You Are My Everything

CAPITULO 8

Desayuno para dos, problemas y algo más...

NARRA ÁLVARO

Me despierto por el sonido del móvil. Miro el reloj de la mesilla, las tres menos veinte. Me incorporo y lo cojo, me quedo blanco al leer el mensaje pero sobre todo al ver de quién es. Miro a Silvia y dejo el móvil otra vez en la mesilla, ella no se merece esto, mañana la llamaré y dejaré las cosas claras.

Me levanto y al encender la luz Silvia se remueve voy a la cocina y me bebo un vaso de agua. Ese mensaje ha conseguido ponerme nervioso y temo perder a Silvia.

Al volver al dormitorio y meterme en la cama Silvia se da la vuelta y me abraza.

- ¿Dónde estabas? - pregunta medio dormida

- Tenía sed - la beso la mejilla - duerme es tarde

No quiero mentirla, no me gusta. Así que cuanto antes termine con esto mejor.

***

NARRA SILVIA

Me despiertan unos gritos. Álvaro está discuendo con alguien. Miro la hora son las ocho de la mañana. Al ratito entra en la habitación con el móvil en la mano, está enfadado.

- Lo siento, ¿te he despertado?

- No tranquilo, no podía dormir

- Venía a despertarte he preparado el desayuno.

Salgo de la cama y me acerco a darle un beso.

- No pienses tanto, vamos a desayunar

NARRA DAVID

Me despierta un rayo de luz que entra por la ventana. Me giro y veo a Cris al otro lado de la cama, esta desarropada y lleva puesta una camiseta que la queda gigante.
Me levanto con cuidado de no despertarla y la arropo. Salgo de la habitación para preparar unas tortitas con helado de nata y sirope de caramelo y cola cao.

NARRA CRIS

Noto que algo me esta tocando los pies, me levanto dando un salto al ver que es un perro. Me doy cuenta de que no estoy en mi habitación, salgo de la habitación en busca de alguien.
Al pasar por la cocina  me doy cuenta de que hay alguien me dirigo hacia ella cuando veo que es David que esta bailando mientras esta batiendo los huevos.
Entro sigilosamente y le toco un hombro él se asusta y me tira parte de los huevos batidos.

- dios que susto me has dado Cris.

- aaah - grito - mira como me has puesto

David se empeza a reir de la situacion, pero yo no lo pienso dos veces cogo un puñado de harina y se lo tiro al pelo pero el no se queda corto y me tira todo el paquete de harina.
Ante esta situacion no pudimos desayunar tortitas entonces desayunamos unas galletas oreo que tenia en la despensa.

NARRA IRENE

Me doy la vuelta y me doy cuenta de que estoy sola en la cama. Juraría que ayer me acosté con Dani. Justo en ese momento se abre la puerta.