In My Veins

Capitulo 7 "Tormenta"

~Daryl Dixon~

                  

Después de todo lo ocurrido en la velada y sobretodo en las regaderas me era casi imposible poder sostenerle la mirada a Rick, mi condición había empeorado, pues ahora solo bastaba con verlo para que aquellas malditas emociones se hicieran presentes en todo mi cuerpo.

Trataba de evitarlo lo más posible pero me las veía bastante difícil por las noches pues ya le había dicho que sí a su petición de dormir en mi celda, además el rubio comenzó a ser más cercano a mí, cosa que me empeoraba las cosas.

Una mañana desperté muy temprano para salir de mi celda sigilosamente antes de que el sheriff despertara. Me dirigí hacia la pequeña bodega donde guardaban todos los víveres y tomé una lata de sopa fría para mi desayuno, la abrí ahí mismo y comencé a comerla directamente de la lata como si de una bebida se tratara. Apenas llevaba la mitad de aquella sopa cuando fui sorprendido por Carol quien iba entrando a aquella bodega.

-¿Daryl? ¿Qué haces aquí tan temprano?

-Desayuno ¿No ves? – dije levantando la lata para que viera lo obvio.

-Vaya, alguien está de amargosito muy temprano – contestó aquella canosa mujer con una sonrisa burlesca en su rostro.

-No eftoy de amargofito- reclamé con la boca llena de aquella sopa, lo que provocó que se me derramara un poco por la comisura del labio.

Carol saco un pañuelo de su bolsillo derecho y se acercó a mí para limpiarme aquel camino de comida que se me había prolongado hasta mi mentón.

-Pareces un bebé Daryl – rio un poco la canosa mientras me limpiaba.

Terminó de asear aquel pequeño derrame y me miro aún muy cerca de mí yo le sonreí en son de "gracias".

-Vaya que madrugaron ustedes dos – dijo una voz proveniente del marco de la puerta, lo que hizo que Carol y yo volteáramos a esa dirección para encontrarnos con Glenn.

-Lo mismo digo chinito, siempre eres el último en despertar – dijo Carol riendo.

-¡No es cierto! – Exclamo aquel asiático indignado – Hace un par de días Daryl y Rick se despertaron casi a las once ¡A las once! – dijo esto último ensanchando sus rasgados ojos al mismo tiempo que hizo un pequeño puchero.

-Diez – le corregí a la par que me puse un poco nervioso, pues fue el día que comenzó todo mi alboroto por ese sheriff –  Además fue el único día que ocurrió, los demás tú has sido el más jodido perezoso.

-¡¿Perezoso yo?! – pregunto aquel chino aún más indignado, era gracioso verlo así, al parecer no fui el único en creerlo pues Carol soltó una risa moderada ante tremendo drama del chino.

-Tranquilo Glenn, Daryl no quiso decir que eres un perezoso – Carol trató de arreglar mis palabras aun riendo.

-Sí, sí quise – le corregí ahora a canas, lo que hizo que esta me viera con ojos de querer matarme.

Glenn olvido su "indignación" y comenzó a reír, lo que hizo que Carol y yo nos contagiáramos de esa risa, pero aquella escena se vio interrumpida por una voz que yo conocía perfectamente: Rick.

-Están de muy buen humor esta mañana – dijo el sheriff con una ancha sonrisa mientras se adentraba a la bodega. Borré mi sonrisa de inmediato y los nervios empezaron a inundarme, baje la mirada y me dispuse a salir de aquella bodega en cuanto antes.

-¿A dónde vas Daryl? – preguntó el sheriff.

-A cazar – contesté seco.

-Voy contigo – dijo animado.