c u a t r o

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- Shu, madre no te dio permiso de salir.

¡Nooo! ¿Por qué después de tanto tiempo de no haberla descubierto lo hacen?

Reiji miró a su hermana con una ceja arqueada, sabía a dónde se dirigía, pero eso le molestaba. Era una dama, no tenía que ir a ver a un niño estúpido y pobre.

- ¿No? Bueno, iba a explorar el bosque...-murmuró Shu tratando de buscar una salida.

- De acuerdo, dejame acompañarte, es peligroso para una señorita.

¿¡Qué tenía la gente con esa palabra!? Era una horrible palabra, la odiaba. Pero, dejando eso de lado, ¿ahora que haría? No podía ir a ver a Edgar y que su hermano se diera cuenta, lo más probable es que la acusará.

Tenía que idear un plan.

- ¡Bien! -la rubia tomó la mano del azabache y lo arrastró dentro del bosque.

- ¡Es-espera Shu!

Eso estaba mal, se suponía que Shu se rendiría y entraría a casa, no que él iba a ir también. Su plan estaba arruinado.

Reiji estaba impresionado por la fuerza de su hermana, a pesar de ser mujer era muy fuerte. Sentía los cabellos rubios de Shu golpear su cara.

- ¡Mira! -finalmente pararon frente a un lago enorme y hermoso.

- No sabía que existía un lago... -murmuró Reiji observando la belleza de la naturaleza, era genial.

Shu sonrió.

- Reiji, no quiero que me odies, eres mi único hermano, si te he hecho algo, te lo digo de verdad, lo lamento tanto.

Una suave brisa hizo que el cabello de Shu junto a las lágrimas que amanezaban por salir se vieran hermosas.

Reiji miró a su hermana procesando lo que había dicho. No la odiaba, claro que no, a pesar de que era su hermana mayor, no la odiaba, no podía, sentía que él debería cuidarla cuando ella estuviera en peligro.

Reiji sonrió.

- No te odio, Shu -la rubia miró a su hermano sorprendida y lo abrazó.

- ¿Me dejas contarte un secreto? -cuestiono Shu nerviosa, pensando en lo que le diría.

Reiji miró confundido la cabellera de Shu, él era un poco más alto que ella.

- Claro.

Shu tomó aire y habló.

- Tengo un amigo, se llama Edgar, pero no se lo digas a mamá, por favor.

Reiji veía curioso a su hermana, defendiendo tanto a un humano inservible...no lo permitiría, ¿qué tenía "Edgar" que él no? Nada.

Y sonrió abrazando aún más a su hermana.

- No te preocupes, no lo haré.

Y mientras Shu creía que había hecho lo correcto, estaba feliz por ello. Reiji pensaba en lo ingenua que era su hermana al creerle.

Su hermana era una linda ingenua.

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Vamosss, no hace falta que diga que lo siento, pero Reiji será el malo de la historia(lo amoooo).

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Señorita.[GenderbendDL]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora