Capítulo 3

22 8 0
                                    

Mis cabeza estaba totalmente confundía, no sabía que me estaba diciendo o si era verdad. Aunque no sabía si realmente me importara que fuera verdad.

Lo mire a los ojos y él me estaba mirando, con sus ojos negros que hacían que me estremeciera. No sabía que hacer ante esta situación, enterarme que el mejor amigo de mi hermano gustaba mío me parecía completamente un cliché, aunque tampoco sabía si era verdad.

–Ashton, párate–intente sacarlo–Vamos a bailar.

–No me interesa bailar, quiero estar aquí contigo.

–Yo no quiero eso, ¿puedes dejarme ir?–negó–Llamaré a Liam y no le gustará nada esta situación.

–Liam está por ahí, no te va a oír. Vamos Sam, dame una oportunidad.

Me rendí de luchar y me quede con mis brazos a los costados, viendo cómo el gran Ashton me miraba como si fuera la gran maravilla del mundo.

–¿Pasarás toda la noche arriba mío?–reí.

–No, lo siento–salió de arriba mío y se puso a mi costado–Lo siento, ve a la fiesta si quieres.

Gire a mi cabeza para poder verlo y se encontraba boca arriba con los ojos cerrados, su respiración era agitada y apretaba sus puños de vez en cuando.

–¿Por qué estás tan tenso?–pase la mano por su pecho.

Abrió los ojos lentamente y giró su cabeza para mirarme, se veía lindo de esa manera, de esa manera indefensa y al vez capaz de pelear con un león. Sonrió y hizo que me estremeciera, como siempre. Pase mi mano por su rostro y cerró los ojos al contacto.

–¿Te puedo besar?–pregunté.

Me miro a los ojos y enseguida me tomo por el cuello, en dos segundos me encontraba arriba de él, besándolo como si no hubiera un mañana.

Maldito Ashton Scott.

(...)

–¿Se puede saber donde estuviste toda la noche?–Zoey se encontraba en la cocina desayunado junto a mi hermano–¡ME DEJASTE SOLA!

–Por favor Zoey, me duele la cabeza–la mire con mala gana–Luego hablamos de eso.

Asintió y siguió con lo suyo. Yo por mi parte me prepare el desayuno y subí a mi habitación.

Entre sin hacer ningún ruido ya el el señor Scott seguía durmiendo. Me senté en los pies de la cama a comer y observar cómo dormía.

Si, lo sé, un poco psicopata.

–¿Que tanto me miras Samantha?–abrió lentamente los ojos–¿Samantha?–saltó de la cama.

Lo mire raro y deje mi vaso sobre mi mesita de luz.

–¿Qué Ashton?–se agarro la cabeza y negó repetidas veces.

–¿Qué mierda hago en tu habitación?–pateo una silla–¿No estuvimos juntos, verdad?

Fruncí el ceño–¿Es broma?–negó–Tu me arrastrarse hacia mi habitación anoche y me dijiste unas cuantas cosas, ¿y ahora no te acuerdas?

Cerró los ojos de nuevo y se contuvo para no golpear algo.

–Nada de lo que dije era verdad–en ese momento sentí como mi corazón se rompía–Estaba ebrio y no sabía lo que hacía.

Se visto rápido y salió de mi habitación en un segundo, dejándome ahí sin saber cómo reaccionar. Realmente no sabía si me importaba o no que fuera verdad lo que me había dicho, pero por un segundo me había imaginado una vida junto a Ashton Scott.

Mi celular comenzó a sonar, me había puesto una alarma para no dormir todo el día. Eran las 14:30 y tenía ganas de salir a caminar un poco, ya no me importaba lo que había pasado esta mañana, todo seguiría igual, como había dicho el solo estaba ebrio y nada significada nada.

Me di una ducha con agua fría y me puse ropa fresca, tenía planeado salir andar en bicicleta o ir al parque. A mi favor, Lottie todavía seguía en casa y tendría un acompañante.

–¿Me puedo dar un baño?–me pregunto y asentí–Esta bien, en 10 minutos bajo.

Para mi suerte no tenía que ordenar nada, mi hermano había limpiado cada rincón de la casa y la había dejado mejor de cómo estaba antes. Él estaba durmiendo, y sus amigos se habían ido a la mañana.

Me senté en la sala a esperar a Zoey, entre a mis redes sociales y revise Wattpad.

Nada importante.

El timbre sonó pero no me levante, sonó de nuevo y tampoco me levanté. La persona que estaba esperando que le abra empezó a golpear muy fuerte la puerta que hizo que le abriera.

Scott.

–Hola–dijo sin un tono de alegría–¿Liam está despierto? Vine a recoger unas cosas.

–Todavía sigue durmiendo, viene más tarde si quieres–cerré la puerta pero su pie me lo impido.

–Las necesito ahora–por favor dios, dame paciencia–¿Podría pasar a agarrarlas?

Me hice a un lado y él entro. Se dirigió hacia la sala y volvió con una caja en manos.

–¿Eso es todo?–asintió–Bueno, adiós.

Paso por mi lado empujando mi hombro y sin decir adiós se fue.

–¡Vete a la mierda!–le grité y luego di un gran portazo.

El día estaba hermoso, el cielo estaba despejado y había un calorcito que te hacía sentir a gusto. Con Zoey decidimos ir a caminar a la playa. Veníamos las dos en silencio, mirando hacia abajo sin decirnos nada.

–Me acoste con Mike–dijo rompiendo el silencio.

–Y yo con Ashton–se paro en seco.

–¿QUÉ?–gritó emocionada–¿CON EL MEJOR AMIGO DE TU HERMANO? SAMANTHA, ¡ERES LA MEJOR!

–Ya cállate, solo estábamos ebrios–dije de mala gana.

Se puso enfrente de mi y me impido el paso.

–Samantha Williams, dime todo con lujo y detalle, y porque estás así de enojada.

–No lo estoy, y solo tuvimos sexo Zoey, cuéntame tú qué tan bien te fue.

Negó repetidas veces.

–Está bien–bufé–Yo me encontraba bailando felizmente cuando el señor Scott me puso en sus hombros, de la nada estaba subiendo la escalera en dirección a mi habitación–hizo una seña para que siguiera–Dijo unas cuantas tontadas y luego nos tumbamos en mi cama, me calenté, él se calentó y tuvimos sexo.

Me miro confundida.

–¿Qué tontadas te dijo?

–¿Eso importa?–asintió–Que me amaba.

Cerré los ojos y una puntada en mi corazón hizo que me largara en llanto. ¿Por qué estaba reaccionando de esta manera? Él no me importaba en absoluto, siempre fue el mejor amigo de mi hermano y nada más, un hombre más que rondaba en mi casa.

–Tranquila cariño, ¿cuál es el problema de que te ame?–me abrazo.

–En la mañana me dijo que solo estaba ebrio, y que nada de lo que dijo era verdad.

–No creo que sea así como él dijo–me miro a la cara–Ese chico está enamorado de ti desde que tengo uso de razón, ¿acaso no has visto como te mira?

La mire confundida y ella solo sonreía. ¿Enamorado de mi? Como iba a ser eso verdad cuando él negó todo lo que dijo.

–No creo que sea así como tú dices.

–Él te ama Samantha, te lo aseguro.


////////////////////
JELOW! ¡ESPERO QUE LES GUSTE!

(*)

ASHTONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora