Capítulo III »Confrontando los Hechos y Hechizos«

7.2K 558 113
                                    

By Jayson

Hacía poco rato que el Sr. George y mi madre se habían ido. Ella necesitaba descansar y el Sr. Jones ir a resolver sus pendientes laborales. Aun no podía procesar la idea de que esa persona, esa misma que me había ayudado y estaba ahora en una cama de hospital era nada más y nada menos que Alex, el hijo de George Jones, la pareja de mí madre.

No podía creer semejante coincidencia.

Tampoco sabía que hacer cuando Alex despertara. Estaba seguro que sí sabía quién era yo... se arrepentiría de haberme encontrado. ¿Que cómo estaba tan seguro? Había escuchado la plática de su padre y mi madre, justo cuando lo llevaban a él en una camilla a "Urgencias". De eso habían pasado apenas dos días.

—Aun no puedo creerlo —Recuerdo que comenzaba a decir el padre de Alex —Mi hijo, el mismo que conozco, arriesgandose por alguien desconocido para él.

—Eso demuestra que es un buen muchacho —Señaló mi madre. Procuraban hablar bajo para que yo no pudiera oír nada. No contaban con que yo, a pesar de estar hecho un ovillo en uno de los asientos de la sala de espera, podía oírlos a la perfección —George, no sabes lo... agradecida que estoy con Alex. Si no fuera por él, Jayson...

—Sigo sin entenderlo.

—¿Por qué? ¿Tan poca confianza sientes por él?

—No lo sé. Pero mi hijo no es esa clase de persona. Cuantos menos problemas tenga que lidiar mejor.

—Pero ayudó a Jay.

—Lo sé. Es por eso que estoy intrigado Jennifer. No quería decirte nada... pero cuando le llamé... si pude hablar con él. Y no estaba dispuesto a ayudar en la búsqueda de tu hijo.

—Entonces... ¿Por qué...?

—Probablemente... Quizá no tuvo más remedio. Tampoco estaba enterado de cómo era Jayson, en cuanto sepa a quién salvo... puede que reaccione mal.

—Me estás asustando George. Si él no nos quiere aquí entonces yo...

—No, no puedes irte, no ahora que ya están aquí.

—Pero... Jayson y Alex...

—Alex tendrá que aprender a ser tolerante. Le faltan muchos valores que no le he sabido inculcar. Tal vez la llegada de Jayson y tuya pueda cambiar su forma un tanto insensible de ser.

—¿Y como estás tan seguro de que...?

Pero ya no pudieron seguir hablando. En ese momento llegó una enfermera para preparar el papeleo que se debía tramitar en el hospital.

"No es esa clase de persona"

Si no lo era ¿Por qué se tomó las molestias de ayudar a un desconocido? Yo tampoco podía entenderlo. Mi madre no sabía cuánta razón tenía, de no ser por él... no quería ni imaginar lo que me hubiera pasado. Ellos no sabían más que lo necesario y lo contado por el oficial de la policía. Sabían que unos hombres me habían intentado "agredir" y que Alex me había salvado, pero además de todo que antes de saber eso lo habían culpado a él y le habían puesto una paliza más aparte de la que mis agresores le habían dado. Aun recordaba como lo encontré en esa habitación.

No aguantaba más y en cuanto pude me escapé para buscarlo. No sé como, pero logré dar con él. Cuando entré por la puerta y vi su cuerpo en el suelo corrí rápidamente a su lado ignorando a un tipo corpulento que estaba hablando por teléfono. Su cara estaba hinchada y su labio partido, su piel pálida lucía blanca como la cal, su nariz sangraba al igual que su boca, sus párpados lucían púrpuras y... no respiraba. Estaba a punto de gritar por ayuda hasta que escuché una voz familiar: La de mi madre. Ni siquiera me volví para asegurarme de que era ella, únicamente podía ver a esa persona que por mi culpa se encontraba así.

INTRUSO [ + ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora