Viviendo Con Los Tuan (Mark Tuan Y Tu) [EDITANDO]

Capítulo 3

—¿Tienes hambre?—le pregunté.

—No.—respondió sin dejar de mirar a Yugyeom.

—Bien, entonces ve a tomar una ducha o te resfriaras.—lo empujé como pude hacia el baño.

—No tardaré.—cerró la puerta.

—¿Siempre es asi?—Yugyeom se sentó en el sofa.

—Aveces, solo necesita tiempo.—me senté a un lado suyo, encendió el televisor y sonó el teléfono.

—Oh, tía, ¿Que pasa?

—Mañana llegaré un poco tarde, así que te recomiendo que llegues al lugar que te dije, porfavor.

—Oh, esta bien

—Bueno hermosa, nos vemos mañana.

—Si tía.

—Tn, ve a dormir.—dijo Jin Young.

—Ya no soy una niña para que me mandes a dormir.

—Mañana te llevaré con nuestra tía y después iremos de compras.

—¿Tu llevarme a mi de compras?

—Si, así que ve y duerme.

—Me voy Tn.—dijo Yugyeom dándome un tierno beso en los labios.

—Te veo luego amor, después terminamos eso.—le dije en voz baja.

—Claro.—contesto él.—Hasta luego Jin Young.

—Adiós Yugyeom.—rodó los ojos.—¿Terminar con eso?—arqueó una ceja.

A la mañana siguiente me dí  una ducha rápida y me puse un vestido azúl pastel que llegaba arriba de mis rodillas, me puse un poco de maquillaje y bajé a la cocina en donde se encontraba Jin Young haciendo de comer.

—Buenos días enana.

—Buenos días bobo.

—Siéntate y come.

—¿Mi padre está en su habitación?

—Sí, tiene unas cuantas horas que llego, esta muy cansado.

—Vaya.—tomé un poco de agua.—¿Como sabias que iría con la hermana de mamá?

—Ayer te escuche hablando con ella.

—Si, claro.—termine de comer y nos fuimos en uno de los autos de mi padre.

Llegamos a un restaurante familiar y ahí esperamos a nuestra tía, por un momento Jin Young se levantó de la mesa y mientras esperaba tomé mi teléfono.

—¿Tn?

—En donde estabas Jin Young.-dije sin mirar al frente, con la vista a mi teléfono.

—Como has crecido mi hermosa Tn.

—¿Eh?—dejé mi teléfono a un lado y miré a la persona que estaba sentada frente a mi.—¿Quién es usted?

—Soy tu madre.

—¿Mi madre?

—Sí.-—sonrió con lágrimas en los ojos.—Me alegra mucho verte.

—Lamento llegar tarde.—dijo mi tía.—Veo que ya se conocen.