Playa Sayu.

Día 8 - Día 9.

Capítulo 6. Día 8 – Día 9.

Continuación día 8.

Esa noche aprendí mucho, aprendí el sentir placer sin necesidad de tanto esfuerzo, aprendí cómo tocar a una mujer pero sobretodo aprendí a disfrutar por completo de la persona que yacía a mi lado.

Estar con Santana fue increíble, ella me dio tanto placer sin siquiera esforzarse demasiado, por primera vez sentí una vagina sobre la mía y el roce era tan placentero como el sexo oral que me practicó en varias ocasiones durante el transcurso de la noche, todo mi cuerpo estaba adolorido, pero no me importaba yo quería más de ella, me dio una infinidad de orgasmos, la chica de piel canela era toda una diosa en la cama y yo había caído rendida a sus pies.

Luego de varias rondas nos acurrucamos para dormir un poco, no sé qué hora era pero estaba segura que no tardaba mucho en amanecer, aun así no pude conciliar el sueño, no es que no estuviera cansada lo que pasaba es que descubrí que me encantaba verla tendida junto a mí completamente desnuda, su cuerpo estaba siendo iluminado gracias a la luz de la luna y ella se veía extremadamente sensual.

Su cuerpo era tan perfecto, su cara era delicada, esos labios carnosos estaban muy hinchados de tantos besos que compartimos, me encantaba verlos, así como su cuello que estaba lleno de marcas gracias a mis besos húmedos, luego estaban sus hombros delgados, sus perfectos y hermosos senos con esos pezones algo oscuros que estaban erectos tal vez por la brisa que entraba por la ventana, ese abdomen que se marcaba cada que respiraba, sí que era una chica atlética no tenía ni un gramo de grasa, sus piernas a pesar de que eran delgadas también estaban marcadas, estaba como idiotizada por ella, Santana López me había flechado por completo.

No pude evitar fijar mi mirada específicamente en un lugar, su vagina... Su hermoso monte de venus depilado era precioso, no pude evitar la tentación de acariciarlo con mi dedo índice, así que lo pasé una y otra vez sobre él, ella no tardó mucho en sentir mis caricias, sin abrir los ojos pude ver que una enorme sonrisa se plantaba en su rostro así que llevé mis labios a los suyos y le di un delicioso beso.

S. No has dormido nada?
Q. No puedo.
S. Pero por qué? Acaso no estás agotada como yo?
Q. Te aseguro que mucho más, pero mis pensamientos acerca de todo lo que ha ocurrido esta noche no me dejan hacerlo.
S. Te arrepientes?
Q. Qué? Por supuesto que no, esta noche ha sido una de las más especiales en mi existencia, te lo aseguro.
S. Para mí también significa lo mismo, eres la chica más hermosa que he visto en mi vida, te lo juro.
Q. Tú también eres la chica más hermosa que he visto en mi vida, no creo que ninguna otra me pueda llegar a gustar.
S. Quinn... (soltando el aire) Quinn...
Q. Solo bésame.
S. Solo eso?
Q. Jajaja sí solo eso, ya habrá tiempo para más, por lo pronto tenemos que descansar y lo sabes.
S. Jejejeje ok.

Luego de que me diera un beso tierno me acurruqué una vez más con ella para colocar mi cabeza sobre su pecho...

Q. Los latidos de tu corazón son bastante relajantes, me gusta su sonido.
S. Jejeje solo está feliz por tenerte a mi lado.
Q. Es bueno saberlo, me hace sentir especial.
S. Eres especial Quinn... Demasiado.

Nos estuvimos besando por un buen rato hasta que finalmente pudimos dormir.

Día 9.

Fue casi al mediodía cuando despertamos, nos duchamos en su pequeño baño y ahí tuvimos una sesión de caricias y besos muy calientes, estuvimos a punto de hacerlo también ahí pero el lugar era tan pequeño que nos lo impidió.