Los cambios en tus estados de ánimo durante la pubertad suelen ser veloces e impredecibles.
Sientes que tu panza es una batidora y tu cabeza una coctelera de pensamientos incesantes.
Las responsables de tanto sacudones son las hormonas, unas sustancias químicas que produce el organismo para generar en tu cuerpo las transformaciones progresivas que te convertirán de niña en mujer. Tus senos crecen, tus caderas se ensanchan, aparece el vello en las axilas y en el pubis; con frecuencia sudas más y se presenta el odiado acné. Frente a semejante revolución, ¿Cómo no vas a experimentar cambios en tus emociones? Empiezas a tener deseos y sentimientos muy fuerte que nunca has tenido antes y no sabes cómo confrontarlos.Tus gustos e intereses cambian. Ya no te divierten tanto los juegos de niña.
Prefieres hablar con tus amigas...¡horas y horas!Empiezas a mirar con otros ojos a los varones y seguramente, a uno en particular.
Muy lentamente se va desarrollando tu sexualidad y esto te trae sensaciones desconocidas e inquietantes.
Comienzas a planificar con más antelación, a pensar acerca del pasado e incluso a analizar situaciones de una manera diferente.
Te importa y te preocupa mucho la opinión que los demás tengan de ti, en especial cuando viene de tus compañeras y amigos.
A TODAS NOS PASA IGUAL
En esos momentos de confusión, trata de recordar que tus cambios de humor son una parte del proceso normal de crecer. La culpa o la vergüenza no te sirven de nada. En cambio, recurrir a una amigua o a alguien muy querido para poner en palabras lo que te pasa ayudará a que recobres la calma y la alegría.
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¿Por Que Siento Lo Que Siento?
Teen Fiction¿Por que siento lo que siento?, te preguntas ante el torbellino de emociones y sentimientos que te invaden a diario. Alegria, tristeza, felicidad, angustia, miedo, amor, celos, satisfacción, vergüenza, culpa, bronca... son tantos y tan diferentes lo...