hailey

832 29 1
                                    


Ella es Hailey, tenía 19 años cuando la conocí. Era de Arizona, su padre se trajo a su familia a Los Angeles por trabajo y el día que llegaron fueron directamente a Lilo's donde se rentaban motos acuáticas, tablas de surf, wind surf etc.

Lilo, mi jefa me mando a atender a la familia.

Inmediatamente me atrapó, sus ojos, su sonrisa, era perfecta.

Su padre y su madre se subieron en una motoacuática lléndose mar adentro.

Ella y su hermana querían hacer surf.

- ¿Tienen algo de experiencia? -les dije pero siempre mirándola a ella-

- Yo me he subido un par de veces, pero no recuerdo nada. -comentó su hermana-

- ¿y usted señorita? -dije educadamente-

- No he surfeado nunca y dime Hailey. -me sonrió-

- Okey, Hailey. -suspiré- haremos una corta clase para que se manejen en el agua-

Hice ejercicios sobre la arena y ellas me siguieron. Alaia su hermana, consiguió la técnica y se fue a surfear.

- No puedo Justin, me rindo. -gruñó saliendo del mar empapada- no me puedo mantener de pié sobre esa cosa.

Juré que se pondría a llorar.

- Hey ¿demos una vuelta en motoacuática? yo manejo. No te desesperes. -le sonreí calmado y ella asintió-

Flotando sobre el mar me contó toda su vida, aferrada a mi cintura, hablandome lentamente al oído.

Era prácticamente millonaria, su tío famoso la ayudaba a surgir en el mundo de la moda, como modelo.

Pero a la vez era muy humilde y tranquila.

- Aquí termina el recorrido. -anuncié triste-

- Fue genial. Gracias. -besó mi mejilla-

- Y digame joven -escuché la voz de su padre- supongo que tú pagarás la bencina de esa moto que YO NO PEDÍ.

- Papá.. el solo hace su trabajo, lo del surf no se me dio y yo le pedí la moto. -alegó ella mintiendo-

El hombre me dio una mala mirada y me pasó los billetes.

Agradecí mentalmente, lo que me pagaban lo ocupaba para pagar las cuentas de la casa ya que el sueldo de mi mamá apenas nos alcanzaba para comer.

- Hailey, si necesitas un amigo estoy aquí de diez a siete. -le comenté-

- Lo tendré en cuenta. -sonrió ampliamente y se fue-

Desde ese día supe que existía la mujer perfecta.

angel << jailey.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora