Cherry Blossom ✿ Oh Sehun

✿19 "Mentiras Agradables" ✿

Luego de almorzar, decidimos pasar la tarde en el bosque, estaba un poco frío pero no le quitaba lo bonito, Hun miraba todo muy extraño y entonces entendí lo que pretendía, sin imaginar que quizá podríamos hallar algo que lo ayudase a recordar.

Tocó un árbol enorme y giró como si buscara algo, finalmente lo vi señalar una mancha roja.

No era un sueño –susurró- realmente estuve aquí.

¿Has soñado algo?-cuestioné mientras miraba su mirada perdida.

Ayer, mientras dormía logré recordar que corría en la noche, me dolía el pecho y la cabeza, me apoyé en los árboles para poder continuar pero fue muy extraño porque recuerdo que caí y oí en el vacío un disparo.

Cerró los ojos como si estuviera recordando aquello y me desgarré el alma cuando recordé el primer día que lo vi, algo dentro de mi cambio ese día, no sabía que era pero algo cambió.

Hun seguía con los ojos cerrados y frunció el ceño.

Hay mucha gente –dijo.

¿Dónde?-pregunté pero él frunció aún más el ceño.

Hay rosas blancas en las esquinas de las bancas –susurró.

Finalmente abrió los ojos un poco sorprendido.

Yo besé a alguien –dijo de repente.

Recordé aquel besó intencional mientras dormíamos y entendí que él no lo había hecho queriendo, si no por el recuerdo de alguien en su cabeza, la idea de que él tuviera alguien más en su vida me enfermó. ¿Por qué no veía afiches con su rostro por todos lados o avisos en la televisión?

No te sobre esfuerces –le dije mientras lo veía sujetarse el pecho.

He logrado recordar mucho más de lo normal –dijo y me miró- perdón Alesandra.

¿Perdón? ¿Por qué? –cuestioné dudosa.

Te he causado mucha molestia durante estas semanas –dijo- te he causado problemas con Yixing y te he hecho gastar mucho dinero, en verdad te lo voy a pagar –dijo sujetando mis manos.

No digas tonterías –contesté seria- no te he pedido que me pagues.

Quiero hacerlo –dijo sin soltar mis manos.

Hun, no te he pedido que me pagues nada, además lo hice porque quiero –lo miré.

Entonces déjame pagarlo de alguna forma –me tomó por los hombros.

Mi mirada se cruzó con sus labios y el cosquilleo volvió, era muy agudo el tintineo de las campanitas en mi cabeza pero podía oírlo, podía ver que sus labios se movían pero en mi reinaba el silencio. Mis manos tomaron el cuello de su chaqueta y me impulsé para llegar a sus labios.

Pago con pago, Hun me besaba y yo le devolvía el beso.

Cerré mis ojos por un momento y no oí ni el sonido del viento, ni del agua del lago que estaba cerca, no oí ni el crujido de los árboles, no oía nada, mi alma y aquella tranquilidad se enamoraron.

Me sintió con sorpresa pude sentirlo porque él no se movió, sus manos se quedaron estáticas a cada lado de su cuerpo.

Me separé despacio pero antes de que mis pies aterrizaran en las hojas, Hun me tomó por el cuello y me atrajo otra vez hacia él.

El tintineo se hizo más fuerte y no me despegué, todo lo contrario me aferré a él.

Ninguno fue más allá, sentir solos sus labios con los míos, se sentía más que bien, no me imaginaba como sería si alguno de los dos iniciaba con profundizar el beso.