2. Azul.

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— Danny, yo... — Clara aún no podía mirarlo a la cara, — Lo siento, pero no sé si me gustes o no.

Danny seguía caminando, con Clara a su lado.

— Entonces esperaré a que averigues si te gusto o no, pero por favor no me evites, Clara.

— Lo siento. No es que te quiera evitar, pero me siento muy extraña. Es por eso que yo... — ella iba a continuar, pero él se había detenido delante de ella y la estaba mirando, directamente a los ojos. Ella le devolvió la mirada por un corto intervalo de tiempo, luego bajó la mirada.

— Clara — ella aún no lo miraba — Mírame. — ella levantó la mirada tímidamente. — Mejor. — dijo sonriéndole. — Simplemente actúa como tú, como lo hacías antes conmigo ¿está bien? — Clara asintió como respuesta.

Ellos ya habían llegado a casa de Clara.

— Hasta mañana. — se despidió Clara, girándose para irse.

— Espera — la detuvo Danny y ella se volteó hacia él. Él la volvió a besar.

Ella se sorprendió de que él la besara nuevamente y se volvió sonrojar, evitando su mirada nuevamente. Danny lo notó y la volvió a besar, pero esta vez besó una de las sonrojadas mejillas de Clara.

— Nos vemos mañana. — le dijo acercando su rostro al de Clara, mientras la miraba directamente a los ojos.

— Adiós. — murmuró Clara con él aún cerca de ella, intentando no apartar su mirada de los ojos de Danny.

De repente Danny apartó la mirada, él había empezado a sonrojarse.

— Hasta mañana, Clara. — se despidió nuevamente y se fue alejando de la casa de Clara.

Ella lo vio irse y entró a su casa, su madre aún no había vuelto del trabajo.

A pesar de que hacía mucho frió, pues era invierno, Clara aún sentía su rostro ardiendo.

(...)

Clara siempre era una de las primeras en llegar al aula y esta vez no fue la excepción, Cuando llegó vio al chico del día anterior, pero se fue directamente a su asiento.

— ¡Clara! — dijo una chica que entraba al aula y Clara la saludó con la mano. Aquella chica se sentó a su lado. — Ayer te fuiste temprano, ¿estás bien?

— Sí. Es solo que tenía ganas de ir a casa. — le respondió a su amiga, su nombre era Azul, ella era mucho más habladora que Clara.

Poco a poco las personas fueron llenando el aula.

— Clara, ¿estás bien?. Tus mejillas están muy rojas. — le preguntó Azul. Clara, al ver a Danny había recordado lo que  pasó la noche anterior y se había sonrojado. — Danny — lo llamó Azul al verlo. Él se acercó a ellas. — ¿No crees que Clara tiene fiebre?, su cara está muy roja. — Danny se sonrojó al ver las mejillas de Clara. Azul lo notó, al igual que Clara.

— Hola, Clara y Azul — dijo aún con las mejillas sonrojadas. — Disculpen, pero debo salir un momento. — Danny se alejó del aula.

— Clara, ¿él se ha sonrojado al verte o es mi imaginación? — le preguntó Azul, pero Clara no respondió. — Clara, ¿sabías que Danny también se fue temprano? — Azul miraba a Clara, pero ella evitaba su mirada.

Azul conocía lo suficiente a Clara como para saber que su amiga hacía eso cada vez que estaba nerviosa, también sabía que Clara no hablaba mucho sobre sí misma, por lo que lo averiguaría de otra forma.

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Hola.

Eso es todo.

Bye.

:p

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