Ondas de electricidad pasaban por toda su espalda, su piel se erizaba con cada toque de piel, y la rudeza del tacto era tanta que solo gritaba y gemía de dolor. El castaño con desesperación levanto su camisa, mordió su torso como si fuera su próxima presa, dejando una que otra marca, luego siguió con el cuello del rubio, este trataba de apartarlo pero las manos de Dipper eran grandes y fuertes como para lograrlo.
-¿Qué te sucede? ¡Dipper! ¿Estas demasiado abrió como para saber lo que haces?- Le pregunto Jeff con frustración.
-Cállate...-Le respondió Dipper, mientras jalaba su cabello para hacer su cabeza hacia atrás para morder mejor su cuello. Jeff se quejó del dolor, lagrimas se formaron en sus ojos. Ahora para su próximo ataque, froto la entrepierna del rubio. Mientras que el, rogaba para que parara, aunque muy en el fondo de su ser, no quería que terminara este evento. Dipper era descortés y nada gentil con el cuerpo del chico, los besos salvajes y con mordidas eran demasiado para el pobre chico.
-No...- Jeff, temblaba al sentir el tacto de Dipper. Su voz se entrecortaba, su rostro estaba muy sonrojado, no pudo contenerse más y con un gran gemido termino en la mano de Dipper. Mientras recuperaba el aliento el castaño, bajo por completo sus pantalones y ropa interior.- Ya detente, ¿tanto me odias como para hacerme esto? ¿Qué he hecho?- Lagrimas corrieron por las mejillas del rubio, sin poder detenerse empezó a sollozar. Dipper se paró en seco para observarlo, aun en su locura por el alcohol, acaricio la cabeza de Jeff, y lo abrazo. Así se detuvo por ese momento.
-No soy lo suficiente bueno...- Por fin dijo después de un gran rato sin hablar, el castaño. Aun abrazaba a Jeff, este confundido siguió escuchando.- No soy bueno para socializar al igual que Mabel, solo soy bueno en la lectura y en lo científico, pero en lo demás apesto, aun sabiendo que Wendy está conmigo por lastima sigo con ella. Aun sabiendo que esta con otro chico y solo tener sexo conmigo cuando se aburre entonces, ¿Por qué sigo aquí? Dímelo...- El castaño miro a Jeff a los ojos, lagrimas empezaron a caer en la mejillas del rubio, eran las lágrimas de dolor de Dipper.- ¿Por qué aun sabiendo todo eso, porque no hago nada? ¿Por qué no puedo ser mejor para todos?-
La bomba había explotado frente a Jeff, el corazón se había derretido dejando a este chico al descubierto, mostrando sus heridas, sus miedos, sus propios prejuicios hacia el mismo. Era el chico que había conocido hace años, eso pensó Jeff, su Dipper había vuelto. Acaricio la mejilla de Dipper sin saber bien que hacer.
-Para mi eres lo suficientemente bueno, eres guapo e inteligente, creo que eres la persona mas genial que haya conocido...- Sin más beso a Dipper, de manera tierna pego sus labios con los del castaño. –Eso es lo único que importa ahora. Tienes que dejar de ver el lado malo, y ver lo bueno de todas las cosas.- Dipper lo miro un poco atónito. Pero se separó del castaño y le subió los pantalones. Se levantó y camino por el pasillo. Jeff se sentó y lo miro mientras andaba por el pasillo tambaleándose.
-Lo siento... Por todo.- Y se fue, dejando a Jeff confundido y un poco agitado en el pasillo.
A la mañana siguiente la voz de Mabel despertó a Jeff, eran las 12 del dia, se sento en la cama, con la gemela frente a el.
-Dormilón, ya levántate.- Sacudió del hombro al rubio, este con los ojos entre cerrados miraba a todas pates como si no supiera donde estaba. Después de unos segundos abrió bien sus ojos para mirar a la castaña frente a el. Esta rio al verlo.
-¿Qué sucede?- Le pregunto Jeff.
-Tu cabello, este todo esponjado.- Se carcajeo del chico.
-¿Mi cabello?- Empezó a peinarlo hacia enfrente.
-Pareces un león.- Tomo los mechones del rubio y los sujeto detrás de su oído, sus rostros estaban a centímetros, ahora que lo veía bien, era muy bien parecido, al igual que ella pensó en el, Jeff se dio cuenta que Mabel era muy guapa, sus ojos muy expresivos, su aroma a mujer, era muy bueno, no como el de Wendy, sino algo más suave, más femenino, su cabello rebelde caía a los lados de su rostro. Los 2 se acercaron al tiempo que cerraban los ojos, sin saber porque lo hacían, o por qué se sentían tan atraídos de pronto.
-¡Jeff! Ya es de mañana, vamos, baja a desayunar.- Una voz junto a toques en la puerta del chico los sobresaltos e hizo que se separaran al instante.
-Si, Papá, ya voy.- Miro a Mabel, la chica estaba muy roja.-¿Vamos?- Dijo en el tono mas indiferente que pudo, para que la castaña no notara como temblaba.
-Si, claro.- Salieron juntos de la habitación. Y escaleras abajo estuvieron hablando y bromeando.
Al llegar al comedor, Jeff se encontró con Dipper, este abrió sus ojos al verlo. Bajo su mirada al móvil después de ver a Jeff. Y lo peor es que se sentó a un lado del castaño.
-Buenos días...- Saludo el rubio.
-Buenos días.- Le devolvió el saludo Dipper. Esto impacto a Jeff, tanto que lo miro unos segundos atónitos.
-Dipper tu---
-¡Oh! Cierto, chicos, ustedes entran a la universidad la siguiente semana,¿ verdad?- Dijo McGucket. Coloco unos huevos en los platos de los chicos.
-Cierto...- Comento Mabel de manera pensativa.
-Como sea.- Dipper empezó a comer sus huevos con jugo de naranja.
-¿Universidad? ¿Tan pronto?- Pregunto el chico de cabello rizado.
-Si Jeffy, tiene que ir una semana antes porque son de nuevo ingreso...-Respondió el viejo. Y comió su desayuno que era una taza de café y pan tostado. Comieron en silencio, el primero en terminar fue Dipper que agradeció la comida y salió. Después McGucket, que subió a su habitación, Mabel y Jeff se quedaron solos.
-¿Quieres ver una película?- Pregunto a castaña harta del silencio.
-Ehh, seep.- Y subieron a la habitación el chico rubio.
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Esperándote( Billdip Fanfic)
FanfictionJeff, es un chico solitario que un día amaneció fuera de la mansión Noroeste sin memoria, sin saber porque esta ahí es adoptado por el viejo McGucket el dueño de la dicha mansión. Después de un tiempo conoce a unos chicos castaños por los cuales sie...