¿Quien asesinó a Lisa? [Pausada]

Capítulo 3

Desperté con pesadez, tener que ir a trabajar no era lo que más me gustara en ese momento. Miré a mi alrededor recordando que ayer había dormido con Logan, me levanté al notar que no estaba a mi lado, busqué en toda la habitación pero no estaba. Salí y lo encontré a mitad de pasillo, solo con una toalla rodeándole la cintura mientras tomaba agua y las gotas caían sobre él.

—Buenos días, Emma.

—Bu-Buenos días, ¿a dónde vas?

—Voy a trabajar, arréglate si quieres que te lleve.

—Ok, gracias... —Estoy embobada mirando a Logan y no sé por qué.

—¿Te he dicho que tienes un gran trasero? —Y ahí murió todo.

—¡Sí, lo hiciste, ayer! ¡Ahora, cállate! —Logan rió y revolvió mis cabellos, luego me dio un beso en la frente.

Salí de mi trance y me metí en la ducha, me arreglé y salí a comer algo. El uniforme de hoy, se basaba en una falda de tubo apretada por encima de las rodillas, con una pequeña apertura en el lado derecho, color azul oscuro, una camisa blanca con mangas después de los codos y un lazo atado al rededor del cuello, del mismo color de la falda. Logan me vio y chifló, ahí vamos de nuevo.

—¿Sabes que tu trasero se marca más con cosas apretadas? —Le lancé lo que tenía en las manos, que, exactamente era, una barra de chocolate.

—Cállate, apuesto y ni siquiera has mirado mi trasero y solo dices eso molestando. Ya come algo y no molestes —Logan rió— Ríes mucho, ¿no?

—No, solo que tú eres graciosa.

—Sí, claro.

(...)

Logan me dejó en mi trabajo, me despedí de él y entré. Me ubiqué en mi puesto y mi día laboral, dio inicio.

—Hola, trasero grande —Y aquí vamos de nuevo, ¿Dios, acaso todos se pusieron de acuerdo en molestarme hoy?

—Hola, Momo.

—¿Sigues llamándome Momo? Por favor Emma —Suspira Momo, cansada.

—Momo es lindo, no como "trasero grande" —Ríe a carcajadas.

Sigo sin entender, ¿porque me llaman así? Mi trasero no es tan grande. En fin, ella se llama Summer, pero la bauticé como Momo, ¿La razón? No quiere que nadie lo sepa, así que no lo diré... no por ahora.

—Emma, ¿ya conseguiste novio?

—¿Porque lo dices como si estuvieras cansada de decírmelo?

—¡Porque es así! Estás en la mejor edad, tienes muy buen cuerpo, trabajas, terminaste tu segunda carrera, ¡Niña! ¡Consigue a alguien! ¿O quieres que ese trasero tuyo quede solo y abandonado? —No aguanté la risa al ver la cara despectiva de Summer, que estúpida es.

—¡Cállate! —dije entre risas—. ¿Cómo dices eso tan fácilmente? Ves a trabajar ya —Hizo un puchero y fue a su lugar de trabajo.