Kyungsoo,Baekhyun,Luhan y Xiumin son hijos del famoso empresario Do Jaejoong, un día se enteran que su padre va a contraer matrimonio con Jessica Kim una famosa diseñadora de modas que tiene los hijos más soberbios del mundo. Jongin,Chanyeol,Sehun y...
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Pov Kyungsoo
No podía controlar cada lágrima que salía de mis ojos pero lo que me sorprendió más fue ver que Kris me abrazara como si no hubiese un fin. Eso era extraño ya que él nunca se comporta así.
Fui soltándome de su agarre para poder verlo a la cara –Kris, yo lo siento no debí chocar contigo – separándome de él pude ver que su mirada me transmitía ¿cariño?
-Tranquilo Kyungsoo. Pero dime ¿porque estas llorando?
-Yo solo, tuve problemas con...un compañero... choque con él y me golpee soy muy sensible a veces. Pero me voy...
-¿Porque siento que me mientes? – no supe que responderle miré a cualquier lado para evadir su mirada de interrogatorio – Kyungsoo, no tienes que decir nada mejor acompáñame a un lugar -puso su mano alrededor de la mía y me dirigió por el pasillo
-¿A dónde vamos? –pregunté más que ansioso. Tanto misterio me intrigaba.
-Shu. Silencio, ya veras
Pov Kris
Yo no soy así, no entiendo porque me comporto de esta manera, solo no quería verlo llorar. Así que sería mejor que se distraiga ahora, después ya sabría porque estaba llorando, aunque yo ya lo sabía, el problema tenia nombre y apellido; Kim Jongin.
Lo jalé de la mano por todo el pasillo. La gente que se encontraba ahí nos miraba con curiosidad, pero a mí no me interesaba, solo quería sacarlo de este lugar. Salimos de las instalaciones para llegar a donde yo quería.
-Muy bien, llegamos Kyungsoo –dije abriendo la puerta de la huerta del colegio
Empezamos a introducirnos en el lugar y Kyungsoo solo miraba sorprendido a todos lados, y lo más agradable era que aún lo tenía agarrado de la mano – ¿Nunca has entrado a una huerta, enano?
-Pues yo... sí. En mi casa tenía una, era de mi madre, pero... ya no importa.
Se puso de cuclillas para poder oler las rosas que había allí, parecía tranquilo, como yo quería que estuviera. Me acerqué a él y opte por ponerme en la misma posición
-No entiendo porque hablas de tu mama como si no viviera contigo, ¿acaso está de viaje? O ¿qué?—pregunté con duda y el mantenía la cabeza gacha.
-Porque, ella no está conmigo, ella murió.
No supe qué decir, al parecer había metido la pata en grande. Joder, tengo que decir algo, pero él se me adelantó.
–No digas nada. Y bueno ¿cómo conoces este lugar?—pregunto parándose y dirigiéndome una cálida sonrisa, al parecer no quería hablar del tema así que sería mejor que le siguiera la corriente.
