una chica, un balon, un campo y una ilusion, es todo lo que le importa a sofia, una chica ruda y sin sentimiento alguno por el sexo opuesto... o eso creia ella
A las siete y cincuenta y cinco, mi mamá había acabado con mi maquillaje. Nos paramos una junto a la otra y estudiamos mi vestimenta en el espejo de mi cuarto.
Pantalones negros rasgados y ajustados.
Botas.
un top negro de tiras ajustado y un sueter de flamencos rosas holgado encima . Compré la camiseta hace un año cuando salí con Sara y Beth, y nunca la use. Era simplemente muy femenina al igual que el sueter. Los compré sólo porque ellas me obligaron. (OUFIT DE SOFI EN MULTIMEDIA)
Pero mi mamá insistió, y había hecho mi cabello y mi maquillaje, e incluso me había prestado sus pendientes favoritos .
Ella sonrió mientras colocaba estratégicamente un mechón de cabello que colgaba detrás de mi oreja. —Debo decir, que estoy muy impresionada conmigo misma.
—Voy a ir a rodar en la tierra tan pronto como este fuera —mi corazón dio un vuelco mientras me inspeccionaba a mí misma. Por primera vez en mi vida, luzco como una chica.
¿Y saben qué? Me encanta. Yo absolutamente adoraba como me veía.
La sonrisa de mi mamá se ensanchó. —¿Por qué no te creo?
—No puedo ir a Pop's así. —Tomé un profundo respiro y trate de disminuir mi acelerado corazón. Dios, ¿de verdad podría hacer esto? Entrar ahí y lucir tan... ¿femenina?
—Claro que puedes. Tú tendrás una fiesta —ella me tendió una pequeña bolsa azul marino con bordados—. Acabo de comprar esto. Puedes usarlo.
Lucia justo como un lindo bolso MK De color negro, era como una mochila pero tambien bolso de mano, Lo agarro de mi mamá. —¡Eres la mejor!
—Lo sé —ella me abrazó, y las dos fuimos cuidadosas de no arruinar mi vestimenta—. Ve, diviértete ¿de acuerdo? Solo asegúrate de ayudar a Sara también.
Asiento, todavía mirándome en el espejo. Mi nuevo cabello luce genial, con capas cayendo sobre mi rostro y reflejos brillando en la luz.
—Ah, mi niña pequeña —mi mamá me rozó la mejilla con el dorso de la mano—. ¿Cómo te volviste tan inteligente?
—No soy tú niña pequeña.
Ella ladeó su cabeza. —No, supongo que no lo eres. —Por un momento, ella casi lució triste, luego aclaró su garganta—. ¿Quieres que te lleve?
—¿Y tener a mi mamá dejándome? —Bromeé—. De ninguna manera. Voy a caminar.
Ella asintió con la cabeza, con sus ojos brillantes. —Me imaginé que lo harías. Mantén tu teléfono encendido, en caso que necesite comunicarme contigo.
—Siempre. —Esa era la condición del teléfono, y yo no iba a echarlo a perder—. Me voy de aquí. —Dudé, luego arroje mis brazos alrededor de ella—. ¡Gracias Mamá!
—Cuando quieras, cariño.
Luego me solté y bajé corriendo por las escaleras. Para ir a Pop's. Luciendo como una chica por primera vez en mi vida.
Estaba totalmente avergonzada, y no podía esperar.
* * *
Entré a Pop's a las ocho y diez y casi me doy la vuelta y camino hacia fuera cuando vi cuantos chicos estaban allí.
El lugar estaba lleno, la música estaba rugiendo, y no parecía haber un asiento vacío. Tantos chicos que conocía, tantos que no. Había mesas de chicas riendo, mesas de chicos siendo ruidosos, y mesas de chicas y chicos pasando el rato. De repente me sentí completamente fuera de mi zona de comodidad.
No he estado en Pop's una noche de viernes en años, y ahora recordé porqué.
Esta no era mi escena.
Para nada.
Especialmente sin Sara y Beth para respaldarme. ¿Dónde estaban ellas? Miré alrededor pero no las vi. Si ellas no estaban aquí, me iba a ir...
—sofia!
Lanzo mi mirada hacia la derecha, y veo a aron saludándome. Tenía una de las cabinas al costado de la ventana, para sí mismo. El alivio se apodero de mí a la vista de alguien que conocía, aunque fuera aron.
Agarrando mi lindo bolso pequeño contra mi pecho, me abro paso entre la multitud de chicos.
—¡Hola! —él sonrió mientras me deslicé en frente de él—. Llegue aquí temprano para coger una mesa. —Su mirada fue a mi cabello y de repente me sentí nerviosa.
—Hola. —Jugueteé con algunos mechones de cabello, deseando haberlos puesto en una cola de caballo. ¿Qué había estado pensando, dejando a mi mamá que le haga ondas?
—Te ves linda. —Sonaba sorprendido.
Fruncí el ceño. —¿Qué se supone que eso signifique? ¿Te estás burlando de mi?
Él negó con la cabeza una vez, su mirada viajando por mi cara, mi ropa, e incluso mi bolso. —Yo sólo... me refiero... no te ves como normalmente lo haces.
Cruce mis brazos sobre mi pecho. —¿Y?
—Y, me gusta.
Estudié su rostro por un largo rato, pero su mirada se mantenía firme. Me di cuenta de que hablaba en serio. Realmente lucía bien. Mi cuerpo se relajó y me eché hacia atrás. —Bueno, entonces, supongo, gracias.
Él asintió. —Voy a conseguir una bebida. ¿Cuidas la mesa?
—Claro. —Aclaro mi garganta—. Así que, um, ¿Sara y Beth vienen, o qué?
—Sí —se deslizó fuera de la cabina, con su mirada parpadeando hacia mi cabello. Él negó con la cabeza ligeramente, como si no pudiera creer lo que estaba viendo—. Entonces, ¿quieres algo de tomar?
Sonrío a su reacción. —Coca diet. Consigue una jarra. Eso es lo que Sara y Beth toman también. —Sara... necesito lidiar con eso. Me refiero, debería decirle, ahora, que a Sara le gusta—. Um, aron, sobre Sara...
De repente perdí la línea de mis pensamientos cuando noté a Jax caminando hacia nosotros, cargando un par de bebidas. Él me miró, y sus ojos pasaron sobre mí, luego su mirada regreso a mi cara, con sus cejas casi saliendo disparadas de su frente.
—¿Qué pasa con Sara? —aron preguntó.
Lo despido con la mano. —Te lo diré luego. Estoy realmente se dienta. Consígueme algo de tomar, por favor. —Agregué.
Se encogió de hombros, y se dirigió al mostrador, dándole a Jax una segunda mirada mientras caminaba al lado de él, como si estuviera tratando de ubicarlo.
Estate tranquila, sofia. Todo es sobre los deportes.
Jax se dirigió directamente hacia mi mesa, con la mirada clavada en mi cara.
Contuve la respiración y me senté recta mientras se acercaba. Podía manejar esto totalmente. En serio.
OUTFIT DE JAX
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