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Bill

Caminando hacia la salida por los solitarios pasillos del instituto, Bill esta decidido a descubrir la razón por la que su magia no resultó conforme a lo planeado. Su mirada se centra en los cristales que reflejan su nueva imagen como mortal; porta el típico uniforme. Pantalón escolar, camisa de mangas con corbata y saco. Con chulería pasa sus manos sobre su cabello y se da cuenta de que no esta solo.

-¿Tú eres Georg Listing?- pregunta mirando fijo al castaño que se encuentra al final del pasillo. Camina y se planta frente a él -¿no te dijeron que es de mala educación espiar a la gente?-

-Sí, yo soy- la voz de Georg sonó con determinación, entre amable y ¿nervioso tal vez? Sin hacer caso de la ultima pregunta.

Los ojos delineados de Bill se pasaban con descaro por cada parte del cuerpo contrario. Podía entender el porque de la obsesión de Tom y de muchas de esas jovencitas. Georg tenía un cuerpo perfecto, claro que no tanto como el de él, pero su figura esbelta, la anchura de sus hombros y su rostro simétrico con esos profundos ojos verdes lo hacían un espécimen bastante atractivo.O por lo menos lo suficiente para que el rastudo en su desesperación se atreviera a hacer un pacto con él.

Bill sonrie con galanura. Muy consciente de que por la mañana mientras él centraba su atención en Tom durante las clases, Georg se mantenía ocupado viéndolo a él con mucho interés.

Cuando notó al castaño espiandolo segundos atrás, considero que seria una buena oportunidad de saber que tenia de especial. Y no porque Tom y un montón de crías destilaran amor hacia él, sino por el hecho de que su magia no surtió efecto. Eso era algo que lo jodia bastante. Estaba decidido en averiguar lo que pasó usando cualquier medio posible. Así que sin perder tiempo, se lanzo hacia Georg empotrandolo contra la pared.

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Tom

En otro lugar del instituto, Tom camina a paso lento rumbo a la salida. Ha sido un inicio de curso muy inusual y estresante. Por un lado el guapísimo Georg está en su misma clase y por el otro está ese demonio, Bill... quien engaño a todos diciendo que son hermanos con el propósito de "ayudarlo" a enamorar a Geo descubriendo la causa por la cual no funcionó su magia para después ser libre se poseer su cuerpo y además de todo pretendía tentarlo con darle mas cosas a cambio de un precio. Prueba de eso fue ese asombroso cuerpo que le dio por unos momentos "nada es gratis" le dijo, y si Tom quería conservar esa imagen, debía darle su alma.

Ese simple pensamiento hacia que su estómago se revolviera.

Poco antes de girar por el último pasillo hacia la salida, escucho un par de voces que conocia muy bien y lo que vio al dar vuelta lo dejó boquiabierto y totalmente de piedra.

Georg se encontraba contra la pared, con el cabello revuelto, el saco de su uniforme tirado en el suelo, la camisa medio desabotonada dejando a la vista algo de piel del pecho y Bill casi encima de él tratando de desabotonar el resto.

"¡No puede ser! ¡¿Qué están haciendo?¡"Penso. Sin saber porque, dio la vuelta en dirección contraria y tomó el camino largo hacia la salida. Entre tanto, trato de ignorar la creciente presión en su pecho y las ganas que tenía de ponerse a llorar como un niño pequeño. Estaba casi seguro de que el demonio lo vio ahi parado, pero ni se inmutó y siguio con su cometido.

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Bill

-¡¿Qué haces Bill?! ¡sueltame!- los gritos del castaño no podían importarle menos. Una vez removido el saco debía quitarle ahora la camisa, pero no se lo estaba haciendo fácil. Forcejeaba y no le dejaba mover las manos con libertad -¡Bill detente!- lo ignoró. Una vez desabotonada la mitad de la camisa puso su mano sobre su pecho y sin mas le dejo libre. -¿Qué pasa contigo? Estas mal de la cabeza- dijo Geo mientras se dedicaba a cerrar su camisa y levantar el saco para salir rápidamente de ahí.

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