El sonido de la alarma me despertó y con desgana lo apague y me restregué los ojos y los abrí hasta aclarar la vista. Eran las 9:30. Por un momento me quedé pensativa sin saber donde estaba hasta que me di cuenta de que no estoy en mi casa, si no en la de la familia de acogida. La verdad es que es raro para mi, es decir, yo tengo una rutina y se va a tener que cambiar a la fuerza - cosa que odio, por cierto - ya no voy a poder darles un beso a mis dos padres cuando entre a la cocina por las mañanas para desayunar, ya no me voy a poder sentar a charlar con ellos a la hora de la comida, ya no me van a reñir mas por las cosas que hago, ya no tengo a mi almohada cómoda, a mi terraza y a mí puf o a mis amigos... - una pequeña lagrima recorrió mi mejilla, la cual limpié al momento.
Me levanté de la cama y con mi pelo revuelto fuí hacia el baño, me lave la cara y me di mis cremas, una tiene que cuidarse ¿vale? Me peiné y me estuve mirando al espejo mientras ponía poses. Mire mi reloj, eran las diez, seguro que los padres ya se han ido a trabajar, los demás estarán durmiendo. Salí del baño y la habitación de Aline estaba abierta, me asomé y su cama estaba hecha, no se oía ningún ruido en la casa así que supuse que estaría fuera, el único que tiene pinta de estar aquí es Steve, pero tiene su puerta cerrada. Entré en mi cuarto y cogí el móvil para luego bajar por las escaleras con cuidado para no despertarle. Llegué a la cocina para desayunar algo, pero me fije que en la encimera había dos notas.Josh y yo hemos ido a trabajar y preparar cosas para el viaje, estaremos a la hora de la cena, tenéis la comida en el frigorífico separada por platos, oh y Taylor, posiblemente Aline haya salido a correr y estés sola con Steve, prepárate lo que quieras de desayuno que el tardará en levantarse.
Os quiere
- Gabriela.La otra carta decía lo siguiente:
Así es, he salido a correr y luego estaré con algunos amigos, pasare por casa para ducharme y luego me iré, así que no como en casa.
Adiós :)
- AlineQue bien, mi primer día aquí y ya estoy prácticamente sola - pensé sarcástica.
Cogí el móvil y puse un poco de música en aleatorio, lo primero que escuché fue la de One dance de Drake, es una buena canción para despertarte y estar más activa la verdad. Me puse a bailar al ritmo de la música mientras echaba un poco de zumo de naranja en un vaso y me lo bebía. No sabia que mas comer ya que no se donde guardan los cereales o algo, así que cogí una manzana roja y empecé a comerla mientras movía mis caderas en uno de mis momentos de motivación. Así es, por el día soy más activa físicamente y por la noche mentalmente.
- Guau - dijo una voz ronca masculina.
- Oh vaya - tenía sus ojos clavados en una parte de mi, decidí seguir su vista, estaba mirando mis bragas, al parecer se me olvido ponerme los pantalones del pijama, bravo Taylor.
- Buen culo - me guiñó un ojo y se empezó a reír.
- Serás idiota - dije con un toque de humor mientras cogía una naranja del cuenco de la fruta y se la lanzaba.
- ¡Ey! - se quejó.
- ¿No se supone que tienes novia? - le miré desafiante arqueando una ceja.
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Epitafio Del Enamorado
Ficção AdolescentePorque no todo es tan fácil, porque todo es muy complicado. Esto no está hecho para nosotros. Supongo. Mi mente me aturde. No quiero irme. No me olvides, por favor. Hasta pronto. ¿Nos volveremos a ver? No copiéis, sed originales.