Capítulo 9.

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- Hey.- escuché un susurro.- Hey- esta vez acompañado de algo tocando mi mejilla.- Sami, despierta.- susurraron otra vez.- Sami.- volvieron a susurrar.

Tenía mucho sueño y nada de ganas de despertar. Mi sueño era hermoso. Javi estaba en él.

Estábamos comiendo barbacoa en su jardín como cada fin de semana, y hablábamos y reíamos como si no hubiese pasado nada. Él estaba contando algo sobre conejos y como sus popos se parecían a un cereal, y yo estaba a punto de abrazarlo cúando comenzó a expandirse un fuerte dolor en mi mejilla.

Entonces si desperté de golpe sentándome en la cama y sobando la parte de mi rostro en donde había recibido el golpe.

Frente a mi estaba Clara con una cara de preocupación extrema. Cuándo la miré suspiró con alivio.

- Gracias al cielo que estás bien.- Dijo tirándose a mi lado en la cama.- Creí que habías muerto.

- ¿Y por qué creías eso? - dije aún un poco adormitada y tratando de recargarme en los codos para después tallar mis ojos.

- Absolutamente todo puede pasar si estás al lado de Max- su tono era serio, pero a mi me pareció que tal vez era sólo una paranoia suya. No dije nada al respecto.

Clara se levantó de la cama con cuidado y fue directo a la puerta.

- El desayuno está listo, no tardes en bajar.- y salió cerrando la puerta tras ella.

Yo me quedé un segundo viendo él techo. De verdad no cría que estuviese viviendo eso. Que Clara y Max existieran, que yo estuviera en esa casa, y que me hubiese apartado de mi familia... Pero era real y no podía cambiarlo. Suspiré antes de levantarme e ir directo al closet para cambiarme.

Al salir, el aroma que inundaba la casa era verdaderente apetitoso. En el comedor Max y Clara ya estaban disfrutando de un Omelet que se veía buenisimo. Me quedé un segundo observándoles, platicaban amenamente de algo que no entendía, y reían. Me gustaba ver los músculos de la cara de Max relajados, conmigo nunca se veía así, siempre estaba alerta, y quizá me sentía un poco celosa de Clara por poder hacerlo sentir y lucir así, pero no podía evitar agradecercelo por mis adentros.

Estaban tan ensimismados con su conversación, que no se percataron de mi presencia hasta que me acerqué a la mesa para unirme al almuerzo.

-Buenos días.-dije al hacerlo.

-Buenos días, Sami- dijo Clara sonriendo.

A Max se le borró la sonrisa de la cara y pinchó un bocado con él tenedor.

- Buenos días.- dijo serio.

Su cambio de humor me asustó. ¿Habría hecho algo que lo molestaba? ¿Por qué mi presencia lo había hecho cambiar?

-Aquí está tu plato.- La chillona voz de Clara me sacó de mis pensamientos y me volví para mirarla con su imborrable sonrisa. Le dediqué una igual mientras tomaba el plato.

Corté un trozo de mi Omelet y lo metí a mi boca con él tenedor. Podía jurar lo delicioso que estaba, pero mis papilas gustativas no estaban activadas porque mi cerebro pensaba en él cambio de humor de Max. No debería importarme, sólo estaba allí para salvar mi vida, él ni siquiera me caía bien, pero... estaba muy agradecida por lo que había hecho por mi, y me hacia sentir impotente que mi sola presencia arruinara el momento.

-Max y yo comentábamos que sería buena idea salir hoy a la playa.- Mencionó Clara para cortar el silencio que se había formado.- ¿verdad, Max?- y lo miró.

- Si.- dijo este mientras se metía otro bocado.

Por un momento Clara lo miró como diciendo "deja de actuar así" y volvió a mi.

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⏰ Última actualización: Apr 22, 2017 ⏰

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