Stay with me. [CheolSoo/EN EDICIÓN]

Capítulo 7

El sol todavía no hacía acto de presencia a través de la ventana del cuarto de Jeonghan cuando un constante y molesto golpeteo en la puerta principal de su apartamento le hizo levantarse de la cama, de muy mal humor. Se colocó sus pantuflas de manera agresiva y se encaminó hacia la entrada, Jeonghan estaba dispuesto a cometer un crimen de odio contra cualquiera que estuviese molestando tan temprano, un domingo.

Colocó la clave de seguridad, temiendo romper el monitor de los números, la puerta se abrió de golpe, dejando frente a él a una persona que nunca antes había visto, este desconocido le miraba con ojos coléricos, ni siquiera reparó en su presencia e hizo un intento por ingresar sin siquiera preguntar si tenía permitido hacerlo. 

— ¡Hey, espera! ¿¡Cuál es tu maldito problema!?— Alzó la voz Jeonghan al notar que el intruso de baja, muy baja estatura, estaba a punto de entrar en su hogar de manera muy irrespetuosa. El mencionado ignoró olímpicamente la pregunta de Jeonghan y sacó su móvil de su bolsillo para mostrarle una foto.

—Tu cabello no es igual, pero tu cara es la misma— La voz extrañamente calmada del chico se le hizo familiar. —Tú eres Yoon Jeonghan, el amigo que está ocultando a ese irresponsable escritor llamado Hong Jisoo, ¿no es así? 

En ese momento Jeonghan entendió el porqué Jisoo estaba tan aterrado cuando le notificó el recado de ese tal Lee Jihoon, no había dudas, este era el tan temido Lee Jihoon, su tamaño no le hacía justicia a la magnitud de lo peligroso que se hizo bajo la perspectiva del dueño de la casa. 

—¿En donde está ese idiota?, ¿Puedo verlo ahora mismo? Por cierto soy Lee Jihoon, el editor y corrector de los textos de Hong Jisoo, y lamento la mala imagen que te estoy dando en este momento, esto no habría pasado si mi supuesto jefe no me hubiese descuadrado mi agenda con su impulsivo viaje. 

—Por el pasillo, la segunda puerta a la izquierda— Fue lo que se limitó a responder Jeonghan, una vez que escuchó la explicación del más pequeño. Por un momento pensó en proteger a Jisoo, mintiendo sobre su paradero, pero esos ojos filosos y llenos de ira de Lee Jihoon, le sacaron la honestidad que hace muchísimo tiempo no ponía en práctica. 

—Lo siento mucho Jisoo, esta vez solo puedo ser espectador. 

Jeonghan se limitó a guardar silencio, acompañando a Jihoon que ya estaba a pocos pasos de la habitación que le había prestado a su mejor amigo. Realmente temía por el destino de Jisoo, pero lo mejor era mantenerse al margen de la situación, a fin de cuentas, si se le salía de las manos, podría llamar a la policía. 

~

El sonido de unas voces a lo lejos y los marcados pasos a través del pasillo lograron que Jisoo se removiera con incomodidad en su cama, más dormido que despierto, quiso levantarse para ver qué ocurría afuera, pero a decir verdad, la cama se sentía tan cómoda que lo ignoró por completo, probablemente era los chicos y Jeonghan siendo demasiado enérgicos desde temprano.

Jisoo estaba a punto de volver a quedarse dormido cuando la puerta de la habitación fue abierta agresivamente de una patada. Apenas y tuvo tiempo de reaccionar cuando las luces se encendieron y un peso cayó sobre su cuerpo, sacándole el aire el trayecto.

—¿Estás muy cómodo no crees Hong Jisoo? Finalmente te veo la cara maldito infeliz.

Esa voz, Jisoo se alarmó y de inmediato el sueño que tenía abandonó su cuerpo. No podía ser otro mas que Lee Jihoon, estaba sentado sobre sus piernas y sostenía su pijama con ambas manos, completamente colérico.

—Ji-Jihoonie, hola... también me alegra verte—. Jisoo tomó las manos del más pequeño, tratando de suavizar el agarre, sabía que era hombre muerto, ahora lo único que podría hacer era rezar por su vida y porque Jihoon se calmara por lo menos un poco.