Cartas 3

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Quería abrir la tercera carta pero tenía miedo, miedo de lo que pudiera pedirme o decirme, y miedo que se esfumara su presencia

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Quería abrir la tercera carta pero tenía miedo, miedo de lo que pudiera pedirme o decirme, y miedo que se esfumara su presencia. Iba a llover y me debatía entre si volver a casa o quedarme debajo de la lluvia, pero al final me encontraba subiendo las escaleras, se escuchaba la voz de mi hermana hablando por teléfono, me quedé en la puerta.

-Estoy segura que alguien entró, se nota que utilizaron el baño y las cosas de ya sabes quién no están, mamá no tienes que venir tengo todo bajo control, te llamaré lo prometo, no creo que haya sido ella pero cualquier cosa te avisare, si me cuido, adiós -dijo mi hermana y abrí la puerta me miró con la boca abierta, estaba en el sofá estupefacta, no podía creer que fuera yo.

-Hola -dije acercándome.

-Hermanita, eres tú -dijo y vino corriendo y me abrazó, al principio sentí extraño, hacía mucho que no tenía contacto con un ser humano, le devolví el abrazo, era reconfortante.

-Te he extrañado tanto -dijo con los ojos aguados, mi hermana era sensible.

-Y yo a ustedes.

-¿has sido tu que has entrando y sacado las cosas de él? -preguntó llevándome y sentándome en el sofá.

-Sí.

-¿Estas bien?- preguntó yo la mire y me encogí de hombros, y me hice la pregunta, ¿Estoy bien?

-No lo sé.

-¿Por qué has sacado sus cosas? -preguntó con cautela.

-El me lo pidió, empecé a abrir las cartas, voy por la número dos -dije con un hilo de voz, el dolor se sentía en mi voz.

-Lo siento tanto, te fuiste, estábamos tan preocupados por ti -dijo abrazándome de nuevo.

Luego de una conversación bastante larga donde le contaba donde había estado a mi hermana y todos los momentos perdidos que he tenido, me habló que todos querían verme pero que para eso había tiempo.

Unos minutos después quitamos las fotos de la pared y la guardamos, y me fui a dormir a mi habitación matrimonial.

No sé cuánto dormí pero sé que me desperté y estaba oscuro, camine al pasillo y me detuve mi hermana hablaba por teléfono.

-Papa por favor, no pueden venir ahora, ella lo está llevando como puede, sería difícil, ver a sus padres y sus 5 hermanos mirándola con compasión, dale tiempo, está más flaca, y pálida pero sé que lo va a lograr -dijo y cuando terminó, salí del pasillo.

-Ya despertaste -dijo guardando su móvil.

-sí y abriré la próxima carta -dije con nerviosismo.

-Está bien adelante te ayudare en lo que pueda -dijo y asentí.

Al día siguiente la abrí temprano en la mañana.

Querido amor:

¿Recuerdas cuando te pedí matrimonio en el teatro de la escuela? Ese fue el día en que tuve más miedo pero cuando me dijiste que si llorando fui el hombre más feliz sobre la tierra, quisiera que usaras ese mismo vestido y fueras al teatro, mi estrellita.

Con cariño J.

Claro que recuerdo ese día, fue el día más sorpresivo, caminé con la carta hacía la sala, mi hermana estaba sentada en el sofá con una caja blanca cuadrada en frente de ella.

-El me pidió que cuando abrieras la tercera carta, te entregara esto -dijo caminando hacia mí y entregándomela , asentí y le sonreí en agradecimiento, me fui de nuevo a la habitación y ahí estaba el vestido y los zapatos de tacón, siempre tenía todo calculado.

Cuando terminé de arreglarme me miré al espejo, estaba lista, tenía una trenza en el hombro, tenía mucho que no me arreglaba el cabello y me maquillaba o me ponía un vestido.

Salí y mi hermana estaba en la cocina.

-¿Quieres que te acompañe?

-No, es algo que debo de hacerlo sola -dije con firmeza.

-Estás muy bonita -dijo y yo me encogí de hombros y salí.

Cuando llegué a la escuela, todos los profesores que me veían me preguntaba que como lo llevaba y les decía cogiendo camino, me dieron ganas de reír recordando todas las veces que discutíamos en clases de ellos y él terminaba sacándome del salón mientras yo gritaba ¨secuestro¨ ¨secuestro¨ nadie se acercaba él era temido en la escuela, el día que me beso por primera vez me gustó pero le di una bofetada y me volvió a besar y al final fueron cinco besos y tres bofetadas porque a la tercera me agarro las manos, entre con una sonrisa al teatro y me senté en el escenario y reviví el recuerdo.

Nos habían invitado a participar en una obra como egresados mi parte había acabado pero me pidieron que me quedara en el escenario que había una escena sorpresa que no habíamos ensayado, él salió y caminó hacía mi diciéndome cosas que me hicieron llorar y que si quería soportarlo por el resto de su vida, al principio todo el público pensaba que era parte de la obra pero cuando vieron que todos en el escenario lloraban, aplaudían y gritaban se unieron a ellos, yo solo lo miraba sin creérmelo mientras me ponía el anillo pero me dijo ¨despierta, me verás todas las mañanas a tu lado¨ yo le enarqué un ceja y él se encogió de hombros y sonrío.

Sonreí al recordarlo, cuando el teatro quedo vacío nos quedamos un rato más, bailando y riéndonos luego nos tiramos en el suelo a contemplar estrellas imaginarias mientras nos seguíamos burlando el uno del otro.

Hice lo mismo, baile y me tire en el suelo a contemplar nuestras estrellas imaginarias, cerré los ojos y lo imagine acostado a mi lado, tocándome la nariz con la suya, oliendo mi cabello como solía hacer.

Extrañaba todo de él que se durmiera en el sofá y yo caerle encima y besarlo hasta que me perdonara y luego dormirnos juntos y despertarme en la cama el abrazándome con su cabeza entre mis cabellos, sonreí a recordarlo, lo extrañaba tanto.

-Te extraño mucho, cielo -dije mirando al techo del teatro.

Pude imaginar cómo me decía a mi lado ¨sabes que yo aún más, estrellita¨





Hola mis lectores!!!!🙈😊😊😊se que he estado perdida y no subí capítulos en estos días :( pero es que estaba super ocupada pero ☝ya estoy aquí 😏y como regalo dejaré dos capítulos 🎉🎉🎉🎉🎉👏👏👏este es el primero y espero que lo disfruten!!!

Por favor dejen sus comentarios quiero saber su opinión :-)

La última despedidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora