Desde antes de nacer...

Juego previo.

Los personajes mencionados en esta historia no me pertenecen, son de la maravillosa Rumiko Takahashi.

-Diálogos-

Pensamientos

Anteriormente...

Un día más y hoy la luna de miel llega a su fin, dejando una confesión y un posible amor por nacer, pero ¿Se enteraran de la gran mentira de tras de su matrimonio? y ¿Qué es lo que pasara si eso llega a suceder?... Aun no llegamos a esa parte para dar respuesta a las preguntas, así que Ranma y Akane disfrutan del último día solo, antes de volver a la casa donde seguramente surgirán problemas.

Un día agradable... Los jóvenes esposos han decidido intentar llevarse mejor, ya que después de probarse los labios se volvieron adictos a sus besos, no perdían ocasión para volver a hacerlo, en el último día, en esa hermosa playa, caminaron por un largo rato cerca de la orilla, pero Ranma no deseaba ser tocado por el agua así que evitaron estar muy cerca, jugaron un poco en la arena y abrazados miraron el atardecer. El hermoso azul del mar, el resplandeciente sol y la cálida arena fueron testigos de lo que podría ser amor.

Continuación...

Andar contigo es divertido, la vida es color rosa y es más fácil, como en una montaña rusa, eres la droga que me pone Feliz, solo tú me haces sonreír, solo tú me haces sentir Hapy.

Como todo lo bueno acaba, este día se les acaba la luna de miel a los jóvenes esposos, estaban realmente felices por el tiempo que habían pasado juntos, pero era hora de volver a la realidad, despertar de ese sueño, pero habían hecho un pequeño juramento, tratar de llevarse mejor, aunque aún querían disimular un poco ante sus padres. Regresaron al hotel, empacaron sus cosas, Akane había escondido el baby doll abajo del colchón, trataba disimuladamente de sacarlo, no es que le gustara, pero ¿Qué dirían los del hotel ante tal cosa? Asi que como pudo lo saco rápidamente sin que Ranma se diera cuenta y lo empaco.

-Ya estoy lista.-

-Yo también.-

Ranma se ofreció a ayudarla como la maleta, salieron, prácticamente la misma rutina, tomar un taxi, llegar a la estación de tren, pero algo había cambiado, ellos ya no eran tan indiferentes ante la presencia del otro. Cuando abordaron el tren, había cierta ternura al verse, Akane estaba un poco más cariñosa, le abrazaba el brazo con un poco de rubor en sus mejillas, pero él no se quedaba atrás, el carmín gobernaba sus mejillas, como ya era de noche decidieron dormir, pero esta vez muy conscientes de la cercanía de sus cuerpos, aunque el oji azul no perdió la oportunidad para robarle un beso, aunque después de ese beso, lo que menos podían hacer era dormir, se besaban mutuamente con mucha ternura y timidez, no podrían hacerlo tan seguido en presencia de su familia, las horas se pasaron volando, habían llegado a Nerima. Tomaron un taxi que los llevo directamente al Dojo, ahora solo habría que esperar que los problemas de la cotidianidad llegaran...

Entraron a la casa un poco temerosos, pero se toparon con una noticia un poco sospechosa...

-Qué bueno que ya llegaron Akane.-

-hermanita, ¿Te gustó mi regalo?-

-Me alegra verlos de nuevo hijo, esta casa se sentía vacía sin ustedes.-

-Tía, ¿y mi papa? Se me hace muy raro que no esté aquí.-

-Es cierta mama, mi papa tampoco está aquí.-

-Bueno, como les explico, lo que pasa es que el maestro Happosai desapareció, ellos pensaron que el culpable es TARO, y fueron a buscarlo.

-¿Qué? Como que desapareció ese viejo libidinoso, ¿pantimedias-taro aquí?