5

13 0 0
                                    


Después de que termino el concierto, Kendra vio a su mamá y a David. Kloe estaba orgullosa de su hija y David maravillado por el talento de su hija adoptiva, le regalaron un ramo de flores y se despidieron, según su mamá ella debía de terminar la gira, así que regreso al hotel con la banda.

Días más tarde se enteró que la banda había terminado con su vida de giras, que se establecerían en La Ciudad de México, aun andaban viendo si un café, un restaurante, o un auditorio podría ser el nuevo negocio de "Colmillos Lobunos". Kendra estaba feliz, su papá viviría relativamente cerca de ella lo que significaba que lo vería más seguido.

Volverse a integrar a su vida cotidiana le costó a Kendra, su amor por la música había crecido. La gira le había dejado muchas experiencias, Kloe sabía que ese momento llegaría, cuando Alex les explico que la banda se instaló en un café, en el cual tocaría por las tardes, decidió que la dejaría ir los fines de semana, con la condición de que mantuviera sus calificaciones y su cuarto en orden.

Kendra acepto el trato, corrió a contárselo a Perla su mejor amiga. Kendra era extraña, tenía solo una amiga, dos compañeras con las que se llevaba bien y con eso bastaba su vida social, estaba metida siempre entre libros, historias, y música. Por eso se llevaba bien con su mamá, sin duda era la que mejor la entendía.

Pero ahora Kendra tenía una misión personal, descubrir cómo fue que entre sus papás hubo algo, cuando uno los veía eran completamente diferentes, su mamá tan antisocial, metida entre sus libros y entregada a su familia, y su papá un rockero con cierta fama de mujeriego, conocido por todo el mundo...

Su primer paso sería visitar a su abuela materna, una tarde con el pretexto de querer pasar una tarde con su abuela se dirigió a su casa.

Su abuela sonrió al verla, conocía a su nieta sabía que iba en busca de algo, sospechaba que era.

─Mi niña ¿Cómo fue la gira?─ pregunto su abuela

─Excelente, pude tocar con ellos, fue genial─ dijo Kendra con ojos brillantes su abuela sonrió─ Abuela necesito tu ayuda─ le rogo Kendra al acordarse de su papá

─ ¿Qué pasa?─ dijo su abuela con tono preocupado, "Esta niña no se anda con rodeos" pensó

─Quiero saber cómo es posible que mis papás hayan estado juntos, dime por favor que no fui producto de una borrachera─ dijo Kendra con ojos llorosos

─Había una ocasión dos mejores amigos, compartían una pasión por la música, pero en un género en especial, el rock, ambos aprendieron a tocar la guitarra el bajo y la batería, cualquiera que los viera sabía que a pesar de sus diferencias eran el uno para el otro, ella era soñadora, se la pasaba rayando las servilletas y escribiendo estrofas en donde se pudiera escribir, sus libros estaban llenos de frases, poemas, historias que ella escribía, siempre cargaba una libreta, fuera a donde fuera, según ella no sabía en donde la podía inundar la inspiración Él en cambio cada rato tarareaba canciones o componía una que otra, tocaba en las fiestas siempre que la ocasión se le presentara, y , más de una vez con su talento con la guitarra y una voz entonada se ligó a una chava.

Los años pasaron cuando tenían 18 se dieron cuenta de que no podían negar más que estaban hechos el uno para el otro, Aunque ella desconfiaba de la fidelidad en un principio y conocía todos los trucos de ligue de su mejor amigo, con el tiempo ella se dio cuenta de que iba en serio, y acepto ser su novia, a los 19 se fueron a vivir juntos.

Quedaron embarazados, una escritora sin un libro publicado, un músico sin banda, ¿Qué le esperaba a esa familia?

