Lealtad Silenciosa (2won HyungWonHo)

♥Parte 34

Hyungwon no podía razonar bien en ese momento, de lo único que era consciente era, la nariz sangrante de su padre, quien se tocaba la zona herida con una mano apretando fuertemente los ojos. El príncipe volteo a ver su mano, la cual estaba un poco roja de los nudillos. Desvió la vista a un punto fijo de la sala pensando en lo que acababa de hacer. Ni siquiera pensó antes de hacerlo, fue un impulso que no pudo controlar. Retrocedió unos pasos mientras volvía su vista al rey, quien no podía detener el sangrado en su nariz. La idea que habia cruzado por la mente de su padre era una total locura para el. Jamas podría separarse tanto de Wonho, ni mucho menos con una mujer. Que por su mala suerte, ahora era su esposa. En grandes zancadas se acerco al cuerpo tirado de su padre y lo miro a los ojos apretando los dientes. "No te obedeceré ahora padre... ya no. Tu lo que quieres es hacerme infeliz, no se que rayos te paso pero no impedirás que yo este con Hoseok..." Dicho estas palabras, se puso de pie y camino hacia la salida casi sin importarle que un guardia estuviera afuera de la sala vigilando cualquier cosa. Lo único que quería en ese momento era salir del palacio y encontrarse con Wonho.

El rey al verlo salir, sintió un coraje superior al anterior y con mucho esfuerzo se levanto del suelo dirigiéndose a la salida, vio como el guardia miraba hacia un lado y furioso, ya sin importarle el sangrado en su nariz, le grito: "¿¡Que rayos esperas para atrapar a ese malcriado!?" el guardia lo miro un poco sorprendido, ya que la herida en esa cara se veía muy mal. Pero como era su trabajo, asintió firmemente y camino por el mismo camino que Hyungwon hace unos momentos. Este por otro lado, apresuraba cada vez mas sus pasos, ya que sabia que alguno de los soldados lo iba a atrapar. Sintió como alguien tomo de sorpresa uno de sus brazos volteándolo frente a frente. Iba a forcejar, pero se sorprendió al ver a Minhyuk con una sonrisa que de inmediato se esfumo al ver lo preocupado que el príncipe se veía. "Hola Hyungwon... oye, ¿que te pasa?" pregunto con un tono suave y el contrario lamió sus labios antes de jalar al mensajero a un pasillo diferente.

"Minhyuk tienes que ayudarme! Wonho se fue y necesito alcanzarlo. Necesito que me ayudes a salir de aquí lo antes posible!" exclamo con obvia tristeza en su voz y Minhyuk solo frunció el ceño mirando hacia una de las ventanas. "Hyungwon... Hoseok se ah ido ya. El tenia que hacerlo y lo sabes, ¿Querías irte con el?" Pregunto el chico a su contrario pero sin embargo este no respondió. "Quieres.... quieres decir que Wonho se ah ido?" murmuro con voz decaída. En respuesta Minhyuk asintió levantando una de sus cejas y en ese momento Hyungwon recargo su espalda en una de las paredes resvalandose cada vez mas hasta estar completamente sentado en el piso. El mensajero observo preocupado al príncipe y antes de que pudiera agacharse para aclarar dudas, uno de los guardias apareció junto con otros tres siguiéndolo por detrás, Minhyuk tenia mil dudas en su cabeza ¿Que hacían esos oficiales allí? Estos se acercaron a Hyungwon, quien estaba ya decaído y con la cabeza inclinada hacia abajo. Se dejo tomar por ellos, en ese momento el rey apareció con un pequeño pañuelo colocado en su nariz. "Llevárselo rápido!" musitó con un poco de dificultad.

"¿A donde lo van a llevar su alteza?" pregunto Minhyuk un poco alarmado y el rey solo lo miro con un rostro serio, allí es donde el mensajero se dio cuenta de las diferentes facciones que a leguas se podían notar. El habia visto como el rey comía de la planta pero no supo después, ya que había estado recuperándose totalmente de su brazo, Kihyun le habia avisado que algo malo estaba pasando, por eso se había encontrado con Wonho horas antes. "Minhyuk no te había visto muchacho... me alegra verte, y por tu pregunta, Hyungwon va a estar bien."

"¿Que le paso a su nariz?" dijo ya un poco desconfiado, desvió su mirada al príncipe, quien solo miraba el suelo mientras sus brazos eran sujetados por los guardias. Aquello le daba muy mala espina. "Debo hablar con mi hijo... necesito que te retires ahora mismo. Es una orden..."

Minhyuk asintió muy levemente y se dio media vuelta empezando a caminar por el pasillo, sin embargo, doblo en una esquina y se oculto para poder escuchar de lo que hablarían a continuación. En ese momento unos tacones se hicieron escuchar, y en seguida la dulce voz de la reina. "Oh santo cielo! Que te ah pasado en la nariz?! ¿Porque Hyungwon esta siendo tomado de esa forma por esos gigantescos monos guardianes!?" Minhyuk quiso soltar una carcajada pero obviamente no era el momento adecuado. Se inclino un poco para así asomar la cabeza y poder ver. "No es nada mujer... ahora, no te metas en esto y llamale a la esposa de Hyungwon. Tengo algo que decirle." hablo el rey empezando a caminar pero sin embargo la reina lo detuvo. "Quiero que suelten a mi hijo primero! Y tu... que es lo que quieres decirle a esa muchacha? Soy la reina, tengo derecho a saber de esto como tu!" El rey gruño en son de molestia y les ordeno a los guardias que se retiraran por un momento, estos en seguida soltaron al príncipe, quien cayo de rodillas al suelo, la reina lo iba a ayudar para poder levantarlo pero su esposo no se lo permitió. "Quiero hacerles una luna de miel... necesito la aprobación de la muchacha y la tuya obviamente." hablaba el rey mirando de reojo a Hyungwon, quien lo miraba con mucho enojo, sin embargo el rey seguía amenazándole con la mirada para que este no dijera la verdad.

La reina al escuchar eso, empezó a emocionarse ya que ella amaba esa clase de cosas. No hubo que explicarle nada mas. "Le llamare a Michelle para que venga, no maltrates a tu hijo, vuelvo en unos minutos."El rey solto un bufido de molestia cuando su esposa desapareció de la sala. Solo habia que idear algo para poder engañar a la reina, y el era experto en eso. Volteo su mirada a Hyungwon y se posiciono a la misma altura que el, retiro el pañuelo de su nariz y sonrió victorioso. "¿Donde esta tu Hoseok ahora?... si tan solo tu madre supiera a donde los mandare... me mataría. Así que no hagas ninguna estupidez. Partirás mañana... no se bien la hora, pero es seguro que sera el día siguiente."explico el rey dando unas palmaditas en el hombro de su hijo, quien aun miraba el suelo, pero apretaba fuertemente sus dientes. El rey se alejo poco a poco y antes de desaparecer de la sala, se voltio hacia Hyungwon. "No podrás escapar, así que ni siquiera lo intentes. Ahhh y otra cosa." El príncipe volteo a mirar a los ojos de su padre. "Quiero un nieto varón..."

Minhyuk habia escuchado todo y en esos momentos se encontraba caminando rápido hacia su habitación. Necesitaba avisarle a Wonho que Hyungwon se iría a un lugar lejos a crear su propia familia, la peor parte era que todo estaba siendo forzado. Pudo ver la cara de dolor en el príncipe, obviamente entendía que para el, aquello era muy difícil y mas cuando alguien mas ya tiene su corazón. Mientras alistaba sus cosas, Minhyuk pensaba en lo diferente que lucia el rey, podía reconocer que ese ya no era el mismo de antes. Empezaba a sospechar de aquella planta. ¿Y si tenia reacciones agresivas en las personas? Penso en aquello, pero descarto la idea al recordar que Wonho habia tomado también de aquella flor y no habia tenido ningún signo de agresividad, en vez de eso solo se hizo mas guapo.

Salio de su habitación, y se dirigió a la entrada principal, por su parte, el trabajaba mejor solo, ya que hubiera pedido la ayuda de alguien mas como Shownu o Jooheon, pero solo podrían retrasarlo, y esa pequeña misión tenia que hacerse rápido. De todas maneras, su trabajo era informar a las personas de lo acontecido, y era justo lo que iba a hacer. El problema, era por donde tenia que buscar. Salio del palacio sin ningún obstáculo y miro a las estrellas por unos segundos. Debía encontrar a Wonho rápido. Tenia que llegar antes del medio día del día siguiente, y si no...

Hyungwon se iría lejos, a un lugar desconocido.

Con su esposa.

Con una orden directa del rey, para darle nietos.

Hasta el mismo Minhyuk se enfureció de tan solo pensar en algo tan vil como ese plan, ahora conocía a ese rey. Y lo empezaba a odiar.

No quería ni imaginar como estaría Wonho.