Emma
Me despierto al oír la alarma de mi celular e inconscientemente la detengo. Abro los ojos y un dolor de cabeza inunda mi cabeza aturdiéndome. Lo primero que logro ver son las horribles cortinas rosadas con estampado fosforescente que compro mi madre cuando tenia 10 años haciendo que el dolor sea mas pronunciado. Me doy la vuelta y miro el reloj que muestra las "7:15" en grande. Como siempre llegare tarde el primer día ya que la clase empieza a las 8 y no tengo nada listo. Me levanto como un resorte lo mas rápido que puedo y logro escuchar los fuertes ronquidos de Harry que inundan la habitación. Busco a mi alrededor y tomo una almohada y se la lanzo causando que gruña y cambie de posición. Ya veo que tendré que bañarme primero.. Tomo mis lentes y me acerco al armario. Como siempre no se que ponerme y quiero y ir lo mas simple posible, no quiero parecer una diva el primer día. Decido usar una blusa blanca de manga larga, jeans negros y botines negros de tacón. Lo dejo sobre la cama y decido llevar conmigo el sujetador y las bragas al baño para evitar momentos incomodos de que Harry registre mis cosas. Tomo una toalla y camino hacia el baño. Pongo música como siempre y le subo el volumen al máximo. Ya en la ducha me pongo a meditar como siempre y tomo la crema depilatoria del estante en la ducha y uso un poco, quiero evitar cualquier vergüenza hoy ya que lo mas posible es que nos quedemos viviendo aquí para siempre.. desgraciadamente. Salgo y me pongo la toalla, tomo otra y seco mi pelo un poco para seguidamente conectar la secadora y secarlo por completo. Al terminar me quedo unos segundos mirándome al espejo, no tolero estar tan nerviosa por algo tan estúpido. Conecto las tenazas y me ondulo las puntas como siempre. Quedo satisfecha en como termina y empiezo con el maquillaje. Decido solo usar lo básico, polvos, labial, rímel y delineador. Sin darme cuenta estoy matizada cantando las canciones que resuenan de Coldplay y el sonido de un golpe en la puerta me interrumpe.
–Emma Daniels! Que tanto haces? Solo Ashton pudo bañarse y te tardas una eternidad. Vas a la universidad, no a una competencia de belleza! –grita desde el otro lado de la puerta.
«Ya empezó..»
Si hubiera un espejo en la habitación podría alistarme pero noooo. Tenia que ser brutalmente quebrado por una nalgada. Salgo molesta del baño y cierro la puerta de un portazo causando que mi madre me fulmine con la mirada. Entro a la habitación en la que veo a Harry todavía dormido pero las cortinas ahora están abiertas. Confundida me adentro a la habitación todavía en toalla pero con mis bragas y sujetador por debajo. Veo a Harry acostado en la cama mirándome para segundos después repentinamente cerrar los ojos y hacerse el dormido.
«Te vi»
Busco lugares de la habitación para cambiarme pero solo veo el armario, que desgraciadamente tiene estantes y es imposible esconderme allí. Quedándome sin opciones me planto a mirarlo para saber si realmente esta dormido, pero el se limita a quedarse quieto. Tomo la cobija de mi cama e intento cubrirme pero esta se cae haciendo que Harry se ría. Me río de mi mala suerte y termino rápidamente de vestirme.
–Levántate vago! –grito tirando otra almohada.
–No. –dice indiferente revolviéndose en la cama.
Me quedo plantada mirándolo esperando a ver si habla enserio o no hasta que veo que empieza a roncar nuevamente.
–Iré a desayunar. Báñate por mientras, tienes que llevarme. –digo bajando las escaleras finalmente.
Me acerco al desayunador y tomo un pan de orégano parmesano de mis favoritos y me preparo mi típica receta de cuando era pequeña con lechuga, tocino y jalea de uva y un vaso de agua. Muchos lo ven asqueroso pero es lo que hacia cuando no había comida en casa. Le doy un mordisco y reviso el movil por mientras, al ver la hora me sobresalto y corro hacia al baño a lavarme los dientes y tomar un chicle de mi bolsillo rápidamente y masticarlo. Subo las escaleras y me adentro nuevamente a la habitación y veo que Harry sigue en la misma posición dormido.
