- D o s ;

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Por alguna razón mi corazón se aceleraba con sus pasos que se acercaban a mi.
Llegó a mi lado y se sentó en su asiento, entonces hablo.

— Disculpa pero ¿podrías moverte un poco? Estas demasiado cerca— dijo amablemente pero indiferente

— Oh si claro disculpa— respondí con torpeza

Me moví y ninguna respuesta ni comentario vino después de eso, por lo que decidi hablar. El ambiente era incomodo y esas cosas no me gustaban para nada.

— Soy Naomi, mucho gusto—

— Ya se quien eres—

— ¡Oh! ¿de verdad? Veo que mi reputación crece cada día un poco mas— reí a modo de broma

— Si claro. Eres miss simpatía, siempre te estas riendo de absolutamente todo, y no entiendo por qué. Es molesto.
Ahora, si no te importa intento estudiar ¿o tu me vas a hacer los trabajos?—

Me quede en silencio

— Lo que pensé—  sonrió de costado

¿Pero quien mierda se cree para hablarme de ese modo? Odio que se dirijan a mi con tono de superioridad, esto no se queda así. ¡no claro que no!

— Ahora si me disculpas tú a mi, déjame decirte una cosa.
No se quien te crees que eres, para hablarme en un tono en el que ni siquiera mis padres se atreven a hacerlo, porque es demasiado desagr. — me interrumpió antes de que pudiera seguir.

— Hablas demasiado. No me interesa en lo mas mínimo lo que pienses ¡ni como te hable el resto del maldito mundo! Ya es suficiente ¿no te parece?—

eso me tomo por sorpresa, no podía creer lo que me estaba diciendo. estaba muy alejado del azúcar esta persona

— Ok como quieras, no te molestare más—

Le regale una de mis mejores sonrisas a lo que el contesto con un gesto de disgusto

[...]

La clase siguió normalmente sin palabras de por medio. Él por su lado y yo por el mio.

Salimos al descanso y jimin lo esperaba fuera del salón para ir a comer a la cafeteria como es costumbre de esos dos.


Ahora si que no puedo entender como son amigos, son mundos totalmente paralelos. Como sea...


Me fui rápidamente a la cafetería y pase corriendo por su lado. Pude sentir su mirada clavada en la nuca. No le di importancia y me apresure,  ya que mi amigo me estaba esperando con la comida, en la mesa de la cafetería.

— ¡Andy!—

me pare en frente de la mesa, actuando un llanto.

— Te extrañaba amigo, es tan triste que no estemos en la misma clase, que hace que me duela justo aquí,  ¿ves?— señale a mi corazón

— Justo en la amistad— respondió siguiendome el juego

— A veces me pregunto, ¿por qué somos amigos?
Luego recuerdo que tenemos el mismo desorden mental, y se me pasa—

 So far away || MYG Donde viven las historias. Descúbrelo ahora