Amor o Deseo?

II Extra. "Engaño"

- Entonces dices que crees que Aomine te engaña? - Kise asintió con la cabeza y Kuroko parecía un tanto sorprendido y extrañado.

- Últimamente ha estado muy distante... Llega tarde y demasiado cansado para hacerlo... - Un puchero se apoderó de su rostro a la vez que sus ojos comenzaban a humedecerse más de la cuenta.

- N-No crees que estas exagerando? Tal vez solo hace horas extras... Es complicado ser policía. - Díjo a la vez que daba un sorbo a su bebida.

- Claro que no! Algo sucede... Mi instinto me lo dice! - Golpeó con ambas manos la mesa mientras gritaba aquello.

- Acaso eres un animal? - Se burló un poco y luego volvió a aquella expresión seria de siempre.

- Es en serio kurokocchi... Y si se enamoró de alguién más? ...alguién mejor que yo? - La mirada de Kise perdió brillo y pudo apreciar como las manos de este temblaban.

- Kise-kun, Aomine y tú estan casados... Qué otra prueba quieres que demuestre más amor y compromiso que esa argolla en tu dedo? - Las palabras de su pequeño amigo le hicieron recapacitar un momento, sabía que Daiki le amaba pero no podía dejar de pensar en el extraño comportamiento que el moreno estaba presentando.

- Quizás tienes razón... - Sonrió un tanto dolido y se levanto de la mesa para coger el teléfono que había comenzado a sonar.

- Si? - Contestó e identificó la grave y masculina voz de su esposo del otro lado de la línea.

// Hoy llegaré algo tarde... No me esperes despiert-//

- Mucho trabajó en la estación? - No pudo evitar que su voz saliera un tanto entristecida lo que no pasó desapercibido por Daiki.

// No te pongas triste... Trataré de terminar lo más rápido posible!//

- Bien... Te amo mucho. -

// Yo también te amo, Ryouta.// Su corazón se detuvo por un momento al escuchar unas palabras tan dulces y sonrió con calidez.

- Y bién? - Kise soltó un suspiro luego de colgar y camino sobre sus pasos para volver a la mesa.

- Hoy también llegará tarde... - Apretó los puños y se sentó nuevamente frente a Tetsuya.

-... No te preocupes demasiado. - Miró el reloj de su muñeca.- ya es hora de irme! -

- Te acompaño a la puerta! -

- Insisto... No te preocupes demasiado! -

- Ok Ok! Adiós! - Cerro la puerta y llevó los platos al fregadero, camino hasta la habitación que compartía con su sexy esposo y se arrojó en la cama para coger una de las almohadas he inhalar el característico olor de Daiki.

-... Quiero sexo...!! - Comenzó a rodar por la cama con un puchero en el rostro hasta que se cansó de tanto girar y soltó un suspiro. -... Daicchi... - Los últimos días había madrugado y como esperaba su cuerpo y mente se encontraban cansados de tanto trabajo, entre la suavidad y calidez de las mantas se sumió en el mundo de los sueños.

***

Su jornada en la estación se había prolongado gracias a la disminución del personal luego de una situación que había dejado a cuatro compañeros heridos. Llevaba unas semanas con un turno como ese y como era de esperase se sentía cansado, un tanto estresado y sobre todo malhumorado gracias a la falta de sexo con su amado esposo... Se inclinó en su silla y la imagen de Kise saliendo de la ducha desnudo, con aquel cuerpo tan bien definido por esos músculos y ese encanto natural llego a su mente, pensar en todo aquello le hacía estrañar la intimidad.