Oscuro

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Dipper salió de la habitación, con solo ese insulto por respuesta hacia el silencio del peliazul, pero no dijo nada al respecto del amor de Will. No afirmó Si le desagradaba o si lo aceptaba, dejando al demonio con la posible esperanza de ser correspondido, aunque sería mucho pedir de su parte, Dipper le odia tanto ¿Por qué con una simple confesión cambiaría de parecer?

No fue detrás de él por una respuesta, solo cerro la puerta para recostarse en su cama e intentar conciliar el sueño, pero las incontables emociones le impedían tal acción.

[. . .]

Todo transcurría de la manera más normal, Will seguía siendo el mismo Demonio de siempre, solo que ahora tenía de un color melocotón al estar cerca de Dipper.

Por el contrario, Dipper se volvió distante a él, si le hablaba era sólo para darle órdenes, todo de la manera más normal.

Una noche Dipper se encontraba leyendo uno de sus incontable libros cuando Will le llamó.

ーD-Dipper...ー

Este bajo el libro para ver al peliazul, a simple vista se veía nervioso, las vendas que antes estaban en su cuerpo fueron retiradas hace ya varios días atrás, dejando visible algún que otro moretón, o cortada, lo que ahora para el sería permanente, sera no tener su ojo izquierdo, pudo haberlo recuperado, pero su capacidad de regeneración es demasiado baja.

ー¿Qué necesitas Will?

ーNecesito preguntarle algo...

Este dejo a un lado el libro para después levantarse y dirigirse al Demonio.

ー¿Que quieres preguntar?

ーBueno... ーWill hizo una pequeña pausa, seguía estando inseguro de lo que estaba por preguntar, pero ya no había vuelta atrás. ーQuería saber que opina acerca de mis...

Su rostro se puso totalmente rojo, se estaba arriesgando demasiado, ni sabía de que manera reaccionaría ahora... pero la curiosidad lo mataba por dentro.

ーDeberías pensar un poco acerca de tus sentimientos. Sabes como soy, sabes como te trato, sabes lo que le pasaba a todas esas niñas qué se "enamoraban" de mi, no soy un buen candidato a la correspondencia de tus sentimientos, búscate a alguien más.

Will sintió como se empezaba a desmonorar, empezó a llorar repentinamente, ahora todo era confuso, ¿Acaso eso es un rotundo No?, aunque viéndolo de un punto de vista no se porto cruel, fue de algún modo sutíl con sus palabras.

ーNo llores más.ー empezó a acariciar su mejilla. ーSabes que yo soy un monstruo, tú eres tan dulce, tan frágil, tan... quebrantable. Sólo termina éste absurdo trato, y así puedes liberarte de mi.

Dijo en sí. Parecía un sucio plan para sacarlo de su vida de una buena vez. Creía que esto era mejor que verle llorar a mares, como cada día después de la muerte de Mabel.

Will empezó a reír de manera leve, causando confusión al Castaño.

ーMi señor...ー llamó una vez más. ーusted debe comprender que me enamore de cómo es, y si estoy aquí, es para hacer lo que sea con tal de que sea feliz.

Sus mejillas de Will se tornaron rosadas, sus ojos seguían soltando lágrimas eso confundió aun más a Dipper, pero eso no evitó que su corazón reaccionará de otra manera, sin más se acercó a Will.

ーSé me es difícil comprender...ー empezó a rozar sus labios con los suyos ーMe confundes demasiado Cipher ーrodeo al peliazul con su brazos, acercando más sus cuerpos con algo de fuerza.ー Así que ayúdame a entender.

Y con eso, sello la Conversación, con un beso, un beso que no se caracterizaría por ser demasiado dulce pero tampoco el más amargo, era un beso muy apasionado, uno que iba de acuerdo con ellos. Uno agridulce.

El castaño seguía confundido por como estaba actuando, pero no lucharía más con ello, y sólo dejo que sus "Sentimientos" tan cegados y confusos le guiarán.

A cada paso se acercaban a la cama que estaba en esta habitación.

Aquel sentimiento era extraño.

Sus lenguas hacían un perfecto bals, las Oscuras intensiones del castaño empezaban a aparecer.

Complicado.

Y sus prendas empezaban a desaparecer.

Confuso.

El aura de la habitación hacia un buen ambiente aquella noche.

Sin sentido para algunos.

Esa noche todo cambiaría.

Pero eso les motivaba.

Dejaría en claro quienes son realmente sin aquellas máscaras que les ocultaban.

A creer.

Experimentarán aquel extraño sentimiento.

En el amor.

Que muy pocos pueden entender perfectamente.

Y de alguna manera, aquel sentimiento que ya no era tan humano, los hizo tener aquella mágica noche.

Jadeo, gemidos, lágrimas, placer, embestidas, besos, erecciones, sangre, sonrojos, y uno que otro golpe.

Suena raro, pero ese era su "amor".

Un muy agridulce amor.

Colors (Dipwill) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora