Esta novela es para quien gusta de historias románticas y algo cursis, bueno demasiado cursi.
Sandy una joven Nutriologa que siempre a sufrido por ser gordita, lleva una vida simple, que a pesar de un triste pasado siempre intenta ver el lado positi...
Sandy Estoy muy nerviosa y triste por regresar a casa y ver lo que a hecho con ella, bajo la ventana del auto un poco puedo sentir la brisa en mi cara eso me ayuda para tranquilizarme porque sino me dará otro ataque, cierro mis ojos un momento y trató de respirar lentamente, ya es tiempo de dejarla ir la casa yo sé que mama quería dejármela para que tuviera un lugar el cual fuera mío pero solo estuve atada por miedo a perderla y papá supo aprovechar eso por mucho tiempo.
Tengo emociones encontradas me siento triste por romper la promesa a mamá pero feliz porque soy libre de mi padre, ya no tendré que soportar su temperamento explosivo, su falsedad y malos tratos, el que quiera controlar mi vida cuando no sabe nada de mí, ahora podré ser feliz y dejar atrás mi pasado para comenzar a vivir con la persona que amo.
David solo me mira desde hace rato sin decir nada en absoluto pensé que quería hablar conmigo, odio que estemos así se que está molesto con todo esto y muy preocupado por mi, por el me llevaría a Chile en este momento y contrataría guardaespaldas para que me siguieran de sol a sombra.
-David dime algo sino no creo soportarlo más o saltaré del auto ahora mismo- le digo bajando aún más el vidrio para que entre más aire.
-Te dará otro ataque?- me dice nervioso, yo solo asiento con mi cabeza después de sacar un poco la cabeza.
-Ahhh hablar...... si hablar ehhh este hablar?- dice nervioso mientras sigue manejando yo le lanzó una mirada asesina.
-DAVID ya TU ERES EL QUE QUERÍAS HABLAR- le digo molesta cuando mi respiración se acelera, pero me sorprende mucho cuando saca una bolsa de papel de su bolsillo, la tomo y comienzo a respirar en la bolsa, el acelera un poco mas.
-Enana respira adentro y fuera, fuera, dentro ya casi llegamos- me dice algo histérico como si fuera una mujer embarazada que tiene que llevar al hospital, se detiene por fin a unas dos cuadras de casa me mira y aún sigue repitiendo lo mismo.
-David basta NO ESTOY EN LABOR DE PARTO- le digo riendo muy fuerte al ver su cara de pánico eso me ayudó a calmarme antes de que me diera un ataque de pánico.
-Ya pasó?- me dice David yo asiento con mi cabeza parece aliviado.
-Si ya pasó el solo pensar en que podría ver a papá y regresar a la casa me altera, pero recuérdame cuando este en labor de parto que te llame si no está Daniel- le digo riendo al imaginarlo todo nervioso por llevarme al hospital.
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-Que labor de parto?!, tú.... tú embarazada!?, como pasó?, bueno si se ...... como pasó, tengo más de una idea de cómo...... por su culpa pero... tú..... tu- dice alterado mirando mi vientre, creo que le dará un colapso mental por cómo me mira.
-NO ESTOY EMBARAZADA tonto además si a si fuera que, tengo 27 años siempre dije que tendría un bebe antes de los 30- le digo algo molesta golpeando su hombro, pero la cara de David sigue igual, si me embarazara ahora me volvería completamente loca pienso.
