Suga-Hyung {Yoonmin}

#35

Daba saltitos de alegría, aunque, también admito que comí mucho chocolate antes de venir a la empresa, después de todo, necesitábamos energía para grabar de forma divertida el Dance Practice de Not Today.

Los del equipo de grabación preparaban sus cámaras bastante concentrados, otros los micrófonos, el manager estaba atento a todos, Jungkook bailaba con Hoseok hyung, Tae conversaba con algunos bailarines, Namjoon hyung y Jin hyung practicaban el baile una vez más y... Yoongi... ¿Dónde estaba Yoongi?

-¡Suga hyung! -lo llamé sin recibir respuesta, hice un puchero y corrí por los alrededores, encontrándolo junto a una máquina expendedora. Sonreí y comencé a acercarme mientras lo llamaba una vez más, pero él soltó un suspiro, destapó una botella de agua, comenzó a beber y a caminar, alejándose como si yo no estuviese ahí, bufé molesto.

¿Otra vez iba a ser así? ¿De verdad? Rodé los ojos y me decidí a olvidar aquello, por lo que caminé de vuelta al set, pero una mano me detuvo, haciéndome voltear. Fruncí el ceño al verlo, era Yoongi luciendo una hermosa sonrisa.

-¿Qué quieres? -gruñí, no estaba de humor con él. Quizás, si no me hubiese ignorado hace un par de minutos, ya nos estaríamos besando. Pero definitivamente no era el caso, sólo tenía ganas de patear entre sus piernas.

-Un beso -sonrió aún más y, sujetando mi nuca, se acercó y me besó ¿Y qué creen? Correspondí el beso. Pero, para que conste que estaba molesto, le mordí la lengua.

Luego de aquella escena súper romántica, y de que Yoongi me explicase que lo que hizo junto a la máquina expendedora era una broma, más bien, parte de su plan "besar a Jiminie", nos reunimos con los demás en el set y comenzamos a grabar. Bueno, debo decir que no era un set, ya todos lo sabíamos y las Army's igual, sólo era un gimnasio. La cosa era que yo, personalmente, me había acostumbrado a llamar 'set de grabación', a cualquier lugar rodeado de cámaras.

Terminado eso, nos dirigimos al salón de prácticas habitual, y grabamos el Dance Practice de Spring Day, sí, fue un largo día. Pero la recompensa fue buena, debido a que, terminados ambos vídeos, nos dieron una pequeñas y lindas vacaciones.

Caminé un par de cuadras más y quité el cubre bocas de mi rostro cuando estuve frente a la puerta, presioné el timbre y mi madre apareció con su linda sonrisa, que imité feliz de verla.

-¡Hijo! ¡Mi Jiminie! -gritó con euforia, saliendo de casa para abrazarme, la estreché entre mis brazos y olfateé su perfume.

-¿Cómo ha estado, mamá? -ella asintió diciendo que estaba bien, nos abrazamos otro rato y entramos de la mano-. Mamá... la verdad, vine para hablar con papá... ¿Él está? -su rostro se complicó, ambos sabíamos a lo que me refería.

Me acerqué a él luego de obtener una confirmación por parte de mamá, sentándome en el sofá individual, para poder estar de frente a él, para poder enfrentar sus prejuicios.

-Hyemin ya me lo ha dicho, no quiero escucharte -sus ojos cristalizados me erizaron la piel, era la primera vez que veía a papá así, no me gustaba, pero tampoco iba a permitir que se negase a mí, a su hijo.

-Papá... -mantuvo su vista fija al televisor apagado, con sus manos hechas puños.

-No -se negó-. No puedo aceptarte -tragué saliva intentando destensar el nudo que se formaba en mi garganta-, lo siento

Me levanté y salí de casa, evitando a mamá y sus gritos, conteniendo las lágrimas y soportando el dolor en mi pecho ¿Por qué él no podía ver que yo seguía siendo Jimin, su hijo? Saqué el celular del bolsillo del polerón y llamé a Yoongi.

-¿Estás mejor? -preguntó por tercera vez. Ya me encontraba en casa, me había estado alimentando con dulces desde que había llegado, haciéndome reír de lo lindo que podía llegar a ser ¿Por qué papá no estaba aquí para ver que un hombre me hacía feliz? Amaba a Yoongi desde lo más profundo de mi corazón ¿Por qué tenía que ser así?

-Sí... contigo siempre estoy bien -sonreí y me apegué a su pecho, sentí sus labios sobre mi frente y alcé la vista para verlo a los ojos.

-A veces eres tan cursi -arrugó la nariz y sacó otra galleta del plato, metiéndola a mi boca sin previo aviso-. Tienes que comer todo lo que compré, son antidepresivos muy caros ¿Sabes? -rodé los ojos y asentí separándome de él para sacar algo más mientras continuaba masticando la galleta-. Ya, pero puedes comer aquí -gruñó abrazándome fuerte para dejarme pegado a su pecho nuevamente, reí fuertemente y asentí.

El manager me había llamado temprano el día anterior para decirme que debía ir a la empresa porque algo importante había sucedido. Me impaciente mucho debido a que era el único que parecía estar involucrado en aquel incidente, por lo que en este momento me encontraba de camino hacia allá. Llegué y corrí a la oficina del mánager, saludándolo y preguntando el porqué de su llamado, notando luego la presencia de Kihyun.

-Pero... ¿Qué hace él aquí?

-Kihyun de algún modo se entero de tu relación con Yoongi e intentó publicar la información en una revista, pero como puedes ver, no le funcionó -miré consternado al chico junto a mi, estaba impactado, asombrado, decepcionado ¿Por qué lo había hecho? ¿Cómo había sido capaz? Recordé la advertencia de Yoongi y suspiré para calamarme.

-Lo siento... -susurró, fue lo único que dijo, y lo único que estaba dispuesto a escuchar de todas formas, asentí, me despedí en silencio y volví a casa.

La hora de la cena llegó y esta pasó entre preguntas acerca de lo que había ido a hacer a la empresa y los chistes malos de Seokjin hyung, sin duda, amaba estar en Bangtan y sonreí ante tal pensamiento. Todos nos dirigimos a nuestras habitaciones, exceptuando a Yoongi hyung, que ahora se encontraba en mi cama, conmigo sobre él.

Acariciaba mis costados con ternura mientras nos observábamos fijamente a los ojos y sonreíamos con cariño.

-Algún día voy a raptarte y llevarte a algún lugar donde el matrimonio homosexual sea aceptado -contuve mi risa y asentí.

-¿Esto es una propuesta?

-Depende... ¿Aceptarías si lo fuera? -fingí pensarlo unos segundos y asentí.

-Por supuesto que sí

-Entonces sí, nos casaremos -nuestras sonrisas fueron fundidas en un largo y delicioso beso.

-¿Y tendremos diez hijos? -reí ante su expresión de indignación y espanto.

-No. Sólo... conformate con Holly -mordí mi labio inferior.

-Suga hyuuuung -hice un puchero, negó con la cabeza varias veces.

-No, ya lo he dicho. Sólo tú y Holly, no acepto más niños

-Me conformaré entonces -sonreí y lo besé.