Si el destino nos quiere juntos, lo estaremos.

4. Amistad

#Ash

Bueno, hasta ahora todo ha sido increíble, me llevo más con los de mi salón y sobre todo con Jaqueline, ella es genial a pesar de que somos dos cositas tan distintas, pero al parecer ella me quiere y eso es demasiado lindo.

Pasabamos tiempo juntos mi encanto, Jaque y yo, era lo mejor y a pesar de ser tres, seguía teniendo la atención de mi encanto.

Ha ser realistas, mi encanto y yo nos llevabamos mejor como amigos y no pensaba en él como en otra cosa, se había convertido en mi confidente, lo trataba como a un hijo, aunque no puedo negar que fantaseaba con él cada vez que lo veía directo a sus ojitos universales.

¡¿Pueden creer que tengo casi 18 años y sigo siendo virgen?! Eso es tremendamente horrible, mi encanto ya no lo era, por supuesto que lo regañe por ello a pesar de que me gustó oír el cómo dejo de serlo, ¡JA!.

Jaque y yo saliamos de vez en cuando a pasarla bien, adivinen qué...está enamorada de mi encanto...
Al saber tal confesión sentí un vacío dentro de mi, ignoré tal sentimiento, sabía que tarde o temprano pasaría algo similar a ello. Me prometí que desde ese momento la ayudaría a andar con él a pesar de lo mucho que me doliera a mí en un futuro; lo voy a hacer porque me he dado cuenta que ellos son tan idénticos y comparten casi las mismas cosas, me gustaría verlos juntos y felices.

¡JA! Qué estúpida soy al poner la felicidad de los demás antes que la mía.

Qué imbécil.

Llegué a mi casa, lista para decirle a mi encanto la confesión de Jaqueline.

-Hey niña, ¿por qué llegas con esa carita de perro con rabia?-. Mi madre no guardaba sus comentarios al notar algo extraño en mí, joder.

-Nada madre, estoy bien, feliz, ¿sí?-. Azoté la puerta de la entrada.

-Ajá, si claro-. Ya no le contesté y me fuí directo a mi cuarto a escribirle a mi encanto, el pensar en cómo le iba a decir eso me mataba, no quería, pero tenía que hacerlo, quería verlo feliz.

Su felicidad siempre será mi prioridad.

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#Alex

Recibí un mensaje de mi Ash, digo mamá, jajaja, esta chica me trae muy idiota, es muy infantil, la mejor infantil.

Su mensaje parecía importante y me emocioné al ver muchos corazoncitos en el, ¿qué rayos le pasa a esta hermosa chica?
Toda la plática me la hizo de emoción, mientras recibía los mensajes de Ash también me llegaban mensajes de Jaqueline, oh wow, qué emoción...por cierto, les mencionaré que he estado jugando con ella con palabritas lindas, no se molesten...

Al convencer a Ash en decirme lo que quería decirme me congele...

[¡Le gustas a Jaqueline! *-*]

No podía creer lo que mis ojos leían, yo pensaba que le gustaba a Ash, quería gustarle a ella y no a Jaqueline, aunque para ser sincero yo tenía una parte de culpa por haberla ilusionado.

En ese mismo instante, Jaqueline se me confesó y no pude romperle el corazón cuando mi Ash me pidió que me diera la oportunidad con ella, lo hice, después de todo, Ash me trataba como un hijo y yo tenía que obedecerle casi como tal.

...Empezé una relación con Jaqueline...

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#Ash

Joder, lo logré, soy casi cúpido. Mis personitas favoritas andaban, ya llevan casi los dos meses de andar, no eran muy cursis que digamos, y no pasaban mucho tiempo juntos como novios, casi ni lo parecían.

Mi encanto casi ya no se la pasaba conmigo en clases y pues era algo que ya veía venir al haber creado a esa parejita, a decir verdad, lo extrañaba un jodedero (ya sé lo que pensarán, ya no me creo tan fina, ahora soy más noble). Lo que no perdí de él fueron las pláticas por facebook, siempre estabamos hablando por ahí sin falta, a pesar de tener novia él siempre subía sus retos a facebook, no me gusta eso en él. También pedía detalles de su relación con Jaque, quería saber que se la pasaba bien con ella, podía notar su felicidad al hablar de ella, creo.

Cada vez que estaban juntos Jaqueline y mi encanto, yo trataba de ir a molestarlos, a decir verdad me ponía celosa, sentía que me lo trataba mal y odiaba eso, sentía odiarla a ella por no valorarlo como se debía, como yo lo haría estando en su lugar.

Cada día pensaba que iba a ser imposible un ~Alex y Ash~. Maldición.

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El día de hoy obté por no ponerle atención a Alex y Jaque, asi que empezé a hablarle a mis compañeros nerds, era entretenido estar con ellos, me hacían reír. De vez en cuando Jaque se la pasaba conmigo o Alex estaba conmigo, era mejor cuando el segundo estaba conmigo, me sentía mejor, me sentía a gusto.

Este día decidí estar sola, estabamos todos en deportes, me gustaba estar fuera, pero hoy no quería estar abajo (nuestra aula se encontraba en el segundo piso), me subí, las ventanas del salón estaban cerradas, se me hizo raro.

Cuando entré, lo único que recuerdo fue que al dar un paso al entrar me tope con un cuerpo cálido, familiar, me sentí protegida. Después del trance que pase por el golpe en su pecho, que por cierto, se sintió bien, mire a ver quién era el responsable de mi choque.

-Ash, lo siento-. Lo miré, dios, vaya que era alto este tipo, lo único que podía hacer en ese momento fue agarrar sus brazos y quedarme viéndolo, lo mejor que pude hacer.

-N..no te preocupes Alex, es mi culpa, no me fije-. Joder, me ofreció una de sus sonrisas más hermosas.

-¿Ya no bajarás? ¿Quieres que me quede contigo?-. Quiero que me beses.

-No, aqui me quedaré, baja-. Asintió.

Odio mis malditas hormonas, estaba sudando y eso que no había hecho mucho ejercicio. Pero no puedo negar que se sintió bien estar cerca de él, a sólo unos centímetros, sentir su respiración chocar con mi cabeza por un momento, ver su sonrisa tan cerca de mí, estaba enloquecida por el acontecimiento.

Ya no sé qué hacer con esto que siento, no quiero dañar a Jaqueline, no quiero salir lástimada.

Era mi amiga y él, mi amigo.

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#Alex.

Me hubiese encantado quedarme con ella en el aula, como lo imaginé, su cuerpo es tan frácil, me hubiese encantado sentirlo por más tiempo cerca de mi, es tan linda y adorable, su aroma era tremendamente delicioso, para comerla de un solo mordisco.

Desearía que ella fuera mi novia, lo digo de verdad y lo más sincero, quería protegerla, pero no podía porque estaba con Jaqueline. No era feliz sin Ash.

Además, Ash y yo, sólo eramos amigos.