y resuena en el cementerio. No es necesario levantar mi vista para ver a la persona. Al lado mío yacía...

Mi príncipe de ojos verdes

(***)

-Llegamos.

En frente nuestro se encontraba la funeraria del Undertaker o más conocido como el sepultero. Desde que Scotland Yard nos anuncio que las heridas de los asesinados son todas cortaduras, he de suponer que el único capaz de llegar a darme información necesaria es Undertaker.

-Señorito... señorito... ¡Bochan!

-¡¿Qué?!- grito. A veces este demonio es insoportable.

-Disculpa bochan pero ha quedado pensativo- suspira con pesadez - si tan solo dejara de pensar en su prometida Elizabeth tal vez podemos continuar- esa sonrisa que adorna su rostro, como la odio.

-¡Cállate! Solo dime lo que me tenías que decir.

Mi mayordomo se endereza y toma una postura de seriedad, al mismo tiempo que coge el pomo de la puerta para dejarme el paso.

-Ya he complacido al sepúltelo, por favor adelante.

Entramos en el establecimiento y observo que todo está igual que las ultimas vez que entre. Lo único que no encaja con mis recuerdos es esos tulipanes rojos que tiene guardados en el ataúd de la esquina, parecen como si tratara de esconderlas, aunque no funciono.