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Súper Maratón 2:

-¿Qué les sucede a ustedes dos? ¿Es que hicieron las paces? -inquirió el líder de Bangtan con preocupación, se cruzó de brazos y arrugó el entrecejo cuando yo desvié la mirada-. Ya no los vemos pelear como hacen habitualmente y ambos están actuando de forma rara, aunque me costó un poco más de trabajo notarlo en Yoongi...

-Hyung, no se preocupe, estamos bien -hablé sonriendo fingidamente- ¿Cierto que sí, Suga hyung? -lo miré intentando con todas mis fuerzas mantener mis ojos fijos en él, noté como empuñaba ambas manos con fuerza y tosí con incomodidad.

-Los chicos están preocupados por ustedes y yo debo saber que ocurre 

-Da igual, no ha sucedido nada, todo está bien, nosotros simplemente hemos decidido dejar nuestras diferencias de lado -al oír su voz grave un escalofrío recorrió mi columna y es que su voz no solía ser así ¿O tal vez si lo era? La verdad no nos dirigíamos ni la mirada desde ese día, hace exáctamente ocho días.

Bueno, la verdad era que yo lo estaba evadiendo a toda costa, no quería rendirme a sus pies nuevamente, no quería sufrir más, sus malos tratos ya me habían pasado la cuenta y no quería humillarme nuevamente; Pero él no dejaba de observarme. A veces sostiene mi mano en busca de atención, pero hasta el momento he encontrado excusas cada vez que ha hecho eso.

Me duele verlo así, me duele saber que a él le afecta tanto como a mí y tal vez no fue la mejor decisión, pero las palabras ya están dichas y probablemente sea lo mejor.

-¿Verdad que sí, Jimin? -tragué saliva volviendo a la realidad y mirando por equivocación a los ojos de Yoongi, quedé paralizado y simplemente no podía hablar.

-Eh... sí -murmuré sin dejar de mirarle, asintió lentamente y se giró dándome la espalda.

-Si eso es todo, me marcho -se despidió con la mano alzada sobre su cabeza y se fue, bajé la cabeza y me concentré en mis pies, sintiendo como las lágrimas mojaban mis mejillas.

-¿Estás llorando? Mierda Jimin, yo sabía que había algo mal... -restregué la manga de mi camisa sobre una de mis mejillas empapándola de lágrimas.

-Hyung... lo siento, yo no puedo decirle -susurré y un sollozo escapó al final, sus brazos descubiertos me envolvieron y me aferré a Namjoon con fuerza, no podía con esto, nunca habíamos estado separados en nuestros ocho meses de relación, esto estaba malditamente mal. Rasguñé la espalda de Namjoon con desesperación mientras las lágrimas fluían y luego me separé bruscamente murmurando un "No le cuentes a nadie, por favor" antes de huir. Necesitaba estar solo.

Volví al departamento y entré pasando directo a mi habitación, sin darme el tiempo de explicarle a los demás en dónde había estado a pesar de que estaban preocupados, y es que me había dolido estúpidamente que Yoongi no esperase por mí junto a los demás, pero al entrar en mi habitación y asegurar el pestillo, al girarme y tomar aire, al mirar a mi alrededor lo vi. Yoongi esperaba por mí sentado a los pies de mi cama de piernas abiertas, con los codos sobre sus rodillas y la cabeza entre las manos alborotando su cabello, al oír la puerta levantó la vista con la cabeza aún entre sus manos y conectamos miradas.

-¿Qué... qué haces aquí? -pregunté aclarando mi garganta, no quería que notara lo débil que me sentía teniéndolo tan cerca.

-Te esperaba, se ha hecho bastante tarde y tu no volvías ¿Sabes? -mordí mi labio inferior y escondí mis manos detrás de mi espalda para que no viese como se movían mis dedos de inquietud.

-Ah... pues ya he vuelto, puedes retirarte -desvié mis ojos hacia la pared y caminé hacia el baño.

-¿Por qué sigues huyendo de mí? ¿No puedes simplemente admitir que esto está mal?

-Hyung... yo prefiero que esto sea así...

-No, tú crees que esto es lo que yo prefiero, no digas que tú lo prefieres. Confiesa que lo que haces es pensar en mí

-Sí, está bien, eso es correcto, creo que esto es lo mejor debido a que debes preferir esto a que nos pillen de la mano -confirmé pegando mi frente a la pared para así evitar mirarlo.

-Pero eso no es así

-¿Cómo así? 

-Yo no quiero estar alejado de ti, ya te lo he dicho... Te amo, Jimin

-También te amo, hyung... -sonreí sin girarme a verlo, cerrando los ojos y disfrutado de la sensación de amor que se acumulaba, eran millones de mariposas surcando mi estómago y este momento era similar a nuestro comienzo, a aquella primera confesión-. Pero no quiero que sigas haciéndome daño, me duele cuando decides ignorarme, me duele cuando me insultas frente al resto, o cuando finges desagrado hacia mi cuerpo... Maldición me duele demasiado, el simple hecho de que no respondas a mis saludos en las mañanas es una tortura para mí ¿Has pensado en eso alguna vez? -tragué saliva cuando el silencio se armó en la habitación y exhalé con fuerza, sintiendo los nervios crecer cuando Yoongi acarició mis hombros y mis brazos hasta sujetar con sus manos las mías y sostenerse con ellas sobre la pared, apegándome a ella y él apegándose a mí.

-Lo he pensado demasiado... y no sabes cuanto me cuesta ignorarte siendo tú tan hermoso... -susurró sobre mi oreja, mantuve los ojos cerrados, disfrutando en extremo de su calor, después de todo lo extrañaba.

****Continuará, no se preocupen<3 Las amo gente bonita<3 dfkjkfh****

(No br0, que tóxico todo SJDJSKK)

Suga-Hyung {Yoonmin}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora