Chica de los ojos verdes ↬ Lutteo #1

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Jueves 12 de febrero, 2016

Faltaba menos.

Luna no paraba de contar las horas y hacer algo para que Gaston las perdone.

-yo creo que una coreo-volvió a insistir Ámbar.

-no, no es Matteo o Simón, Ámbar-le contestó, ya fastidiada, su prima.

-¿y que esa tal primita, tenga entrada libre a la pista? Por lo menos por un mes-esa idea convenció a Luna como para anotarla en la lista que se encontraba entre ellas dos.

-Támara ¿lo hará?-preguntó dudosa la chica que anotaba.

-con tal de que no nos metamos en problemas, si-habló la ex- engreída.

-okay-y un tilde en celeste apareció al lado de la idea, eso ya estaba decidido.

-¿vamos a pasear? No quiero estar acá-dijo la más alta.

-¿a hacer coreo en el parque?-pregunta Luna, esa idea era absolutamente tentadora.

-claro que si-y antes de irse, la rubia volvió a hablar-¿llamo a los chicos?-preguntó desde la puerta.

-como quieras-habló la otra chica desde la cama, garabateando su hoja.

Mientras una hablaba con los chicos, la otra, leía los mensajes de la entrenadora del equipo roller.

Al leer uno demasiado emocionante, corrió hasta donde estaba su prima.

-¡el campamento comienza antes!-gritó emocionada. La Benson mayor la miró confundida.

-¿y como lo sabes?-preguntó mientras en una lista buscaba a alguien mas para invitar.

La "salida" de Ámbar y Luna de estaba convirtiendo en una fiesta, aún que secreta para Luna, por supuesto.

-Támara me aviso a mí y creo que a Simón, que se yo, el tema es ¡nos vamos en dos días!-gritó aún mas emocionada.

-¿¡QUE!?-gritó la platino-¿¡Dos días!?-volvió a hablar.

-¿si? ¿a caso no estas feliz?-preguntó aún mas confundida la castaña.

-claro que si pero no se ni que patines voy a llevar-en definitivo, Ámbar no había cambiado, podría dejar de ser engreída pero la preocupación por la moda era algo inevitable para ella.

Ámbar, preocupada pensando una solución, no se dio cuenta de que su prima se acercaba al listado para la fiesta improvisada. Aún que ahora, la idea, era totalmente tentadora, ya qué, 2 días después viajaban.

-traidora, mentirosa-susurró Luna con una sonrisita.

-bueno...-trató de hacerse la distraída, aún que mucho no le costó, y habló otra vez-...vamos al parque-y se fue a su cuarto.

∆×∆×∆×∆

3 horas después hacía 30 minutos (y más) todos estaban en el parque patinando.

Ámbar y Simón ya se habían "cansado" y comenzaron una muy animada y cerca "platica de amigos" , Jim, Yam, Ramiro y Nico hablaban o se molestaban entre si.

¿Luna y Matteo? Patinando, recordando una de las coreografías que habían hecho en una de las competencias.

-eu chicos, juguemos a verdad o reto-propuso Nico.

-¡no! ¡algo mejor!-habló su novia-¡la botellita!-sugirió alegre.

-¡verdad o reto!-dijeron todos, evitando el comentario del juego de la botellita.

Todos, quedaron en circulo.

Aún que en parejas.

Nina y Gaston (quienes también patinaban hace rato, como Luna y Matteo), Luna y Matteo a su derecha, Jim y Nico a la izquierda de la primer pareja, Simón y Ámbar frente a Luna y Matteo, y Ramiro y Yam, a su lado.

-empiezo yo-gritó desesperado Ramiro.

-ya amor, tu primero-contuvo las ganas de pegarle Yam.

-mmm...-pensó-...Gaston ¿verdad o reto?-prosiguió mirándolo.

-verdad-y por como iban las cosas, le convenía a Ramiro, hablar sobre lo de su "primita".

-¿amas a Nina?-dijo sin más, por fin, Ramiro hizo algo que los demás le decían, mejor dicho, pensaban.

-como nunca-muchas respondieron con un "owwww" pero los chicos solamente molestaban.

Y así siguieron hasta un momento en particular, el cuál vale la pena contar.

-primita...-sonrió sinicamente la rubia-¿verdad o reto?

-reto-y aquí comienza el momento.

Ambas se miraron.

Una gran cualidad que tenía Ámbar, era, poder hablar con solamente que la mirada.

Es por eso, que Luna entendió el mensaje, sin embargo, los demás pidieron que hablé, así todos, molestaban por la consecuencia del hecho.

-un beso con el rey-ahora si, todos entendieron.

Matteo le agradeció a Ámbar por eso.

Él extrañaba de todas las formas posibles e imposibles a Luna.

Una de las posibles pero a la vez imposibles, era su labios.

No sentía ese sabor a frutilla con brillo hacía mucho.

-no-habló la chica entre dientes.

-la prenda es peor, primita-la retó la rubia.

Ella bufo y quedo frente al chico.

Ambos se acercaban lo mas lento. Ambos hacían el momento especial.

Matteo, por parte, aprovechaba para demostrar que Luna era solamente de él.

Luna, disfrutaba el momento, así, ninguna chiquita se acercaba a lo que era suyo.

5cm faltaban para el impacto.

4...

3...

2...

1...

¡Explotó!

El beso fue lo más duradero de los pulmones por parte de los dos.

Podrían jurar todos, que ese beso, duró a reloj unos 15 minutos.

Unos muy hermosos 15 minutos.

Luna y Matteo, sentían que no pasaba el tiempo.

Podrían seguir a más, sin embargo, por las circunstancias, pararon.