─Entonces... ¿ellos fueron mejores amigos? ─ pregunto Kendra sorprendida, entendió muchas cosas

─En la habitación que era de tu madre, encontraras muchas respuestas, cuando quieras revisarla adelante, pero yo no sé nada de esto ─ dijo su abuela─ Sabia que algún día vendrías a buscar respuestas, tus padres... ellos... no saben cómo decírtelo, pero es hora de que afronten esto. Sobre todo ahora que tu papá estará más tiempo con ustedes

─Siempre creí que no lo querías─ dijo Kendra

─Nunca vi a tu madre más feliz que el tiempo que compartió con él, aparte él fue parte de que tenga una nieta tan hermosa. Pero... ¿cómo una madre puede perdonar al hombre que le rompió el corazón a su hija, haya sido por los motivos que fueran?─ dijo su abuela

─ ¿Y David?─ pregunto Kendra

─Él siempre fue amigo de tu madre─ explico su abuela─ Yo no lo conocí hasta meses antes de que nacieras, solo sabía que tu madre y él se conocían desde hace muchos años. Te diría la razón por la que tus padres se separaron pero sigo sin entender realmente que paso, un día estaban dispuestos a tomar sus cosas e irse de gira y al siguiente llega David casado con tu madre.

─Bueno─ Kendra hizo una mueca, ─ iré a la habitación de mi madre─

La habitación estaba prácticamente vacía, muchas cosas ya no estaban, Kendra reviso los cajones, no encontró gran cosa, libretas, adornos para el cabello, incluso un peine viejo, encontró un estilo de diario y lo dejo sobre la cama, entre los libros un par de fotos escondida una memoria USB.

Al salir le agradeció a su abuela y se despidió de ella.

Kendra entro corriendo a su habitación, verifico que la memoria tuviera información y decidió esperar hasta la noche de presentación del libro de su madre, quería estar segura de estar sola en casa.

Mientras tanto Kloe estaba en la cocina con David

─Sabe algo, está en busca de lo que paso─ Dijo Kloe. David hizo una mueca, llevaba años intentando convencer a su esposa de que le contaran la verdad a Kendra─ Voy a matar a Alex─

─Tranquila─ en ese momento el timbre sonó. David abrió la puerta y se encontró a Alex.─ Te aviso que esta exaltada, piensa que le has contado algo a Kendra─ susurro David, dejando pasar a Alex, quien resoplo

─ ¿Quién es?─dijo Kloe saliendo de la cocina, al ver a Alex se puso pálida─ ¿Qué le has dicho?─ pregunto Kloe herida

─Nada, encontró una foto donde estamos de Dany y Sandy y una donde el marco dice amigos por siempre─ explico Alex─ No sé quién la dejo entrar a mi camerino─ Kloe no sabía por qué estaba más sorprendida, si por que el conservara la foto o por que estuviera en su camerino. Kendra escucho la voz de su papá y unas inmensas ganas de hacer que recordaran viejos tiempos puso You're the one that I want. Alex palideció, quedando casi blanco, y Kloe sintió que sus ojos se llenaban de lágrimas, David se acercó a consolarla pero Alex corrió hacia ella y la tomo entre sus brazos, Kloe sollozo, pero se alejó de él.

─Lo siento─ dijo metiéndose a la cocina David corrió tras de ella para asegurarse de que estaba bien

─Kloe...─ la llamo susurrando

─Ya, ya en un segundo salgo─ dijo secándose las lagrimas

─Le diré a Kendra que quite la música─ dijo David

─No... por favor no, déjala─ dijo Kloe. Salió de la cocina y se afrontó a Alex─ ¿Qué pasa? ¿Venias por Kendra?─ pregunto Kloe

─Venía a invitarte un café─ dijo Alex encogiéndose de hombros

Kloe sintió la rabia correr por sus venas

─Claro... ahora que ya no andas de gira y tus fans se han decepcionado de que no las vayas a ver vienes en mi busca ¿no?─ Kloe estallo. Alex sintió una puñalada en el corazón

─Por supuesto que no, la decisión fue de los dos, no lo olvides─ dijo saliendo de la casa dando un portazo mientras sonaban las ultimas notas de You're the one that I want



Hay amistades que deben quedar como eso, amistadesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora