(Kuroshitsuji x Lectora)

6.5K 385 179
                                    

Bienvenida a la mansión Phantomhive.

Me encontraba en el salon del conde Phantomhive. Ayer habia recibido una carta de parte del dueño de la mansión diciéndome que tenia que platicar conmigo a solas.

Aunque al parecer no habia nadie, pensé. Debido a que todo se encontraba en gran silencio y lo unico que se escucha son las gotas de lluvia golpeando con el vidrio de las ventanas.

De un momento a otro el ruido de unos tacones golpeando el suelo empezaron a resonar por todo el salón. Me parecia que venian de todos lados asi que no tenia idea a donde mirar.

Hasta que observo a una persona se hizo presenté en la entraba al salón. Era el conde. Deja salir un suspiro de mis labios al saber que no era un extraño.

-Buenas noches conde- hice una pequeña reverencia -es un gusto saber que hay alguien aquí- comente nerviosa por su extraña entrada.

-Buenas noches mi _____.

Di unos pasos hacia atrás cuando lo vi aproximandose. Sentía que algo no iba bien.

En un rapido movimiento, Ciel me habia estrecho entre sus brazos con fuerza. Mi rostro quedo apegado a su pecho. Esto era demasiado incómodo.

Alze mi vista para decirle a la cara que esto es inapropiado, cuando me percate que su ojo habia pasado de ser un azul mar a un rosa brillante...

Ojos de demonio

-Mi ______ estaras conmigo para siempre.

(***)

¡No se abren!

Me encontraba corriendo por los pasillos de la mansión tratando de hallar una habitación para esconderme, pero ¡Estan todas cerradas!.

Había logrado escaparme de Ciel, ya que pude empujalo con todas mis fuerzas y antes de salir del salón trabe los puertas con una silla.

Solo tienes que salir ____, no debe ser tan dificil.

Mientras que avanzaba por el corredor me daba cuenta que empezaban aparecer unas pequeñas telerañas en las esquinas de las paredes o en algunos ventanales.

Hasta que unas manos salidas de la oscuridad me empujaron a la pared ocasionando que mi espalda reciba todo el golpe.

-Ah, ¿pero qué?.

Alois Trancy yacía al frente mío atrapandome con sus brazos y la pared.

-Pero que hermosa presa he conseguido -dijo lamiendose los labios - pequeña mariposa has caído en la red.

Este acercó su rostro a mi cuello y comenzó a lamerme y repartirme pequeños besos.

Estaba tratando de empujarlos con mis manos pero mientras más intentaba más "cariños" recibía.

Hasta que un gemido escapó de mis labios.

-Mira, he encontrado tu punto debil- sonrió con una mirada pervertida -Vayamos a un lugar más tranquilo.

-Me temo que no puedo permitir que eso pasé.

Al lado nuestro se encontraba el mayordomo de la mansión.

-Vete maldito demonio, ella es mia- exclamo enojado el rubio colocándose adelante mío como tratando de protegerme.

-Lo siento, pero eso será imposible- dijo y en un rápido movimiento me tomó al estilo princesa -si nos disculpan ya nos vamos.

Y salimos corriendo del lugar.

(***)

Nos encontramos en la habitación del mayordomo. No era muy grande pero tenía espacio.

Sebastian se encontraba sentado a mi lado curando las "marcas" de mi cuello. Termino de colocarme el vendaje y suspiro.

-Joven _____, debe de tener cuidado. En este mundo los lobos la quieren comer.

¿Por qué esta pasando esto? Solamente vine para platicar con el conde de mi ida de Londres.

-Sebastian gracias por curarme pero necesito salir de aqui-exclamo y me encamino hacia la puerta.

-Señorita- el mayordomo me coje del brazo.

-¡Sueltame Sebastián!.

Sacudo mi brazo y el me suelta. Me mira sorprendido y a la vez un poco molesto.

-Estoy cansada estar en esta mansión. Todos los que hablan conmigo dicen que ¡soy suya!.

Suspiro pesadamente y abro la puerta lentamente.

-Solo quiero olvidar esta pesadilla.

Antes de marcharme senti un dolor a mi cabeza y de pronto todo se volvio negro.

Lo siento ____, pero yo te protegere.

(***)

¡Bam!

Desperté en por el ruido de un estruendo. Al abrir mis ojos pude observar a dos figuras peleandose a la distancia.

Sebastian y Undertaker

Pudiste notar que a el mayordomo le brillaban los ojos de un rosa, como el de Ciel. Y el sepultero poseía un arma como una cuchilla y podias notar sus ojos verde con un toque de amarrillo.

Me levante y vi que nos encontrabamos en el inicio de la mansión y todo el lugar estaba cubierto con petalos rojos incluso mi vestido tambien tenia. Parecen tulipanes, pensé.

Sigilosamente camino hacia la puerta tratando de que los peleadores no perciban mi presencia.

¡Por fin estoy afuera!. Estoy tan feliz que no me importaba si tenia que volver caminando a mi casa, solo queria salir de esta maldita mansión.

-¿A donde crees que vas?

Oh no.

-¿Por qué ibas a dejarme? Tu eres mi mariposa- dijo Alois con su sonrisa siniestra al mismo momento que tomaba mi brazo izquierdo.

No

-Es de mala educación irse de una mansión sin avisar, joven _____- Sebastian me reprocha y se acerca a mí para abrazarme por detrás.

Déjenmen

-Por favor no llores, solo quedate conmigo que te daré tulipanes rojos- comentó Undertake tomandome del brazo izquierdo.

No me habia percatado que lagrimas escurrian por mi mejilla.

Por favor

-No fue muy bonito lo que me hiciste ____. -Ciel se colocó alfrente mío y su rostro demostraba un ceño fruncido mientras que miraba a los otros -pero no te puedes ir ya que hiciste una promesa. Tenemos que hablar a solas.

El conde de la mansión se volteó y comenzó a caminar hacia dentro sin olvidar darle una señal a los otros para que vayamos todos a dentro.

Ayuda, alguien.

¡Por fin actualice!

Ya paso un tiempo desde la ultima vez.
En fin, hice un mini especial ya que hoy es MI CUMPLEAÑOS.
Asi que es mi regalo de cumple.  Tambien quiero decir pronto subire:
#Finny
#Grell
#Ash
#Claude
#Principe Soma

Kuroshitsuji [Yandere]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora