Capítulo 13.

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La noche llegó y el silencio completo con ella, ya no había murmullos ni sollozos. Niall luchaba contra las lágrimas pero miles de recuerdos junto a Zayn llegaron a él: No se podía creer que estuviera muerto. Es tan difícil aceptar eso, pensar que ya no lo verás más, que no se encontrará con esos ojos miel y esa sonrisa tan dulce. Ya no escuchará su risa y el chico tímido moreno que sólo hablaba cuando debía lo había dejado. Se había ido y lo que más dolía es que era para siempre. Nunca más volvería a estar con él. De repente se sentía estúpido, por todo lo que había pasado allí. Por esos engaños a Zayn y falsos te quieros. Lo quería sí, pero a veces pensaba en otros cuando se lo decía. Suelen decir que sólo tienes que perder a alguien para darte cuenta de cuanto lo querías, pero no debía de estar muerto, no de esta forma. Sus pensamientos hacían que miles de lágrimas cayeran por sus mejillas y que sintiera una fuerte punzada en su pecho. Era como un desgarro de la garganta que no cesaba y dolía y que parecía no desaparecer nunca. Aunque llorara, gritara o golpeara, esa sensación no se iba.

Escuchó unos ruidos en la parte baja de la casa. Necesitaba a alguien con hablar, pero no si era Yaser. Por que sabía que este le diría lo que él evitaba pensar: Zayn dió su vida por él, mientras Niall se encontraba con Liam. Triste realidad. Para su suerte era Harry, este se encontraba con los ojos rojos e hinchados. Se movía de un lado a otro por la cocina de manera torpe, parecía que buscaba algo mientras murmuraba miles de insultos.

-¿Harry te pasa algo?- dijo este en un tono bajo, el rizado no contestó y siguió a lo suyo- ¿Estás bien?- por primera vez desde que había llegado, los ojos verdes, que ahora se encontraban irritados se posaron en los azules llenos de lágrimas de Niall. Este pudo sentir todo el dolor de Harry, pero no sólo había dolor sino también mucho odio.

-¿¡Cómo quieres que esté bien!? ¿¡Cómo!?- algunas lágrimas salieron de la rabia. Harry estaba sumido en una tristeza y angustia- ¡Está muerto!- gritó, Niall se asustó y sintió miedo.- Esta muerto- susurró cayendo al suelo, abrazandose a sí mismo- Y es por mi culpa- terminó en un susurro para empezar a llorar.

Niall se sorprendió de ver a Harry en este estado, tan frágil. Parecía un niño pequeño que lloraba desconsoladamente esperando un abrazo. Se acercó a Harry y lo abrazó, este empezó a llorar en el hombro de Niall.

-Es mi culpa, Niall, lo debí de haber cuidado mejor.

-No es la culpa de nadie, Harry, lo hiciste lo mejor que pudiste. Era la guerra, existía esta posiblidad- Harry dejó que el calor de Niall lo calmara y se sintió bien en los brazos de este, sólo necesitaba sentir a alguien. No quería estar sólo.

Harry se apartó un poco de Niall, no mucho, sus rostros se encontraban a escasos centímetros. Sus respiraciones chocaban la una con la otra, y como si se sintieran atraídos el uno por el otro se fueron acercando hasta que sus labios quedaron unidos. Las grandes manos de Harry se fueron a la mejillas de Niall para asin profundizar el beso, mientras ese se perdía en la larga melena de rizos. La mano de Niall fue bajando hasta llegar a los botones de la camisa de Harry, se la quitó. Empezó a cariciar el abdomen y los brazos fornidos del rizado, lo hacía con desespero y con ansias. Se fueron besando mientras se desprendían de cada prenda. Harry hizo fricción con su pene y el de Niall sacándole un gemido a ambos. El rizado levantó al rubio mientras este enrollaba sus piernas en la cadera de este. Lo dejó en la mesa y siguió con los besos pero esta vez en el cuello. Niall echó la cabeza hacia tras dejando más espacio a los labios de Harry para besar su cuello. Su cara estaba roja y llena de pura excitación.

-T-te había echado d-de menos- le dijo Niall entre gemidos. Harry sonrió separando las piernas de Niall, y sin aviso ninguno entró de una estocada. Este gimió de dolor, aunque poco a poco se convirtieron en gemidos de placer. Oh sí, había echado de menos sentir la polla caliente de Harry en él.

Amores desenfrenados [N.S-Z.H-N.P-L.S]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora