Paso a paso

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Era domingo, yo como siempre no tenía ni idea de lo que podía hacer y me aburría tanto que hasta tenía ganas de que fuese lunes y eso sí que es raro en mí ya que los días que más odiaba eran los lunes. Yo seguía pensando en todo lo que pasó el viernes por la noche con José y toda aquella movida, no paraba de pensar en cómo nos veríamos José y yo el lunes en el instituto aunque por una parte no estaba muy nervioso ya que José y yo estábamos hablando por whatsapp después de todo aquello como si nada hubiera pasado aunque se podría decir que cada vez que le sacaba el tema, él se ponía muy nervioso yo lo notaba por su forma de escribir en ocasiones eso me ayudaba a saber cuándo se encontraba.

La noche del domingo recuerdo que soñé con José en lo que hubiera pasado si él y yo nos hubieras besado y todas esas cosas aunque la verdad es que no me gustaba nada el despertar y saber que lo que había soñado era tan solo un sueño. Al despertarme para ir al instituto vi que José me había enviado un mensaje por whatsapp en el que me decía de ir juntos al instituto, yo le dije, "sí, por supuesto" y así se hizo. Cuando estábamos al fin los dos juntos de camino al instituto fue cuando él me sacó el tema del viaje de fin de curso y fue entonces cuando nos pusimos a hablar sobre aquel viaje ya que era muy pronto, yo por mi parte no quería ir ya que no sabía con quién estaría en la habitación porque pensaba que me iba a quedar solo ya que las habitaciones eran de cuatro personas y nuestro grupo era de cinco, lo que esto decía era que uno se quedaría fuera bueno en otra habitación, yo pensé que me iba a quedar solo apartados de los demás porque siempre me pasaba además me sentía algo inferior en aquel grupo debido a que todos llevaban siendo amigos desde los tres años o así y yo apenas llevaba un año y pico conociéndolos y sentía que fuese un estorbo aunque ninguno de ellos se portaba mal conmigo ni mucho menos solo que era muy negativo. De repente mientras José y yo hablábamos, él me dijo, "oye, por cierto ¿te pones con nosotros en la habitación para Granada?", yo le dije "pos' como tú quieras pero tengo una pregunta, si somos cinco y las habitaciones son de cuatro ¿cómo nos vamos a poner?" él se quedó pensativo y me dijo, "creo que tendremos que decirle a Juan Ramón que no hay sitio en la habitación" en aquel momento yo no supe qué decir a aquello que me dijo José aunque por dentro me sentía alegre por poder estar con mis amigos y la vez triste ya que por mi culpa uno de ellos no dormiría con nosotros.

Cuando llegamos al instituto nos encontramos a Alejandro, se vino con nosotros a clase, nos tocaba música y si no nos dábamos prisa íbamos a llegar tarde y todo por culpa de Alejandro ya que se había inventado un juego que se llamaba "pica huevos", consistía en meter la mano entra las piernas y con el palmo de la mano te cogían todo el miembro y a continuación te subían para arriba como si fuese una grúa o algo parecido aunque la verdad hacía mucho daño y eso, yo por mi parte nunca lo hacía y tampoco dejaba que me lo hagan a mí ya que cerraba muy bien las piernas, sin embargo, aquel día sí que se lo hice a José ya que él también me lo hacía a mi aunque a quinta hora de aquel lunes nos pusimos a pegarnos con la flauta por debajo de mesa aunque yo le tenía detrás de mí y se me hacía difícil pegarle con la flauta, cuando me quitaba la flauta yo tenía que cogerla aunque para cogerla siempre le tenía que dar en los huevos aunque hubo un momento en aquella clase que yo le cogí todo el miembro para que así me diera la flauta en ese momento él la tenía empalmada y note como la tenía me hice una imagen en mi cabeza de aquello y joder no tenía palabras ya se podría decir que la tenía algo grande.

Después de aquella mañana yo me enteré que le habían preguntado a José por ask lo siguiente: "¿te gusta Andrés?" él respondió:

"tú eres un/a hijo/a de puta:

1 no soy maricón

2 es un amigo, y como él no hay nadie

3 quita el anónimo porque como me entere de quien seas va a ser peor

5 que te FOLLEN "

(Eso fue exactamente lo que él dijo y soy consciente de que se saltó el número 4)

Eso hizo que haya una gran polémica y nos pusimos a pensar quien podría haber sido aunque nunca lo supimos, esto no hizo que lo mío con José cambiase ya que él era mi amigo y sabía que aquella pregunta era tan solo una simple broma a la no dio importancia alguna.

Era martes y eso significaba ver a Pedro y eso era lo que más me gustaba de la semana aunque también me gustaban los jueves por la misma razón, aquel martes fue algo raro ya que ese día empezamos con un nuevo juego él y yo aunque si soy sincero aquel juego me gustaba y mucho, era un juego de manos nos poníamos la mano en pierna e íbamos subiendo la mano poco a poco hasta que llegábamos a la cintura y era cuando teníamos que meter la mano por debajo de la camiseta y empezar a acariciar toda aquella parte y tocar todo lo que quisiéramos, él no se atrevió a tocarme el miembro el primer día que jugamos pero yo no era él asique yo sí que pude tocar él me dejó, sentí que estaba algo nervioso por si nos pillaban o algo pero yo aun así me atrevía a tocarle. Aquella semana estuvimos jugando a aquel juego aunque ya el segundo día Pedro se relajó y empezó a tocarme todo aunque con algo de disimulo para que así no nos pillasen.  

Llegó sábado era el veintiuno de marzo del 2014 yo había quedado con José y demás para jugar fútbol aunque yo no jugaba yo me daba vueltas en el peny mientras que ellos jugaban ya que no me gustaba jugar. Aquel día vino un chico nuevo era alto, con pelo moreno, ojos marrones, con dientes blancos, delgado, de piel blanca aunque a la vez algo morena se llamaba Alfonso era muy majo le caí muy bien, hablamos todo la tarde, era muy listo, simpático, tocaba la guitarra, el piano, montaba a caballo, cantan en el coro de su instituto y muchas cosas más. Era algo diferente a los demás, nos dimos los whatsapps y hablabamos todos los días aunque volviendo a esa tarde en la que conocí algo de lo más recuerdo a la perfección que ese día jugamos al escondite y me escondí con José en una especie de tubo gigante donde nadie nos encontraba estábamos acostados en el tubo los dos, él delante de mí con sus piernas en mi cara aunque yo le acariciaba la pierna no se porque pero lo hacía me gustaba hacerlo y él me dejaba, fuimos los últimos a los que pillaron después de eso nos fuimos a casa a yo me fui con la madre de José aunque ese día no me pude queda en su casa ya que no me dejaron mis padres pero me daba algo igual ya que hice un gran amigo, Alfonso.

15 añosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora