Confrontación

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Un nuevo día escolar, en realidad, uno de los últimos días del semestre. Habían pasado muchas cosas a lo largo de este mismo. Cada alumno con sus diferentes vivencias. Peridot por su parte aprendió cosas fuera de lo académico, si no también de lo personal, gracias a ella pudo experimentar muchas cosas y volver a sonreír.
Justamente hoy iba a hablar con esa persona. Quizá todo el día ha estado buscando las palabras indicadas para decirle aquella dichosa noticia que si bien la hizo feliz en su momento ahora mismo la torturaba pensando una y otra vez si era lo correcto o no.
Por otra parte Lapis quien hoy se encontraba más distraída que nunca, no dejaba de pensar en los dulces labios que ayer había tenido el gusto de besar. Estaba ansiosa de verla, de decirle cuanto la amaba. Aún que en el receso se podían ver Lapis prefería hacerlo en la hora de su asesoría pues tendría más tiempo y aunque esta ya no era necesaria puesto que las clases ya se iban a acabar le gustaba pasar tiempo con ella, en realidad, cualquier segundo que pasaba a lado de Peridot era precioso.

Después de lo ocurrido ayer se la paso hablando con Steven quien era de mucha ayuda para ella en ese momento, también al parecer esa tal Garnet sabía mucho sobre los temas amorosos y le aconsejo varías cosas por medio del teléfono. Verdaderamente estaba emocionada.

El transcurso del día escolar resulto ser tranquilo, era la última hora y miraba el reloj cada cinco segundos. El tiembre de salida sonó a la hora que le correspondía y una Lapis feliz salio de su salón. Llego en donde al salón 4-B que como siempre estaba vacío.
Y como era de esperarse Peridot llego solo unos cuantos minutos después de ella ambas nerviosas por razones tan contradictorias.

-Hola Lapis.- Peridot saludo tratando de verse lo mas natural posible.

-¡Peri!- Lapis fue directo a abrazarla al cual la rubia solo se limito a corresponder.

-Yo em, he estado muy ansiosa por verte-. Confeso la peli-azul.

-Yo también...

Hubo silencio.

-Tengo algo que decirte-. Dijeron las dos al unísono.

-Tu primero-. Dijo Lapis tratando de ser caballerosa.

-¿Yo? P-pues veras-. Trataba de encontrar las palabras apropiadas. - Ayer me llego una noticia realmente...genial-. Quiso ser directa.

-Oh y eso es...?

-Pues resulta que ahora estoy inscrita a una de las mejores instituciones del país gracias a YD.

-Yo, me alegro mucho por ti-. Sonrió

-Y eso implica irme de aquí...

Y esa sonrisa desapareció cambiandola por confusión.

-Oh... No hay problema yo...aún seguiríamos viéndonos ¿No? Digo esta ciudad es pequeña y se donde vives así podría ir a visitarte ¿No es asi?-. Tatro de ser optimista.

Peridot calló por un segundo.

-No Lapis, cuando digo irme es...irme a otra ciudad.

-Estas bromeando ¿Verdad?...

Peridot solo negó con la cabeza.

-... Wow, no de que decir.-

-Lapis yo...

-No esta bien. Es mi culpa por... ilusionarme con alguien como tú.

-¿Disculpa? ¿A que te refieres?

- Alguien que solo se preocupa por si misma. Por alguien que no le importa los sentimientos de los demas-. Dijo con enojo y exalto. Por primera vez Lapis había llegado a un puto de quiebre.

-Eso no es verdad-. Le contesto. Nunca la había visto de esta manera.

-¡Claro que si! Todo el tiempo siempre eres tú ¡Cuando por fin pense tener avances contigo me sales con esto! ¿Es enserio?.

-Esto ni siquiera lo tenía planeado. Fue algo que me ofrecieron espontáneamente-. Trato de excusarse

- ¡¿Y porque simplemente no lo rechazaste!? ¿Es que caso te importo un carajo?

-Porque esto es importante para mi. Es una oportunidad que marcara mi futuro ¿Que querías que hiciera? ¡¿Que la rechazara solo por una estupida chica?! -. Peridot se había cansado¿Quien se creía ella para reclamarle de esa manera? - ¿Sabes que tampoco estaba planeado? ¡Tú! Llegaste a mi vida de la nada. Yo estaba tan feliz como estaba. ¡Todo este tiempo solo has sido una piedra en mi zapa...!

No logro terminar. No sin antes recibir una bofetada en la cara de parte de Lapis, la cual casi la hace caer al suelo.

- Y si tanto era una molestia ¿Porque me besaste?-. Pregunto ya al borde del llanto.

La rubia se reincorporó y con un dolor horrible en su mejilla solo respondió.

-Me diste lástima cuando te confesabas. Solo eso...-. Y sin mirarla al rostro le mintió de la manera más descarada posible.-

-Esta bien...-. Se dirigió a sus cosas y comenzo a guardarlas.

-¿Que haces?..

-No quiero seguir aquí dandote lastima.- Tomo su mochila y se dirigió a la salida. Al llegar a la puerta paro en seco y solo volteo a verla un par de segundos ya con lágrimas es los ojos prosiguiendo a irse con pasos firmes de ese lugar.

Peridot quedo con completo silencio. Se sentia mal por dos razones.
La primera: el golpe que Lapis le dio dolía como los mil demonios y la segunda: se sobrepasó con todo lo que le dijo a Lazuli.
Tal vez fue demasiado lejos. Pero ya ni ir a buscarla serviría. Lo había arruinado por completo. Así que sólo recogió sus cosas y se fue a casa a pensar en todo lo que había pasado esa tarde.

Toc toc

Se escuchaba que llamaban a la puerta de Peridot.

-Pase-. Hablo desde su cama.

-Cariño te traje pizza-. Era su madre con un plato con un par de rebanadas de pizza.- Te vi muy triste hoy y esto siempre te ánima-. Sonrió.- ¿Te sucede algo?-. Se sentó al borde de la cama.

-Solo tuve un inconveniente eso es todo.

-¿Tiene algo que ver con tu amiga de pelo azul?

-¿Cómo lo sabes?

- Bueno eres mi hija, te conozco lo suficiente, además desde que estas con ella te has estado comportando un tanto diferente ¿Paso algo malo entre ustedes?

-¡No!..bueno ¡Si! Le conte sobre la beca y se puso como loca y después de reclamarme yo le dije cosas horribles y, se fue llorando de ahí. Y agh, no se que pensar ahora. Pense que lo tomaría bien...que se alegraría por mi, por mi logro.

-Bueno, se ve que ella te aprecia mucho. Y esa notícia fue devastadora para ella. A veces cuando quieres a alguien no puedes asimilar el echo que ya no estara contigo ¿Sabes?

Peridot quedo en silencio.

-Ah y una cosa más-. Le entrego un folder.- Aquí está lo que me pediste que firmara. Se que tienes mucho en que pensar -. Se paro dejo el plato en la cama.- Háblame si necesitas algo más-. Sonrió, le dio un beso en la frente y se fue.

-Gracias...-. Tomo el folder y lo puso en su repisa. Tenía mucho en que pensar esa tarde, pero no con un estomago vacío.













Regalo de fin de año. Gracias y disfruten :^)

Déjame entrar en tu corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora