Capitulo 13

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Cuando entro en la tienda, lo primero que hago es buscar medicamentos para la cabeza y alguna comida o bebida. Vodka, mm... No está mal, whisky tampoco está nada mal. Me voy al cajero para que cobren lo que llevo.
- ¿Tienes carnet?
- ¿Perdona? No llevo carnet, no puedo vender bebidas alcohólicas sin el carnet. 
- Pero sí tengo 18 años, ¿venga no te parezco una mujer de 18 años ? Si quieres te lo pago en bajar los pantalones. Le empiezo a tocarle la camisa. Es un chaval, es joven creo que la misma edad que yo, él se estremece y se retira para atrás. Rodeó la caja hacia él, le doy un beso en la boca y otro, mientras que le desabrocho el pantalón.
- Esto está mal, no deberíamos hacerlo.
- Lo sé, pero si me dejaras llevarme las botellas...  No estuviéramos haciendo esto.
- Okay, okay, lo siento; ten las botellas.
Ostras es la primera vez que me rechazan así, tampoco me importa, bueno al final ganó yo; cojo las botellas y el medicamento. Le doy un beso en la mejilla y me voy.
Cuando entró en mi habitación empiezo a reírme a carcajadas, lo único que pienso es lo gracioso que ha sido. Me voy a la cocina, cojo el paquete de medicamentos que hay, sin pensar dos veces lo trago, abro el grifo y bebo agua de allí.
Una canción suena desde mi bolsillo y me quedo sorprendido de quién me puede llamar a estas horas y además no tengo a nadie y allí me doy cuenta que es el móvil de Theo. Theo me está llamando, pico el botón con los dedos temblando.
- ¿Si? ¿Diga?
- Hola,
- Theo.

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