Capítulo 7.

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La relación con el grupo a seguido como antes, pero con Carl y Cam seguimos sin hablarnos, y mucho menos ahora que mi miga es Enid. Y digamos que ella y mi hermana gemela no se llevan muy bien que digamos, Cam tiene un gran caso de celos contra ella y no permite que se le acerque a Carl, y ni se diga de mí, tampoco me deja acercarmele por ser su amiga, absurdo.

  Dejando ese tema de lado por una buena vez, he conocido al novio de Enid; Ron. Es un chico agradable y puedes platicar con él por horas, pero Enid me ha contado que no me deje llevar por las apariencias, que todos en este lugar fingen que todo ésta bien, que te mienten para su beneficio, que son capases de mentir y traicionar. Así que prefiero guardar la distancia con todos y quedarme cerca del grupo y de Enid.

-Entonces.... ¿Se la pasarán leyendo todo el día chicas?. -Habló el recién nombrado.

Ron nos miraba aburrido, estábamos solos en el ático de mi casa. Ya que Cam no dejó que Carl viniera con él, y Enid y yo leíamos un poco para que pasará el tiempo y poder salir al bosque.

-Sí. -Oír a Enid cómo es que le habla a Ron me pone los pelos de punta. Cuando ella esta conmigo no es tan fría y distante como lo es con todo el mundo.

  Sólo asentí y le sonreí a Ron antes de ver cómo se iba. Me paré y dejé el libro de lado para ir por mi arco y flechas para poder salir. Miré a Enid que se colocaba su mochila tranquilamente.

-¿Llevaremos golosinas? -Preguntó.

-Sí. ¿Por qué no?.

Asentí y tome Mi mochila y le metí todas las golosinas que pude. Me la coloqué en la espalda y guatrde unos cuchillos por si acaso los llegaba a necesitar. Salimos de mi casa y corrimos agachadas tratando de que nadie nos viera. Cuando llegamos a la muralla, Enid me ayudó a subir. Cuando estaba en lo más alto la esperé y vigilé que nadie nos estuviera viendo. Cuando escuché el golpe seco de cómo caía me giré hacia la derecha y caí de pie.

-Vamos.

Empezamos caminando lento por si nos veían, después corrimos y escuchamos que alguien nos seguía. Miré a Enid con los ojos bien abiertos. Leí en sus labios que decía "sube a un árbol". Asentí y corrí aún más rápido para poder tomar impulso y subir al primer árbol que vi. Cunado estuve arriba saque mi arco y apunté a quien venia tras nosotras.

-¿Pero qué?... -Susurré incrédula.

Carl había llegado y le gritaba a Enid. Pensé en bajar y enterarme de qué hablaban pero empezaron a caminar y se sentaron en un tronco que estaba tirado por el suelo. Una punzada en mi pecho se incrustó y no quiso salir. A lo lejos vi cómo un caminante se les acercaba, traté de llamar la atención de ellos pero no lo hicieron, salieron corriendo y se refugiaron debajo del árbol donde estaba.

  En cuanto los caminantes pasaron salté y corrí hacia la muralla regresando a mí casa. Estaba furiosa, no, lo que le sigue. Enid me ignoró completamente por Carl, ¿Y si caía y era devorada?, O ¿Si me perdía?. No puedo creer que allá sido capaz de eso. Caminé de un lado a otro en mi cuarto lanzando los cuchillos hacia un punto en especifico. Así estuve durante media hora hasta que una Cam realmente enojada entró a mi cuarto dando un portazo que debió de haber escuchado hasta el mismísimo demonio de satán.

-¿Pero qué coño te pasa?. -Hablé casi gritando.

Estaba enojada, y no tenía paciencia para los celos y malos tratos de Cam. No en este especifico momento.

-¿Dónde esta?.

Alce una ceja mirándola de arriba hacia abajo. Estaba parada con su cara enojada y una mano en su cadera tal cual diva.

-¿Dónde esta quién?. -Pregunté más calmada.

Bufó enojada y dió un pisotón al suelo.

-¡Carl! ¿Quién más Dylan?. -Me crucé de brazos y caminé hacia ella decidida a encararla por una vez en mi vida.

-Mira Cam, yo te quiero porque eres mi hermana gemela, ¡Pero tus malditos celos de esquizofrénica me están volviendo loca!, todo el puto día te la pasas con Carl olvidándote de mí y de los demás, él también tiene derecho a estar con sus amigos ¿Sabes?.

»Y tampoco estoy dispuesta a soportar tus malos tratos de niña pequeña, ¡Eres una estúpida adolescente en medio del apocalipsis zombie y te comportas como una maldita diva!.

  Cuando aprendas a valorar lo que tienes por muy pequeño que sea, vienes y me hablas. Mientras tanto; vete de mí maldito cuarto.«

Apreté la mandíbula para contener las lágrimas que querían salir. Hablarle así a Cam no me agradaba. Su cara se deformaba y se puso roja como un tomate.

-¡Tú tampoco eres un pan de dios Dylan Dixon!, ¿Crees que yo no me siento mal al ignorarte?, ¡Pero tengo que hacerlo porque te la pasas coqueteando con mi novio, y no lo voy a permitir maldita perra arrastrada!.

»¡Así que tú y tu amiga Enid, la otra perra esa, se me alejan de Carl! No quiero a unas malditas perras queriendo quitarme lo que es mío por derecho. «

Reí amargadamente antes de darle un puñetazo en la nariz y dejarla inconsciente en el suelo. Es mi puta hermana y me viene con el cuento de que quiero quitarle el novio. No puedo creer que ella piense eso de mí, mucho menos que me halla dicho perra arrastrada. Me limpié las lágrimas antes de llamar a papá para que se llevara a Cameron.

-¿Pero qué paso aquí?.

Miré a todo el grupo que había entrado a mi cuarto al escuchar el grito de papá. Mordí mi labio y juguete con mis dedos nerviosa.

-Sólo.... Peleamos. -Susurré tratando de no verlos.

Papá se fue con Cameron en sus brazos y vi por detrás de Rick y Michonne que Enid y Carl se asomaban por la puerta.

Problem. [Carl Grimes].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora