01

324 19 0
                                    


Se han preguntado alguna vez ¿Qué es lo más peligroso que han hecho en su vida?... Pues yo estoy sentada a la orilla de la calle húmeda en las afueras del supermercado junto a algunos amigos que se encuentran hablando solo dios sabe qué cosa, mientras espero el momento perfecto para entrar y robar algunas cajetillas de cigarrillos del supermercado.

—Cokie ¿entraras o no?— Jeremy interrumpió mis pensamientos.

—Claro... ¿Quién es el centinela?.

—A la mierda, te toca sola.

—A la mierda ustedes, me voy a mi puñetera casa.

Levantándome de donde me encontraba, sacudí un poco los restos de basura que se habían pegado a mi pantalón.

—Vamos... no seas mamona— se quejó.

—Jeremy los mamones son ustedes, siempre quieren que yo sea su centinela pero ahora que me toca a mí, no quieren mover su horrible trasero—

—Ya, ya... está bien iré yo...

Enseguida se levantó, la adicción a la nicotina nos provocaba hacer esto o más desde hace un par de años. Metiendo mis manos en mi chaqueta de cuero por el frió, caminamos hasta entrar al supermercado. Nos dirigimos al pasillo de chucherías y tomé una bolsa de palitos.

—¿Estás listo Jerm?—

—Cuando me digas...—

—Ya...—

La táctica de robo era la más simple del mundo. Estaba en la fila esperando mi turno, di unos pasos más hasta que era mi turno y Jerm con una mirada me hacía saber que todo estaba bajo control.

—¿Solamente?— preguntó la cajera.

—Si.

Alzando mi mano hacia el contenedor, dejé caer tres cajas de cigarrillos, una que cayó hasta el suelo y dos que quedaron en mi chaqueta la cual estaba deteniendo con mi otro brazo en el lugar preciso de maña.

—Ups. Lo siento— me disculpé y recogí la cajetillas del suelo.

—Está bien, solo regrésala a su contenedor.

—Claro, fue un accidente— sonreí y ella asintió devolviéndome mi vuelto.

Tomando la bolsa donde había empaquetado la chuchería, me retiré del lugar luego de guiñar el ojo para Jerm que aun esperaba, como señal de irnos.

—Esta es de ustedes— dije lanzando la cajetilla familiar al regazo de Jong que se encontraba aun tirado en la acera.

—No tenías que despertarme de esa manera Cokie— se fregó los ojos.

—Esta es mía— y metí la cajetilla en la bolsa escondida de mi chaqueta.

—Pero es familiar— se quejó Jeremy.

—Da igual, lo he conseguido, es mía—

Luego de encender unos cigarrillos decidimos irnos, era evidente que no era bueno estar cerca de donde se había cometido un delito. Caminamos por la calle hasta llegar al parque que había en la localidad. Era un parque escondido, casi destrozado, prácticamente los chicos que querían hacer sus fechorías se encontraban allí. La mayoría del tiempo lo pasaba en ese lugar, jugábamos naipes y a veces montaba la patineta de Jerm, fumábamos y a veces consumíamos una que otra sustancia.

Tomando asiento a la orilla de la piscina, sacamos otros cigarrillos, pero esta vez Jerm quería hacer puente, yo jamás aceptaba hacerlo con él, porque lo odio y es asqueroso, si lo es de lejos... se imagina de cerca. Tomó cinco cigarros y los unió con hilo dental del que andaba en mi bolso —ellos jamás tenían respeto por mis pertenencias—, empezó a encenderlos con el mechero y dio una calada que lo hizo suspirar. Hicieron puente con Jong. Yo los ignoré.

Retrospectiva Sharmaine (BTS ~ V)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora