Capitulo 10

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Despues del tratamiento... ¿Como puedo describir lo que sentia?, en ese momento lo decribia "como si una manada de elefantes hubiera pasado sobre mi", recuerdo solo estar acostada en la camilla viendo hacia la ventana, sollozando porque de verdad me sentia horrible, me dolia todo, habia quedado tan debilitada que no podia caminar, de verdad no podia.

El doctor me dijo que era normal, pues para mi edad no era extraño que el cuerpo reaccionara asi asi que como no podia estar todo el dia en la habitacion el doctor le dijo a una enfermera que me llevara a un paseo matutino y como no podia caminar tenian que llevarme en silla de ruedas, la verdad donde mas me gustaba estar era en el jardin porque aveces estaba el jardinero y me ponia a platicar con el, el me contaba que se habia divorciado de su esposa y que sus hijos lloraban mucho por ello me decia que sus niños tenian casi mi edad, entonces le comente un dia que deberia traerlos para poder conocerlos hasta que se llego ese dia y tuvo que ser precisamente el dia despues de mi tratamiento. Me veia como un espectro en pocas palabras.

Llegamos al jardin y le pedi a la enfermera que me dejara ahi, se marcho y me quede sola viendo el cielo, me puse a ver las nubes y les empeze a tomar forma, de pronto una era un pato, otra un barco y la ultima era una ballena, eso hacia que ya no me sintiera sola, aunque no habia nadie conmigo al voltear a ver el cielo ya no me sentia sola.

De pronto escuche una voz

- ¡Señorita! ¡Como esta!

Voltee a ver y era el jardinero, detras de el venian dos niños de cabello rizado y piel blanca. Me sentia tan mal que sentia que si hablaba iba a vomitar pero el se veia tan feliz asi que yo no seria nadie para quitarle esa bonita sonrisa.

-¡Hola! ¡Como esta señor jardinero! - dije con una gran sonrisa

-Mira te presento a mis dos niños, el se llama Jon y el Daniel

Los dos niños solo me veian con mucho asombro y despues me saludaron al mismo tiempo.

-Hola.

-¡Hola como estan! Me llamo Coraline, haha no se espanten, no soy un espectro solo estoy algo enferma

-¿Que te paso?  -me pregunto Daniel

-Algo que pronto acabara  -respondi

-Eres bonita aun asi  -dijo Jon

-Gracias  -me sonroje

-¿Porque querias conocernos?  -pregunto Jon

-Les hare una pregunta, ¿Les gustan los gatos?

-Si nos encantan  -dijo Daniel

-Ummm, vamos a suponer que ya son adultos y tienen su propia casa y a Jon yo le regalo 2 gatos. Entonces esos gatos no se llevan bien pero a Jon le gusta que los dos esten juntos y cada vez que se ven los gatos se ven con enojo y siempre estan tristes, no son felices. ¿Jon esta haciendo lo correcto?

- ¡¡No!!  -dijeron los dos

- Jon ¿Tu quieres a los gatos no?

- Porsupuesto

- ¿Cuando se quiere a una persona les gusta que este triste siempre y viva con enojo y no sea feliz?

-No...  -Dijeron los dos

- Entonces ¿Que sera mejor?

- ¡Que se vaya uno conmigo!  -dijo Daniel

-Entonces para que los gatos sean felices ¿Que sera lo mejor?

- Que... se separen  -dijeron los dos

-¿Ustedes quieren a sus gatos no?

-Si  -respondieron

- ¿Asi seran felices no?

-Si tienes razon  -me dijeron

Nos despedimos, el jardinero termino su trabajo y se fueron...


A los 3 dias el jardinero me dio la noticia que sus niños estaban completamemte de acuerdo con el divorcio de ellos.


Yo solo le dije con una sonrisa enorme:

                                                                              Compreles un gato.


            

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