One-shots Karmagisa (yaoi/shaoi/gay)

Cadenas

Basado en el one-shot anterior (aka Libertad)

One-shot dramático

Contenido Karmagisa y karusano

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Karma

Demasiado Tarde, la muerte de su amado llegó a sus oídos demasiado tarde. Y se preguntaba porqué, por que después de tanto tiempo engañándolo ahora se arrepentía.

Sí, dicen que valoras más algo cuando lo pierdes, pues ya no lo posees.

Y él lo estaba sufriendo, sufría en silencio, bajo las miradas de repulsión que la gente que conocía el engaño le dirigía, las miradas de pena que otros tantos le daban. La de Asano, que le miraba de forma culpable, como si le reprendiese de forma no verbal lo que hizo.

-menudo hijo de puta, engañó a su novio y al parecer se suicidó gracias a él.

-es deplorable

-la juventud de hoy en día... Que poco valora la vida

A su alrededor, la gente susurraba esas cosas, junto con sus miradas indiscretas, que le rompían poco a poco en mil pedazos.

Pero, sin duda la mirada que le rompió por completo fue la de la madre de Nagisa. La cual tenía unos ojos del mismo tono que su hijo pero más pequeños. Que le miraban de una manera indescriptible mente rompedora.

Con una mezcla entre tristeza, desolación, miseria y culpabilidad. Una mirada acompañada de unas palabras que acabaron por romperle. Unas palabras que, como si de fuego se tratase, se grabaron en su mente. «se podría decir que no te importa, pues tú fuiste su causa junto con su enfermedad... Pero en realidad te del más que a cualquiera. Aún así, siento la perdida» la mujer le dedico una última mirada con intensidad y se fue por su camino, recordando las palabras de la mujer y ese audio que le mando.

Su audio,su voz ahogada en alcohol y lágrimas, aun las recordaba, las recordaba demasiado bien. Las llevaba grabadas en su corazón, en su corazón y en su alma. Sus palabras eran unas cadenas.

Unas cadenas irrompibles, indestructibles, que aprisionaban su alma de una manera torturadora. Unas cadenas que le conectaban con el vacío, unas cadenas de las que no podía desprenderse. Unas cadenas asfixiantes que solo lo hundían en las más profunda de las miserias.... Era rompedor.

Eran sus cadenas. Unas cadenas que él mismo había creado y que lo aprisionarían de por vida.