Daddy. jb

07. " Es un idiota muy sexy".

Justin POV.

La vi salir, esta niña eran un tanto insoportable pero si que era hermosa. Tenía unos ojos marrones hermosos y si, esos labios eran perfectos.

¿Que te pasa? Estas casado idiota.

No podía creer que esa niña estaba embarazada y con intenciones de darme a su bebé. Ella cree que eso es muy fácil? Debemos buscar abogados y hacer contrato no era algo asi como ella llega coloca el bebé en una cesta y lo deja al frente de mi casa. Decidí dejar esos pensamientos y dedicarme a recoger mis cosas porque ya debía irme a casa, hablaría con Marie a llegar a casa.

Recogí, y salí de mi oficina. Tomé el ascensor y bajé. Me dirigí a donde estaba Karen, la recepcionista.

- Karen, ya me voy es tarde. Hay algún recado para mi?

- No Señor Bieber, mañana vienen nos accionistas de la empresa se reunirá con ellos a las 10 am, solo eso. - me dedicó una sonrisa.

- Perfecto, muchas gracias. - ya estaba dispuesto a irme pero recordé algo - le voy a agradecer que no deje pasar a gente desconocida a mi oficina, solo si tienen cita - alce mi dedo - que sea la ultima vez Karen.

Ella asintió y me dio una leve sonrisa. Seguro se sintió mal, llevaba años trabajando conmigo.

Fui en busca de mi auto, entré abroche mi cinturón y ella llegó a mi mente de nuevo. Era hermosa, no podía negarlo por mas que lo quisiera. No se si aceptar su propuesta, ella.. ¿darme un bebe? ¿de verdad estaba embarazada? Se veía muy segura de lo que hablaba.. Igualmente me daría pruebas, y estaba gustoso de observar y comprobar su estado ¿y si era cierto? Tenia que hablar con Marie. Arranqué el auto y salí directo a mi casa. En el camino sólo esa chica estaba en mi mente.

«Te pareció interesante la chica Justin»
Callate consciencia.

Eli POV

- y bien.. Como te fue Eli? - me dijo mi mejor amiga saboreando un delicioso helado.

- Amanda, no muy bien. Él no me creyó, pensó que estaba diciendo mentiras y es un ingrerido y frío hombre. - hice una mueca.

- Ingrerido? Pero eso no era lo que decía en el anuncio, la gente debería dejar de mentir. Y - se metió una porción de helado en la boca - el señor, que te pareció?

« Es idiota, un idiota muy sexy sabes que si Elizabeth»

- No es la gran cosa Amanda, se cree que es el mejor por tener todo el dinero del mundo y darse todo los lujos del mundo - menti-. Nada de lo que decía era cierto. No había dejado de pensar en ese hombre desde que salió de su oficina.

- No te creo gran mentirosa, dime la verdad. Es sexy? - me dio un sonrisa pícara. Vamos, no puedo mentirle a ella.

- Si, si lo es. Es sexy. Tiene un trasero de infarto, contenta? - dije con una leve sonrisa en mi rostro.

- Lo sabía - me empujó levemente el brazo - y si acepta tu propuesta lo verás mas seguido Eli. - me guiñó un ojo.

Oh, era cierto.

- Es casado Amanda, yo no tengo nada que hacer. Le entrego el bebé y adiós a todos. Aparte soy - junté mis manos - una niña y él un hombre de 25 años.

- En el amor no hay edad cariño, quizás ni ame a su esposa. - se terminó su helado.

¿y si era cierto lo que decía mi mejor amiga? No lo creo, sino no estarían buscando un hijo.

- El señor Bieber no me importa en lo mas mínimo dejate de falsas ilusiones. Y lava ese envase -señale el bold donde estaba su helado - mi mamá odia..

- Que dejen cosas sucias en las habitaciones, lo se. - dijo.

Estallamos en risas, Amanda era la mejor.

Bebé, quizás tengas padres que te amen pronto.