El secuetro.

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[Peter en multimedia ;)]

-Buenos días Mel.- Me saludó Peter dándome un gran abrazo.

Peter y yo nos conocíamos desde primaria, siempre fue un amigo ejemplar y siempre estuvo ahí para apoyarme.

Era y es un chico encantador y muy inteligente.
El único defecto que tiene es que es muy ingenuo.

Todas las chicas con las que ha estado, eran unas zorras convenidas. Por lo cual él siempre ha salido escaldado de todas sus relaciones.

-¿Que tienes pensado hacer en este precioso día nublado?-Continuó-¿Estudiar?¿Hacer los deberes?¿Romperle el tabique a alguien?-Dijo con sarcasmo.

-¡Ja! ¡Ja!, muy gracioso McRivers.- Le dije adentrándome en el instituto.

Carla y yo le decíamos McRivers en situaciones serias o en las que queríamos que sonasen serias.

Bueno Carla siempre le decía así, ya que ellos no se llevan muy bien, siempre han tenido una gran competencia y más a la hora de ser mis dos mejores amigos.

-Venga Mel, sabes que era una broma.- Me hizo un puchero cuando estábamos llegando a mi taquilla.

El pasillo lucía lleno, ya que era casi la hora de entrar en clase.

Unos chicos nos miraban a lo lejos, uno de ellos me sonrió, a lo que yo respondí con un guiño.
Me gustaba provocar al personal.

-Pues no tiene gracia,- proseguí mi conversación con Peter.- sabes que ahora estoy castigada en la biblioteca y que encima tengo que aguantar a mucha gente molestándome.- solté un suspiro al cerrar mi taquilla.- No puedo más, y hoy es mi tercer día. No hago mas que aguantar adolescentes, ordenar libros y aburrirme en el mostrador.-

-Y no te olvides del novato.- Puntualizó de camino a clase

-¿Sabes qué McRivers?- Él me miro atento a lo que iba a decir, como esperando algo. Yo hice una pausa dramática.- TE ODIO.- Dije con una falsa sonrisa en mi rostro mientras entrábamos en clase.

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-Entonces Jake señaló al perro, indicando el lugar donde estaba la cabeza de la muñeca favorita de mi hermana.- Elias río fuertemente.

-¡Shhhh!- le tape la boca.- Que estás en una biblioteca.-

Elias me había estado contando de que conocía a Jake y ciertas anécdotas de cuando eran pequeños.
Resulta que Jake de pequeño vivía en nuestra ciudad, pero por el trabajo de su madre se tuvieron que marchar y al acabarlo decidieron volver.
Ya me extrañaba a mi que el estúpido se hubiese hecho amigo de un chico tan simpático como Elias en tan poco tiempo.

-Perdón. Es que cada vez que recuerdo la cara de mi hermana...- Comenzó a convulsionarse de nuevo por la risa.- No puedo evitarlo.- Intentó ponerse serio.

Elias me había caído muy bien y me reía mucho con él.
Y tenía la ventaja de que él me podía contar cosas de Jake, con el fin de yo poder recopilar mas datos y buscar un punto débil por si acaso.

A veces eres perversa Mel.

-Y...- continué.- ¿No sabrás algún secreto sobre Jake que me pueda interesar no?-

-Pues...- Dijo mirando hacia arriba buscando una fuente de inspiración.- Si, hay uno, pero desde pequeño prometí no contarlo. Y lo que prometo. Lo cumplo.- Marcó el final seriamente.- Pero si se lo preguntas a él puede que te lo cuente.- Me sonrió.

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⏰ Última actualización: Apr 09, 2019 ⏰

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