Verdades que duelen

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Estos labios que sueñan con tu figura 

se están cansando de no verte, 

se esconden tras una escultura 

pues es donde se sienten menos inertes

El café de la mañana era distinto, 

no sabía a tu néctar, 

sino más bien a tu olvido

Mi bolígrafo ya no es confiable, 

a veces escribe y otras me invade

Me llena de sentimientos

y en el corazón de un viejo

nacen los versos muertos

El cigarrillo me esfuma a mí,

 pero no a tu recuerdo, 

el opio de mi cuerpo

se aleja soñoliento

Una flor de loto

me dijo que me amas, 

que tu mirada me extraña, 

que tus manos me llaman 

y que este cuento aún no acaba

Pero.. ¿Cómo creer si todo es una mentira?, 

me cuesta mucho pero sé, 

que ya no me necesitas.

La Poesía De Mis ElementosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora